Conde-Pumpido mueve ficha para apartar a Macías e imponer el aval del TC tras la abstención de Campo

El Tribunal Constitucional (TC) se prepara para abordar desde este miércoles la amnistía del PSOE. Tras la petición de Juan Carlos Campo de abstenerse al calificar la ley de "inconstitucional", el foco se pone ahora en José María Macías. Sobre el magistrado conservador planea la sombra de la recusación que, de salir adelante, implicaría la pérdida de un voto a su bloque, contrario a la ley.

Fuentes del tribunal de garantías consultadas por Vozpópuli explican que no se descartan más 'bajas' en la deliberación de la ley que arranca este miércoles. En este Pleno se prevé dar luz verde a la petición del exministro socialista y admitir a trámite la cuestión de inconstitucionalidad planteada por el Tribunal Supremo contra la amnistía.

Tras este trámite, el Tribunal Constitucional comenzará a deliberar sobre el contenido de la ley que ha dejado en papel mojado el procés y sus derivadas en tribunales de toda España. Las fuentes consultadas expresan que en la cúpula del TC hay inquietud por cuanto que la abstención de Juan Carlos Campo reduce su mayoría de siete a seis votos.

Cascada de recusaciones ante la amnistía

Frente a ello, el sector conservador ha adherido uno más tras el reciente nombramiento del que fuera vocal del CGPJ, José María Macías. El jurista no se plantea apartarse por sus manifestaciones contrarias a la amnistía, de manera que el bloque conservador contaría con cinco votos contrarios a la ley si no se plantea una recusación en su contra.

Se trata de una cifra que aumenta para el bloque conservador y que ha generado inquietud en la cúpula del TC, desde donde quieren sacar adelante la norma con el mayor margen de votos posible.

De hecho, esta guerra interna ha abierto la puerta a la petición de una cascada de recusaciones que el bloque progresista frenará con su mayoría. Las mismas se han planteado en los recursos interpuestos por el Partido Popular y algunas de sus comunidades como Madrid, Galicia y Andalucía.

En concreto, los populares han pedido que se aparte de las deliberaciones al presidente Cándido Conde-Pumpido, a Juan Carlos Campo por su actuación en la materia cuando fue ministro de Justicia, y también a Laura Díez, la magistrada progresista que aterrizó en el tribunal de garantías tras ejercer como directora del Ministerio de Presidencia de Bolaños.

Se trata de tres recusaciones que la mayoría progresista frenará evitando así que el bloque sufra otra baja tras la abstención de Campo. Cuestión diferente es lo que pueda ocurrir con Macías. En su caso, al igual que ocurre con Conde-Pumpido, Campo y Díez, se requeriría que una parte del procedimiento formulara formalmente su recusación.

En ese sentido, los ojos se fijan en la Fiscalía y la Abogacía General del Estado. Se prevé que el Ministerio Público informe únicamente en la cuestión de inconstitucionalidad planteada por el Supremo; de manera que no intervendría en la decena de recursos interpuestos por las comunidades del PP contra la norma.

Guerra en el TC por la amnistía

En estos últimos intervienen los letrados de las Cortes, que, como partes personadas, también podrían impulsar la recusación del nuevo magistrado. De esta forma se abre un escenario incierto en el TC que avivará las posiciones entre dos bloques especialmente delimitados desde la renovación del órgano a finales de 2023.

Al respecto, conviene precisar que no se estudia en los mismos términos una abstención que una recusación. El exministro Campo pidió a Conde-Pumpido apartarse del asunto apelando al artículo 219.10 de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ). El mismo determina que es causa de abstención y de recusación cuando se ha tenido un interés directo o indirecto en el pleito.

Voces consultadas precisan al respecto que hubiera sido más conveniente apelar al artículo 219.13 que abre la puerta a la abstención para aquellos que "hayan ocupado cargo público" en el marco del cual hayan participado "directa o indirectamente en el asunto objeto del pleito o causa o en otro relacionado con el mismo".

El precedente del TC de 2021

El exministro plasmó su firma en las resoluciones de los indultos que el Gobierno concedió a Oriol Junqueras y el resto de independentistas condenados a prisión por el procés en 2019. En dichos documentos, el ahora magistrado del TC expuso que la medida de gracia tenía cabida en la Constitución, a diferencia de la amnistía.

Del mismo modo, arremetió contra una hipotética amnistía durante su intervención en un programa de televisión mientras el Gobierno de Pedro Sánchez tramitaba los indultos. Con todo, el propio TC se ha pronunciado sobre los motivos que propician las abstenciones y recusaciones, descartando que en un pronunciamiento previo sobre la materia sea causa de ello.

Al respecto, destaca el auto 107/2021, de 15 de diciembre por el que el TC presidido entonces por Pedro González-Trevijano declinó apartar a los magistrados conservadores Enrique Arnaldo y Concepción Espejel de las causas relacionadas con el procés. El Pleno entendió que sus pronunciamientos sobre la cuestión o la amistad de algunos de ellos con miembros de magistrados que juzgaron el procés no eran causa suficiente para apartarse del asunto.

Dicho auto determinó que las opiniones vertidas en un periódico por uno de ellos se produjo años antes de adquirir la condición de magistrado y que "nadie puede ser descalificado como juez en razón de sus ideas"."No solo el Tribunal Constitucional sino también el resto de tribunales jurisdiccionales deben ser integrados por jueces que no tengan la mente vacía sobre los asuntos jurídicos sometidos a su consideración", plasmó dicho auto.

Con esta premisa, se antoja difícil que pudiera prosperar una recusación contra Macías, quien durante su etapa como vocal del Consejo General del Poder Judicial cuestionó la legalidad de la amnistía, antes de que la misma se aprobara.

De esta forma, si la mayoría progresista del TC apoyara una posible recusación al vocal conservador, tendría muy complicado explicar los motivos por los que no aparta a Díez o el presidente Conde-Pumpido.