A las puertas del 41 Congreso Federal del PSOE el anfitrión de la cita y presidente del Congreso, Juan Espadas, ha pasado por la televisión pública para hablar de la apertura de un encuentro que definirá quiénes son los rostros de la nueva ejecutiva socialista y cuál es la agenda que marcará el rumbo de los de Pedro Sánchez.
La de Andalucía es la federación más importante cuantitativamente, aporta 268 delegados, casi un 25% del censo y también es el origen de 61 diputados de los 350 que hay en el Congreso de los Diputados. Pero también lo es, merced a su tradición y a su legado histórico, cualitativamente. El PSOE tiene claro que sin un PSOE andaluz fuerte nunca recuperará la mayoría en España.
Por eso el rol de los socialistas andaluces no se pone en duda para la ejecutiva que saldrá de este Congreso, “siempre ha habido y habrá representantes andaluces en la cúpula”, ha dicho Juan Espadas. Eso sí, el líder andaluz ha admitido su desconocimiento sobre los integrantes del inminente PSOE, “sobre los cambios, el único que lo sabe es él ... es él el que tiene que hacer su equipo”, ha dicho en alusión a Pedro Sánchez.
Liderazgo regional en duda
Como anfitriones, los socialistas andaluces lo hacen en un momento de indecisión a la que les cuesta acostumbrarse. Tras 4 derrotas electorales consecutivas, la cita llega con una inédita mayoría absoluta del PP de Moreno Bonilla en Andalucía.
Al socialismo le cuesta vestir el traje de opositor que le obligan las urnas en los últimos 6 años, tras ser un partido que gobernó durante 37 años en San Telmo. Esta adaptación genera incomodidad y voces discordantes contra el actual rumbo que marca Juan Espadas y que, denuncian sus opositores en las filas socialistas, es un rumbo designado desde Madrid por Pedro Sánchez.
Juan Espadas viene viendo como exmandatarios andaluces se posicionan en su contra, tanto los afines al anterior mando de Susana Díaz como discordantes que proponen un nuevo rumbo. Mientras se escriben estas líneas, solo dos secretarios provinciales –el de Jaén y Sevilla- le respaldan y, al menos públicamente, Pedro Sánchez no le ha defendido ante esta nueva situación de debilidad creciente.
Cuestionado por el respaldado de Sánchez, Espadas ha dicho que su trabajo lo desarrolla en coordinación y “con el consejo de nuestro secretario general; en todo momento he tenido su respaldo y su cariño” ha afirmado.
Respecto a las críticas que van en aumento ante su liderazgo y su falta de independencia respecto a las directrices de Moncloa, Juan Espadas ha emplazado nuevamente al Congreso regional que se realizará antes de marzo de 2025, esperando “que haya debate y que haya alternativas”, recordando que él mismo representó una alternativa en las primarias que defenestraron a Susana Díaz.
“Vengo con los deberes hechos”, ha afirmado el socialista que, sin embargo, no ha consolidado en respaldo electoral ni en respaldo en las distintas encuestas su trabajo como opositor. Espadas lleva meses plantando batalla al PP andaluz precisamente en el ámbito de los servicios públicos, llevando a los tribunales y a la Fiscalía Anticorrupción la gestión sanitaria del PP durante la pandemia, por el presunto desvío de cerca de 700 millones de euros a la sanidad privada con diversos métodos.
Espadas ha reclamado el hecho de que el último sondeo de Social Data para Publicaciones del Sur revela que siete de cada diez andaluces reprueba la situación de la sanidad pública.
Defensa ante los escándalos que salpican a Sánchez
La cita de Sevilla deberá afanarse mucho por generar contenidos que destaquen por encima de las numerosas crisis que salpican al PSOE en las últimas semanas. La gestión de la Dana, las declaraciones de Aldama o los presuntos delitos que salpican al núcleo familiar de Sánchez empañan las propuestas que puedan emanar de Sevilla.
Ante esta evidencia que se traduce en un limitado acceso mediático a los líderes socialistas en el Congreso, Espadas valora que la situación es fruto de la estrategia de la oposición, “este es un Congreso magníficamente bien planificado por la derecha de este país y por todos los intereses que la rodean".
El anfitrión de la Federación política más importante del país y del partido que gobierna destaca el “absoluto acosos y derribo y deshumanización permanente” al que está siendo sometido Pedro Sánchez y recuerda que “hay que respetar los tiempos de la justicia”.
Espadas también ha abordado las declaraciones de Aldama que han puesto en la picota a Cerdán, Ángel Torres, y al número 2 de María Jesús Montero: Carlos Moreno, alguien a quien Espadas ha alabado y ha puesto la mano fuego por él, “es una persona honesta, un trabajador público al que conozco desde hace 20 años”, denunciando la “indefensión” en la que se encuentran los acusados por Aldama sin que haya presentado pruebas por el momento, “de ese señor no voy a creer absolutamente nada hasta que no ponga pruebas sobre la mesa”.