Podemos tiene un problema con una ministra del Gobierno del que forman parte. Los morados han puesto a la titular de Defensa, Margarita Robles, en la diana. Y todo porque, en parte, como reconocen altas fuentes moradas, pesa el ánimo de venganza entre los de Ione Belarra por la cacería que emprendió el PSOE contra el ministro de Consumo, el morado Alberto Garzón.
Más allá de ese espíritu de vendetta, lo cierto es que Podemos no tiene buena relación con la titular de Defensa, a la que consideran una ministra cercana a la derecha. Sin embargo, el problema de los morados con la jueza no es nuevo. Casi desde que arrancó la coalición, Robles ha sido cortante y crítica con algunos los morados en general y con las estrategias emprendidas por el exvicepresidente Pablo Iglesias en particular.
Este mismo martes, el portavoz parlamentario Pablo Echenique cargó contra ella en Twitter y comparó su justificación del envío de tropas españolas a Ucrania con la podría haber dado el expresidente José María Aznar en Azores, cuando España se alió con Estados Unidos para mover al Ejército a ocuapr Iraq. Eso sí, Echenique hizo esa analogía "con todo el respeto a la ministra Robles".
"Con todo el respeto"
En Podemos no quieren echar más leña al fuego por el tuit de su portavoz. El presidente del grupo parlamentario, Jaume Asens, recalcó en el Congreso que eran "las palabras de Echenique", aunque volvió a retratar a Robles, la archienemiga morada: "Lo que señala Echenique es que parecía haber una pulsión belicista en el Gobierno. Creemos que el principal responsable del conflicto es Rusia, pero la solución es la desescalada".
"Robles nunca nos ha tenido consideración, ni nos ha dedicado buenas palabras. Por ejemplo, durante la pandemia no tuvo una buena palabra con nosotros cuando arreciaron las críticas por la gestión de las residencias", detalla una importante fuente morada que pone rostro a la decepción de su partido con los gestos de la ministra de Defensa.
En Podemos sentó muy mal el ofrecimiento militar de la titular de Defensa de adelantar el envío de dos buques, previsto con anterioridad a la crisis con Rusia, así como el ofrecimiento de enviar varios cazas a Bulgaria para disuadir a Moscú de invadir Ucrania. Altos dirigentes morados comentan en privado que el lado socialista del Gobierno no les informó de los planes de Robles y aunque entienden que los ministerios de Estado son cosa del PSOE, en verdad esperaban algún gesto por ser "el mismo Gobierno".
Robles nunca nos ha tenido consideración, ni nos ha dedicado buenas palabras.Una alta fuente morada
Lo cierto es que el exlíder de Podemos Pablo Iglesias guía ataques a Robles. No obstante, volvió a vincularla este martes a la derecha política tras atacarla con una gravedad inusitada el pasado fin de semana, en pleno fragor electoral por los comicios en Castilla y León. La ministra socialista quiso zanjar la polémica con Iglesias a base de dardo: "Tiene mucho tiempo libre".
El exvicepresidente segundo considera que Robles fue desautorizada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, gracias al 'no a la guerra' emprendido por Podemos. Los morados creen que por recordar que España es el país que rechaza conflictos, el PSOE ha suavizado su postura pasando del envío de tropas a hablar de desescalada.
El quid del asunto ucraniano en el devenir del Gobierno de coalición es el seguidismo que, consideran en Podemos, ha hecho el presidente del Gobierno de Estados Unidos. Eso, sumado a que ese viraje atlantista estaría encaminado a garantizar la presencia del presidente estadounidense, Joe Biden, en la cumbre de la Alianza que se celebrará este año en Madrid, ha sacado de quicio al socio menor. Y ya de paso, aprovecha "el charco" en el que se ha metido Robles para cobrarse la guerra contra Garzón. Carne por cañonazos...
