Podemos presiona a Yolanda Díaz para mantener al menos un ministerio en el Gobierno de Pedro Sánchez en caso de que se repita la coalición de izquierdas con el PSOE. Según ha sabido este diario, los morados están recordando a la líder de Sumar que únicamente gracias a ellos la izquierda a la izquierda de los socialistas puede exigir una coalición, porque Pablo Iglesias apostó fuerte por ella. Aunque la cúpula de Podemos barrunta que tendrá difícil entrar el Ejecutivo pese a aportar al partido de Yolanda Díaz los mismos escaños (5) que los 'comunes' e Izquierda Unida.
Lo cierto es que los morados comienzan a inquietarse, porque previsiblemente Sánchez logrará seguir en Moncloa si el PSOE pacta con Junts. Y Yolanda Díaz no parece estar dispuesta a mantener a Podemos en el Gobierno tras una legislatura llena de dolores de cabeza tanto para ella como para el líder socialista ('sí es sí', guerra de Ucrania, OTAN, ley trans, ley de bienestar animal...). Es más, la posibilidad de que sea el líder de Más País, Íñigo Errejón, quien llegue a sentarse en el Consejo de Ministros pese a aportar solo dos escaños, es algo que tiene a los morados alarmados.
Podemos siempre ha sido muy receloso sobre los movimientos de Errejón. Tras la figura del líder de Más País subyace un conflicto más formal que ideológico. El mismo que subyace respecto a Yolanda Díaz. No por casualidad, Pablo Iglesias dijo que la vicepresidenta segunda estaba más cerca de Más Madrid que de Podemos. Pero no se trata de algo ideológico, sino de una cuestión formal. Los morados lamentan que tanto Errejón como Díaz se esfuercen en ser una suerte de marca blanca del PSOE, aceptable para la élite.
El conflicto formal
En Podemos, de hecho, cabrea que solo ellos sean el rostro enfadado, fuerte y duro que dice las cosas como son y que puede tener tracción para cambiar las cosas. Por eso, sus dirigentes creen que hay una concertación entre Yolanda Díaz y el PSOE para destruirles. El conflicto formal está claro. Tanto Yolanda Díaz como Íñigo Errejón parten de la premisa de que para construir mayorías y, sobre todo, para llegar al poder, toca mostrarse como una izquierda asumible y no confrontar en ciertos asuntos, porque son batallas perdidas de antemano que les descartan como opción transversal.
Aunque los morados ven a esa izquierda, en realidad, con poca o nula capacidad de transformación a la que el poder considera, en última instancia, una pequeña molestia funcional que nunca va a conseguir cambiar nada estructural. Más allá de eso, en Podemos también se teme que Díaz y Errejón cedan a posibles presiones de la élite encaminadas a sacar a Sumar de la fórmula de gobierno. En plata: los morados no quieren ni pensar en que Yolanda Díaz acepte un pacto de gobierno que deje al PSOE gobernar en solitario en pro de la estabilidad de la legislatura.
Los morados han puesto el ojo en Errejón, porque en Podemos ha habido, en efecto, cierto recelo por quiénes han pilotando la campaña de Sumar y quiénes han diseñado el programa electoral con el que Yolanda Díaz se sometió al examen de las urnas. Lo cierto es que Podemos busca torpedear a la vicepresidente segunda en funciones, ya que el resultado de las elecciones está por debajo de lo que logró Pablo Iglesias hace cuatro años, aunque la propia Díaz les recordó que ellos obtuvieron solo un millón de votos el 28-M. Los morados, además, tienen otro dilema: deben calibrar, según las fuentes consultadas, hasta dónde llevan su conflicto con ella.
La prisa de Sumar
Y ese es el motivo por el que están desarrollando toda una estrategia de presión con comentarios de algunos de sus rostros más icónicos que dan pie a la posibilidad de ir por libre si Sumar no les permite tener voz en las negociaciones con los socialistas. El problema es que el partido de Yolanda Díaz y el resto de fuerzas que lo integran maniobran para que los morados no tengan perfil propio cuando llegue la hora de sentarse con el PSOE para cerrar un acuerdo de coalición.
En verdad, en Sumar tienen prisa. Quieren conformar ya ese pacto con el PSOE. Pero si a Ferraz le supuso un dolor de cabeza constante convivir con los morados en el Consejo de Ministros y, por eso, el PSOE impulsó Sumar, ahora en la central socialista deben saber que los morados tratan de tener voz propia de nuevo. Aunque, según ha sabido este diario, tanto Yolanda Díaz como el resto de partidos que integran Sumar -hasta una quincena- lo impedirán y maniobrarán para marginar a los de Ione Belarra de la negociación del posible acuerdo de coalición con los socialistas.
No obstante, en caso de que Sumar cierre un trato con el PSOE, corresponderá a su líder, Yolanda Díaz, designar a los ministros de su espacio. Y ahí tendrá que hacer malabares para mantener el equilibrio de poder interno. Cabe recordar que el reparto de fuerzas dentro de Sumar quedó así tras el 23-J: Movimiento Sumar, el partido nave, logró 10 diputados; Podemos, 5 al igual que IU y En Comú Podem; Compromís, 2, como Más País, y Més y la Chunta Aragonesista, 1 cada uno.
Tisvepunez
Se lee: "Podemos siempre ha sido muy receloso sobre los movimientos de Errejón. Tras la figura del líder de Más País subyace un conflicto más formal que ideológico." La ideología de Errejón es nacional popular. Nacional popular en la línea democrática progresista. Y además, esa ideología, tiene como lugar central, el concepto de hegemonía: Errejón en Roma, Italia, el 6 de septiembre de 2019: "Quiénes llevamos teniendo esta relación política, estos años, y compartimos digamos una mirada, una mirada teórica que tiene concreciones prácticas determinadas, tenemos como como lugar central, ocupa un lugar central en nuestro pensamiento: - El concepto de hegemonía. Este concepto ha hecho fortuna, y ahora se utiliza mucho, y se utiliza casi para todo. Para nosotros sin embargo, significa un tipo de poder político determinado. Un tipo de poder político, que podríamos caracterizar por: - La capacidad de proponer metas colectivas para el conjunto de la sociedad. Una suerte de dirección intelectual y moral del conjunto de la sociedad. En segundo lugar: - La capacidad de integrar, a los adversarios, en un esquema propio. No es una capacidad de imposición, sino que es una capacidad de: integración, también de los que no piensan como nosotros, pero que acaban teniendo que hablar en nuestros términos, sobre nuestros temas, con nuestro lenguaje, dentro de una determinada manera ver el mundo. Y en tercer lugar: - La capacidad de construir un terreno, un escenario, en el cual, eso, incluso quién te quiere derrotar, te tiene que derrotar en unos términos muy similares a los tuyos. Para derrotarte, se tiene que parecer a ti." 6 de setiembre de 2019.- Conferenza Magistrali di Iñigo Errejón.- Il ritorno della politica. Scuola estiva di formazione politica. Assemblea - Frattocchie (Frazione di Marino, Roma) A cura di Pantheon Organizzatori: Senso Comune, Patria e Costituzione. Saludos.
Termopidas
Podemos... dejen de ladrar..y cárguense de una vez a la Yoli...
ciudadanomundo
"...la izquierda a la izquierda..." ¿eso es la extrema izquierda? Cansinos, que sois unos cansinos.
xaxonem
¿Y por qué no piden cinco, para no tener a ninguno de ellos en el paro?
Discobolo-60
Esperemos que el Desgobierno Frankenstein II quede en un experimento y no llegue a más. Ya empiezan a pedir los muertos de hambre de Podemos y así seguirán ese conglomerado de la basura , escoria y desechos de la sociedad.