El coronavirus ha resultado ser un enemigo más indomable de lo que parecía en un principio. A pesar de las altas tasas de vacunación, los contagios, ingresos y fallecidos (en España esta semana hemos superado las 100 muertes diarias) siguen a la orden del día, aunque con menor virulencia que en la primera ola gracias a la extendida inmunidad.
Ahora que se ha alcanzado el hito de llegar a un 70% de vacunados en España, varios países del entorno occidental (e incluso fuera de él) plantean poner una tercera dosis a su población: Alemania, Israel, Francia, Reino Unido, Uruguay, Rusia, Chile y Emiratos Árabes Unidos. En nuestro país, la Comisión de Salud Pública va a ser la encargada de tomar la decisión sobre la administración de una tercera dosis a personas inmunodeprimidas.
La administración de una tercera dosis a la población general no ha contado en ningún momento con el apoyo de los expertos. Además, un reciente estudio preprint del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) alertaba que suministrar una tercera dosis de la misma vacuna podría provocar una hiperespecialización de las defensas frente a un antígeno concreto (el original de Wuhan) y restaría capacidad de adaptación ante nuevas variantes.
En este sentido, la combinación de vacunas aparece entre los inmunólogos consultados por Vozpópuli como "una alternativa muy interesante que debe ser estudiada". El inmunólogo Alfredo Corell explica que la combinación de vacunas ya existe en el actual arsenal contra la covid. La vacuna rusa Sputnik se compone de dos dosis distintas. En su caso, cada dosis utiliza un adenovirus diferente para transportar el antígeno.
En el calendario vacunal español no hay ninguna vacunación heteróloga (combinación de vacunas de distinto fabricante), pero sí que se han probado frente al ébola, la malaria y casi todos los diseños de la vacuna para el VIH caminan en esta dirección.
"La combinación de vacunas es algo viejo. La vacuna del neumococo también tiene varias presentaciones y en personas mayores se combinan distintos tipos. Frente al coronavirus, la primera vacunación heteróloga fue la Sputnik, y la siguiente que ha sido aprobada por distintos países (no por agencias del medicamento) es la combinación de una primera dosis de AstraZeneca y una segunda de Pfizer. Se aprobó la combinación en base a estudios de algún país (como el CombiVacs español) donde confirman que produce mayor inmunización que Pfizer-Pfizer o Astra-Astra", señala Corell.
Respecto a esta combinación, indica que produce un incremento de posibles efectos adversos secundarios, pero la seguridad no empeora y la inmunogenicidad es alta. Eso sí, se desconoce la eficacia a largo plazo, pero "a alturas hay que suponer que es buena", puntualiza.
En estos momentos hay un gran proyecto de investigación liderado por la Universidad de Oxford, denominado Comparing covid-19 Vaccine Schedule Combinations (Com-COV), que estudia los efectos de la combinación de Pfizer con AstraZeneca/Moderna/Novavax y de AstraZeneca con Pfizer/Moderna/Novavax.
"Estamos viendo combinación de vacunas de ARN, adenovirus y proteína, pero no conocemos la combinación de vacunas de virus atenuado (como la china Sinopharm)".
En cualquier caso, "la vacunación heteróloga es el futuro en covid. Hay un estudio de evolución en la inmunidad que apunta que las de ARN tienen más eficacia al principio, pero no sostienen los anticuerpos en el tiempo. Al cabo de unos meses las de adenovirus quedan por encima. Estaría bien estudiar combinaciones", asegura Corell.
Este especialista opina que estaría bien combinar no solo diferentes medios de transporte del antígeno, sino contenido genético. Las de ARN cogen la información genética de la corona del virus, pero la vacuna esterilizante que desarrolla Luis Enjuanes en el CSIC cuenta con todo el ARN del virus. "Ofrecer información distinta del virus permitiría a nuestro organismo estar más preparado para defenderse".
Turismo vacunal
A pesar de que estos estudios están todavía en marcha y que algunas combinaciones no han sido nunca estudiadas, hay personas que están probando las combinaciones por su cuenta y, en ocasiones, motivadas por gobiernos nacionales. En Argentina ha habido desabastecimiento de la segunda dosis de Sputnik, lo que ha llevado a las autoridades a proponer que quienes tenían la primera dosis de la vacuna rusa pudieran completar la pauta con Moderna, Pfizer, o esperar tres meses y ponerse dos dosis de Sinopharm.
También hay casos de españoles que han recibido la vacuna monodosis de Janssen y han decidido ponerse otra dosis más de Pfizer en Estados Unidos. Gente que vive en China y Emiratos Árabes han recibido Sinopharm, que es la vacuna con menos eficacia hasta la fecha (55% de eficacia), motivo por el que se han planteado venir a España para ponerse Pfizer o Moderna.
Desde México, Argentina y Chile, españoles residentes se plantean venir a España para ponerse una de refuerzo (Pfizer o Moderna) tras haber completado la pauta de Sinopharm. Los inmunólogos aconsejan que nadie lleve a cabo estas prácticas hasta que no hayan sido debidamente estudiadas.
