Los expertos siguen cuestionando el cupo catalán. Después de que el director de Fedea alertase de que la nueva financiación suponía una "confederación por la puerta de atrás", la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) han sostenido en un comunicado que el pacto fiscal acordado entre el PSC y ERC a cambio de la investidura de Salvador Illa constituye una "barbaridad". El motivo es que, a su juicio, la formula escogida "destroza el sistema tributario y fragmenta la Agencia Tributaria". Esta valoración se produce tras el anuncio de Illa ayer en el Parlament de "multiplicar por cuatro" los recursos destinados a la Hacienda catalana para que sea capaz de gestionar todos los impuestos.
Los inspectores estatales juzgan que para que Cataluña sea capaz de administrar, inspeccionar y recaudar la totalidad de los impuestos es necesario reformar algunas leyes o, incluso, la Constitución. Sin embargo, consideran que "todo indica que van a ir dando pasos por la vía de hecho, sabiendo que después es imposible dar marcha atrás. Y lo que se vaya haciendo en la práctica, en contra de las leyes vigentes actualmente, ya se verá en el futuro como se modifican las normas".
Además, avisan de que el cambio de sistema "supone necesariamente, porque no puede ser de otra forma, el traspaso de efectivos de la Agencia Tributaria Estatal a la catalana". "Una auténtica barbaridad, con unas consecuencias muy graves en la aplicación del sistema tributario y en la lucha contra el fraude fiscal, que parece que a ningún político les importa", estiman.
Esta asociación ya mostró su profundo rechazo al concierto catalán cuando se dio a conocer el preacuerdo entre socialistas y republicanos a principios de verano. "Entre los principios constitucionales del sistema tributario español está el de igualdad y no confiscatoriedad (artículo 31.1). Si a los españoles se les roban impuestos generados en toda España, se están contraviniendo estos dos principios", advirtieron entonces.
