Isabel Díaz Ayuso sigue reclamando lo mismo a Génova, pero lo hace con un discurso diferente. Ya no habla de celebrar cuanto antes el congreso regional del PP de Madrid, sino de convocar sin dilación las primarias para elegir al nuevo líder del partido en la comunidad. Un cambio de discurso que viene provocado por las insinuaciones de la dirección nacional sobre una candidatura de Almeida y las sospechas sobre un 'pucherazo' en el censo de militantes.
Así lo aseguran a Vozpópuli dirigentes del PP próximos a la presidenta madrileña, que hablan de una "respuesta" de Ayuso a Génova tras las informaciones que apuntan a una ofensiva para impulsar a José Luis Martínez-Almeida como futuro líder del partido en Madrid: "Hablando de primarias, ella ha querido dejar claro que sigue adelante con su candidatura y no le asusta competir con nadie. Que hablen las urnas".
No obstante, más allá de ese 'recado' a las direcciones nacional y autonómica, Ayuso reclama la celebración urgente de las primarias porque, hasta que no se convoquen esas elecciones internas, no tendrá acceso al censo de militantes: "Ella ya ha anunciado su candidatura, pero no recibirá ese registro hasta que Génova ponga fecha al proceso".
Ella ya ha anunciado su candidatura, pero no recibirá ese registro hasta que Génova ponga fecha al proceso
Desde el entorno de Ayuso afirman que tanto en la primera como en la séptima planta de Génova prefieren un congreso y unas primarias a siete meses vista porque "necesitan un candidato alternativo y tratar de controlar un censo de militantes que ahora es claramente favorable a Isabel".
En ese sentido, las mismas fuentes asumen que en Génova "están montando la candidatura de Almeida" y, además, "controlando desde ya" el registro de militantes para blindar los apoyos suficientes que garanticen una victoria del alcalde en el caso de que exista un cara a cara con Díaz Ayuso.
La amenaza de la segunda vuelta
La "ventaja competitiva" para una candidatura impulsada desde la sede nacional del partido resulta "evidente" para los afines a Ayuso: "Ahora mismo, solo tienen acceso al censo los secretarios generales de las ejecutivas nacional y autonómica" cuya apuesta clara es Martínez-Almeida.
Ayuso, además, "no tiene a nadie que le informe de nuevas afiliaciones", lo que ya está levantando suspicacias en el entorno de la presidenta autonómica: "Ya hubo en el pasado acusaciones de pucherazo y de incorporaciones irregulares de militantes en otros procesos. Ahora, ellos dicen contar con más de medio año por delante y pueden hacer cualquier cosa".
Ya hubo en el pasado acusaciones de pucherazo y de incorporaciones irregulares de militantes en otros procesos
El control de los militantes, añaden, "será clave". Sobre todo, "si vamos a unas primarias y un congreso como el que ganó Pablo Casado en 2018". Es decir: "voto de la militancia en primera vuelta y de los compromisarios en segunda".
La participación de los compromisarios solo quedaría anulada, afirman desde Sol, si Ayuso saca más de 15 puntos de ventaja a su rival. De no rebasar esa barrera, "habría que ir a segunda vuelta, y ahí el aparato, a través de los compromisarios, podría cambiar la voluntad de las bases". Recuerdan, en ese sentido, que "así ganó Casado el congreso nacional de 2018".
El antecedente de Cifuentes en 2017
Desde Sol, no obstante, consideran que, de repetirse en Madrid la metodología empleada en ese congreso extraordinario tras la moción de censura contra Rajoy, se estaría consumando un "retroceso en democracia interna" en el PP madrileño.
Todo ello porque en el congreso regional de 2017, en el que fue elegida Cristina Cifuentes, se blindó la participación de la militancia también en segunda vuelta. Una circunstancia que, al menos sobre el papel, beneficiaría a Isabel Díaz Ayuso frente a José Luis Martínez-Almeida: "La sensación que tiene todo el mundo es que la militancia está con ella".
La sensación que tiene todo el mundo es que la militancia está con ella
El entorno de la presidenta de la Comunidad, sin embargo, da por hecho que Génova apostará por repetir el modelo que llevó a la victoria a Pablo Casado frente a Soraya Sáenz de Santamaría en 2018. No obstante, advierten que si vuelve a cambiarse la voluntad de las bases con el voto de los compromisarios, "todos lo considerarían un escándalo".
La última palabra sobre la metodología a emplear, en todo caso, corresponde al Comité Organizador del congreso. Una circunstancia que no tranquiliza, precisamente, en Sol: "Sus componentes serán elegidos por el actual comité de dirección regional, por lo que no esperamos que vayan a tomar ninguna decisión que beneficie a Ayuso".
"Excusas de perdedor"
Desde el PP de Madrid no entienden los "miedos" de Ayuso a un 'pucherazo' en el censo y afirman que el discurso del entorno de la presidenta es el mismo que el empleado por Luis Asúa tras perder las primarias frente a Cristina Cifuentes en 2017: "Son excusas de perdedor, y ya están con ellas".
Las mismas fuentes afirman que en Madrid hay más de 80.000 militantes y que "nadie puede saber qué va a votar a siete meses vista del congreso".
En todo caso, afirman que Ayuso "ya está testando apoyos" y que, de momento, está obteniendo pocas respuestas afirmativas por parte de cargos del partido: "Ningún alcalde se ha posicionado a su favor. Por eso, ahora habla de militantes".