La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas se encontró este miércoles en el Congreso de los Diputados con duros reproches por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mientras este último guardaba las formas con el Partido Popular en plenas negociaciones del CGPJ y se mostraba amable y conciliador con formaciones como ERC o Bildu.

Pese a las descalificaciones vertidas en la Cámara baja por Sánchez, la formación naranja mantiene su mano tendida con el Gobierno para alcanzar acuerdos, según fuentes parlamentarias de Cs, quienes quitaron hierro a los ataques del presidente: "Tenemos inmunidad de grupo", avisaron.

Sánchez arremetió contra Arrimadas por no cambiar el "tono" contra el Ejecutivo pese a su fracaso en Cataluña, en la que se quedaron en seis escaños, y le invitó a ensayar "lo único que no han probado" en su formación: "Comportarse de verdad como un partido de centro".

La catarata de reproches contra la portavoz naranja siguió por su "retórica incendiaria y divisiva" contra el Gobierno de coalición, al tiempo que Cs mantiene acuerdos con el PP con el apoyo de Vox para sustentar ejecutivos en la Comunidad de Madrid, Andalucía o Castilla y León.

Y ello porque, a juicio de Sánchez, los de Ciudadanos "cuando llega el momento de la verdad" siempre "cambian la política útil por la política pequeña", como sucedió cuando votaron no al decreto de los fondos europeos sin haber logrado justificar ese rechazo.

Pero en lo que más incidió el jefe del Ejecutivo fue en destacar que, pese a haber perdido 30 escaños en el Parlament de Cataluña, Arrimadas subiese a la tribuna del Congreso "como si oyera llover" y con un "veto a la socialdemocracia" como si Cs estuviese en la etapa de Albert Rivera.

"Pactar con la ultraderecha no sale gratis. Han perdido treinta escaños en Cataluña y sube a la tribuna como si oyera llover", subrayó Sánchez, quien volvió a aventar uno de los mantras del riverismo. "¿De verdad, señoría? ¿Va a hablar de la banda de Sánchez? ¿Todavía seguimos así?, pero ¡si eso es de Rivera!", exclamó el presidente del Gobierno entre aplausos de los socialistas, según constató Efe, si bien la presidente de Cs no llegó a utilizar este término.

A renglón seguido, le hizo ver que en Ciudadanos, "en su corta vida, han probado de todo". Volvió a mencionar el pacto con la derecha y la ultraderecha, aunque a juicio de Sánchez "lo único que no han probado" los naranjas ha sido comportarse "como un partido de centro", estrategia a la que retó a Arrimadas a seguir "si se atreven".

La réplica de Arrimadas

En su réplica, Arrimadas acusó a Sánchez de presentarse en el Congreso con un "triunfalismo vacío" en medio de la pandemia y le pidió que "no se esconda" ante la Semana Santa como, a su juicio, hizo en las pasadas vacaciones navideñas. Previamente, había ofrecido cuatro acuerdos de Estado ante la situación política y económica provocada por el coronavirus.

En primer lugar, un pacto para "prevenir nuevas olas que pueden venir y acelerar la vacunación"; un segundo acuerdo para "rescatar a los españoles de la ruina" con ayudas directas; un tercer pacto para "cumplir con las reformas que pide Europa"; y en último lugar, aumentar al 2% el presupuesto en ciencia e investigación.

También reclamó al presidente que lidere un "compromiso ético" frente a los "ladrones" de vacunas entre los partidos políticos. Y sobre la acusación de subir al estrado "como si oyera llover", Arrimadas, le devolvió el golpe acusándole de tener la misma actitud después de que en los últimos dos meses hayan fallecido 20.000 españoles en la tercera ola del covid.

Arrimadas le reprochó, igualmente, que se dedique "a bailar el agua" y que "no mueva una ceja" con Bildu cuando habla de España como un Estado "torturador". "Estoy convencida de que le da más importancia a los escaños que a otros números, cuando le debería preocupar mucho más los fallecidos", le avisó a Sánchez al final de su réplica.

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