Extremadura sigue liderando la búsqueda de alianzas en la negociación sobre el déficit. Y la baza que ha jugado es la de premiar a los cumplidores y penalizar a quienes no redujeron su déficit lo suficiente el pasado año.
En términos políticos, eso significa poner de su lado a Madrid, Aragón, Andalucía, y Castilla-La Mancha, que han comenzado ya a hacer declaraciones públicas en defensa del modelo extremeño. La propuesta de Monago pasa por que cualquier región que quiera excederse del 1,2% del déficit deba "pedir el voto de las demás regiones" en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera, el órgano competente en la fijación del déficit. De hecho, Monago personalmente argumenta que "la lealtad y el cumplimiento deben ser recompensados en aquellas regiones que han hecho un esfuerzo especial para reducir sus desequilibrios".
Pero en términos económicos, el plan de Monago no significa lo mismo para todas las autonomías que componen el frente que se está alineando contra Hacienda. El sistema de premios y castigos que plantea Monago significa, en la práctica, un modelo de déficit asimétrico que es, precisamente, el que critican aliados del barón popular como Madrid o Aragón. De hecho, el consejero de Presidencia del gobierno aragonés, Roberto Bermúdez de Castro, ha asegurado que "el déficit debe ser igual para todos; esa es la línea roja".
Según ese modelo de penalizaciones e incentivos, el 1,5% de déficit medio con el que se opera como hipótesis de trabajo se lograría con Extremadura como autonomía más beneficiada que podría obtener hasta un 2,6%, una cifra a la que Hacienda se ha opuesto abiertamente. Esos márgenes podrían ser todavía mayores si Hacienda deja la media de déficit en el 1,8% ó 1,9% como ha insinuado el propio departamento. El informe que Extremadura ha remitido a las demás autonomías y que publicó Vozpópuli, plantea el siguiente reparto teniendo en cuenta esos incentivos y penalizaciones:
- Sometidas a penalización quedarían las autonomía que más se han desviado del objetivo en el año 2012. Eso significaría que la Comunidad Valenciana debería cerrar 2013 con un déficit del 1,2% y Baleares con una cifra del 1,1%. Ese sistema también penalizaría a Cataluña que debería cerrar 2013 con una tasa del 1,3%.
- A cambio, la recompensa por incentivos al cumplimiento beneficiaría especialmente a quien propone el sistema: Extremadura que podría cerrar 2013 con un déficit un 75% superior al límite planteado por el Ejecutivo hasta tocar el 2,58%. De igual modo, Andalucía recibiría casi cuatro décimas más en 2013 para cerrar el año con un déficit del 1,87%.
Los cálculos del frente que está liderando la Junta de Extremadura llegan apenas 24 horas después de que Mariano Rajoy pidiera "grandeza" a sus barones. El Presidente José Antonio Monago respondió a Rajoy asegurando que "actuará, como siempre, con generosidad, sensatez, sentido común y altura de miras", pero "siempre dentro de la Constitución". Según Monago, "el Gobierno regional actuará dentro de lo que dicta el 'seny' extremeño".