Lefties, la low cost del grupo de Inditex, ha comenzado estos días a vender sus productos online, como ya vienen haciendo desde hace años sus 'hermanas' del grupo: Zara, Bershka, Stradivarius o Oysho, por citar algunas. No obstante, la apuesta de Lefties ha resonado el sector porque, frente a ella, Primark, la otra gran low cost, ha rechazado una y otra vez formar parte de las marcas que venden en Internet.
Así, el gigante irlandés se defiende explicando que la venta por esta vía no le resulta rentable, y que el coste del envío a domicilio no podría ser soportado por los bajos precios a los que venden las prendas. No en vano, UBS realizó un estudio hace unos meses en el que concluyó que Primark perdería 2,10 libras (2,4 euros) en un pedido de 33,30 libras (37,2 euros), la cifra de la cesta media en la compañía.
Entonces, ¿por qué Lefties sí puede permitírselo? Una de las principales reside en la forma que gestiona su stock, algo que debe al grupo al que pertenece, y, por tanto, también se beneficia del despliegue logístico de Inditex.
Control del sotck...y gastos de envío
En este sentido, Lefties ha implantado recientemente la gestión "integrada" del stock tanto en España como en Portugal (lo que internamente denominan proyecto Sint), que permite gestionar el stock de tienda para los pedidos online.
Así, la compañía tiene un control absoluto sobre las prendas (cuántas son, dónde están) y permite atender desde ese punto de vista los pedidos hechos en la web; cuando entra un pedido, se puede servir no solo del almacén, sino también en una tienda determinada. Esto permite a la compañía gestionar de forma más eficaz el inventario y ser más rápido a la hora de realizar los envíos.
No obstante, hacerlo rentable tiene asociado un coste, que Lefties ha decidido incluir. En este sentido, el pedido online solo es gratis si el cliente lo recoge en tienda o hace un pedido a domicilio superior a 39,95 euros; si no se llega a ese mínimo, el cliente paga gastos de envío.
La apuesta 'online' de Inditex
Inditex, que está reestructurando su porfolio de tiendas, pretende en base a su plan estratégico disponer de locales más modernos e integrados, cuya comunicación con la web sea inmediata y la digitalización completa. En esta línea, la compañía prevé que un 25% de sus ventas serán online en 2022, frente al 14% de 2019.
"Una red de tiendas de alta calidad, en las mejores ubicaciones y con venta online se espera que generen un crecimiento de las ventas comparables a largo plazo de entre el 4% y el 6% anuales. Se espera que estas iniciativas resulten en mayores niveles de rentabilidad y menor intensidad de capital", insistía en su plan presentado en junio la empresa fundada por Amancio Ortega.