Presupuestos por presos. Esa es la estrategia negociadora de EH Bildu en su relación con el Gobierno de PSOE y Podemos. Esta hoja de ruta, desvelada por el líder de la coalición abertzale, Arnaldo Otegi, durante una reunión privada con militantes, siempre genera enormes tensiones dentro del PSOE y, por ello, obligó este miércoles al propio jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, a desmentir ese extremo. Sin embargo, los hechos demuestran que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, va cumpliendo al menos de facto las exigencias de los bildutarras en materia penitenciaria.
Las palabras de Otegi, pronunciadas tan solo horas después de su mensaje a las víctimas de ETA, dejan claro que Bildu aprobará los Presupuestos Generales del Estado para intentar que el Gobierno de Sánchez ofrezca como contrapartida una solución para los cerca de 200 reclusos de la banda terrorista. El líder bildutarra habló a sus bases de que esos reos "salgan a la calle", pero también trazó un horizonte de seis años: los dos que restan de esta legislatura y los cuatro de otra legislatura en la que, según admitió, "nos conviene que siga este Gobierno".
Ya hace un año, durante la negociación de las cuentas públicas de 2021, Bildu dejaba claro que esperaban como contrapartida cambios en la política penitenciaria. Los bildutarras votaron sí a las cuentas de Sánchez después de una negociación en la que Unidas Podemos y Pablo Iglesias jugaron un papel determinante para evitar un pacto con Ciudadanos que parecía hecho. El partido morado está muy cómodo con Bildu y nunca ha ocultado su sintonía con la izquierda abertzale. Sin embargo, ese respaldo todavía solivianta a buena parte del PSOE. Y los barones socialistas ha repetido en varias ocasiones que no le gustan estos compañeros de viaje.
Page lo ve "inmoral"
Doce meses atrás el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, clamó contra ese respaldo cuando criticó el "tacticismo" del Gobierno y afirmó que "lo de EH Bildu no tiene un pase desde el punto de vista de fondo". Y ahora, vuelve a clamar, porque dice que el planteamiento de presupuestos por presos es "inmoral" y añade que los demócratas en España "no están dispuestos a heredar la propaganda de Bildu" del mismo modo que en el pasado tuvieron que "sufrir la de ETA".
La prueba de que este asunto tensa al PSOE es la propia rectificación gubernamental sobre el ya célebre mensaje de Otegi de este lunes a las víctimas de ETA. Si en un principio el PSOE y el PSE reaccionaron con indisimulado optimismo, como si ese paso ya convirtiera a Bildu en un hipotético socio de futuro, después el Gobierno, tras la reunión del consejo de ministros del martes, rebajó la validez del mensaje al tildarlo de "insuficiente" y al pedir a los abertzales que condenasen el terror etarra.
Más allá de las rencillas en el PSOE, lo evidente es que Bildu tiene como objetivo irrenunciable "una solución" para los presos de ETA. Lo decía Otegi en su acto privado. Por si había dudas, lo remarcaba él mismo este miércoles en un artículo en Público. Y, además, Vozpópuli ya destacó que la exigencia de una solución para los reclusos etarras era uno de los puntos de la famosa Declaración de Aiete del pasado lunes.
Los acercamientos
Es obvio que Bildu va a poner sobre la mesa el tema de los presos en su negociación presupuestaria con el Gobierno. Cuestión distinta es que este tema se haga público. Sánchez desmentía este miércoles en el Congreso que vaya a excarcelar a los reclusos de ETA. ¿Hay algún tipo de acuerdo subrepticio sobre este tema? Por ahora, ya se ha publicado que históricos de PSOE y Bildu negocian en secreto en Euskadi sobre el particular. Pero, además, está el precedente de lo que ya viene sucediendo durante los últimos doce meses.
La ecuación "presupuestos por presos" se escucha desde hace un año. ¿Es la política de acercamientos de reclusos etarras del Ministerio del Interior una cesión a Bildu por aquel apoyo? Así lo denuncia la AVT constantemente. Lo cierto es que en 2021 ambas partes negaron por activa y por pasiva que los presos de ETA formasen parte del acuerdo por el que los bildutarras respaldaron las cuentas de Sánchez. Sobre todo el Gobierno hace hincapié en que son cuestiones que no están conectadas, pero en el entorno de la izquierda abertzale -por ejemplo en Etxerat, asociación de familiares de presos etarras- celebran con alborozo todos esos acercamientos de reclusos terroristas.
La verdad es que con este Gobierno se ha acabado la dispersión de presos etarras. Ahora Otegi en privado habla de "sacarlos a la calle". Pero el paso previo es que todos sean trasladados a prisiones vascas y navarras
Los hechos son tozudos. Los movimientos del departamento de Grande-Marlaska hablan por sí mismos. Hay casi noventa reos etarras acercados a las cárceles del País Vasco y Navarra, el resto de presidiarios etarras también trasladados más cerca de sus lugares de residencia -ya no queda ni un solo reo terrorista en prisiones andaluzas y hay muchos en La Rioja, Aragón o Cantabria- y han aumentado sobremanera las progresiones de grado.
El titular de Interior lleva a cabo una política penitenciaria que, sea o no fruto de un acuerdo secreto relacionado con los Presupuestos, obviamente va en la línea de lo que reclama Bildu. La verdad es que con este Gobierno se ha acabado la dispersión de presos etarras. Ahora Otegi en privado habla de "sacarlos a la calle". Pero el paso previo es que todos sean trasladados a prisiones vascas y navarras.
Pase lo que pase en el futuro, está claro cuál es el objetivo de Bildu y también es evidente que este asunto genera tensión en el PSOE.