La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha reclamado este miércoles, ante la "ofensiva reaccionaria" de la extrema derecha y de la derecha, que tanto los derechos de las mujeres como los del colectivo LGTBI estén "blindados" en la Constitución, porque "un país feminista" debe tener una carta magna "feminista".
De esta manera se ha pronunciado Montero en su intervención en la Comisión de Igualdad del Congreso, en la que comparece para dar cuenta de las políticas llevadas a cabo por su departamento pero también para dar explicaciones por otros temas, a petición de grupos de la oposición, como el conocido "caso niñera".
La ministra ha destacado que con la crisis sanitaria se ha agudizado la reacción de la extrema derecha y "por desgracia demasiadas veces", de la derecha, a los derechos de las mujeres, de las personas LGTBI, y de las personas migrantes.
Ha asegurado que el odio se combate con derechos que lleguen de forma efectiva a todas las mujeres y ha mencionado los "importantes avances" impulsados desde su Ministerio para consolidar una nueva generación de "derechos feministas".
"Sabiendo de la tarea transformadora que nos ocupa esa nueva generación de derechos feministas, no dejaría pasar la oportunidad para reclamar también que los derechos de las mujeres, que los derechos LGTBI, sean derechos blindados en nuestra Constitución", ha avanzado Montero.
En este sentido, ha abundado en que los derechos de las mujeres, de la diversidad sexual y racial de España son derechos fundamentales y como tales "deben estar protegidos por nuestra Constitución": "Un país feminista debe tener una Constitución feminista", ha aseverado.
