La sombra del desencuentro entre Podemos y el PSOE es alargada, por mucho que Yolanda Díaz defienda que la coalición goza de una salud de hierro. Las constantes rebajas de la penas a abusadores sexuales por la Ley del 'sólo sí es sí' (que ya ha recortado penas a más de 700 violadores) han sido un goteo incesante e incómodo para el partido socialista, que ha tenido que poner remedio con una nueva proposición legislativa aprobada la semana pasada para modificar la normativa de sus socios de Igualdad. El constante choque entre Podemos y PSOE ha sido notorio y llamativo en los últimos meses por esta cuestión, con la ministra de Igualdad aferrada en las propuestas de su ministerio para la reforma y el PSOE saliendo al paso con Félix Bolaños dando explicaciones.
Este fin de semana el asunto de disputa ha sido otro pero también viene de lejos. La ley de vivienda, que también está sobre la mesa, sigue siendo un rompecabezas para los socios de Gobierno y Ione Belarra no ha dudado en criticar abiertamente la 'tibieza' de los socialistas para no facilitar la normativa. Este domingo, la ministra de Derechos Sociales ha instado a los de Pedro Sánchez a aprobar la ley aunque sea "por electoralismo" y les ha acusado de inmovilismo tras tres años sin cerrar un acuerdo. Las declaraciones llegan, además, cuando la semana pasada el PSOE declaraba que se estaba a punto de alcanzar un pacto, algo que Podemos corrigió enseguida. Haciendo patente, una vez más, las gestiones paralelas entre ambos 'socios'.
Esta vez, Belarra ha cargado con todo en un acto celebrado el domingo llamado "Vivir, no sobrevivir. La vivienda es un derecho" en el que, junto a representantes morados y candidatos electorales como la aspirante a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Alejandra Jacinto, la ministra criticaba al PSOE por favorecer a la derecha: "No podemos desperdiciar el último año de legislatura despejando los balones que nos lanza la derecha. Tenemos la obligación de gobernar y aprovechar hasta el último minuto de este gobierno para abordar los problemas estructurales que tienen los españoles".
Topar el precio del alquiler y cargar contra la especulación inmobiliaria se está convirtiendo en uno de los principales puntos de campaña de Podemos a punto de las municipales de mayo. Y para ello, han puesto en el centro de la problemática al exministro socialista Joan Clos, acusándole de bloquear la ley de vivienda, ya que es el actual jefe de las patronales inmobiliarias de España. Clos, que fue ministro de Industria, Turismo y Comercio de España durante el mandato de José Luís Rodríguez Zapatero es desde 2020 presidente de la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler (Asval), que precisamente presentó la semana pasada al Gobierno 2.000 reclamaciones contra el tope del alquiler. Además, la ministra insinuó que la ley está tardando tanto en salir adelante por supuestas "reuniones con los fondos buitre".
Clos se defiende
Este lunes, Clos se ha defendido de las acusaciones de Belarra afirmando que "el problema de la vivienda no se arregla en un mitin de una campaña" y ha criticado en Onda Cero que "algunos de Podemos ven al propietario, no como un colaborador necesario, sino como un enemigo social", ha denunciado el exministro. "Desde Asval nos hemos ofrecido en muchas ocasiones a tener un diálogo y nunca nos han llamado, siempre llaman a los que comparten sus ideas". El presidente de Asval ha criticado también que la normativa para limitar el incremento de los alquileres no prevea compensaciones para los propietarios, algo que sí ha ocurrido en otros sectores como los carburantes y la energía.
Asimismo, considera que la imposición de un límite al aumento del alquiler debería ser una medida excepcional, "como se ha vendido siempre", pero ha avisado de que, al pasar al texto de la ley, "no parece que vaya a ser excepcional". El exministro socialista ha destacado que, de las 2,8 millones de viviendas que hay en alquiler en España, el 97% pertenece a pequeños propietarios, y avisa de que un límite a la subida del precio del arrendamiento "ahuyentaría a estos inversores", que optarían por vender sus inmuebles.
"El problema de la vivienda asequible en España no pasa por la regulación del precio ni por la tolerancia con la 'okupación'", ha apuntado Clos, argumentando que la solución está en construir vivienda asequible, especialmente en las zonas donde esta es más cara. Además, el presidente de Asval ha explicado que el porcentaje de familias arrendatarias que tiene problemas para afrontar el pago del alquiler en España se sitúa en el 2% y que estos hogares pagan una media de 400 euros por esas viviendas.
"Estas familias necesitan más ayuda que un límite del 2%", ha denunciado Joan Clos, indicando que la mayoría de estos hogares están a cargo de mujeres o inmigrantes con bajos ingresos. "El problema está en que pagan el 40% o 50% de su sueldo al alquiler", ha añadido.
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