La última entrevista que concedió Santiago Abascal fue el 19 de febrero. Y no fue propiamente una entrevista, sino una intervención con alguna pregunta en el foro del diario La Razón.
La estrategia de Vox en esta precampaña es esconder a su candidato para protegerlo de cara a las elecciones generales del 28-A. El partido cree que la marca tiene ahora mismo más tirón que el propio Abascal, que se expone a interrogatorios generalmente hostiles cuando acude a alguna televisión o medio de comunicación.
Consciente de sus fortalezas y debilidades, Abascal ha dado un paso atrás. No concede entrevistas, ni ofrece ruedas de prensa. Él mismo ha comentado alguna vez en privado que lo que más le conviene es no abrir demasiado la boca.
Ni entrevistas, ni ruedas de prensa
Vox está rechazando sistemáticamente las peticiones de entrevista de Abascal. Y no sólo de él, sino de otros dirigentes. Los 12 diputados andaluces tampoco están siendo autorizados a hablar en los medios. Y el partido se remite a sus intervenciones en el Parlamento
Abascal hizo una breve declaración a los medios al inicio del juicio del procés el pasado 12 de febrero. Vox ejerce la acusación particular. A partir de ahí, ha participado en el foro de La Razón, donde anunció un acto en el Sant Jordi de Barcelona el 30 de marzo. El resto de sus apariciones públicas ha sido cerrada a los medios de comunicación.
La asamblea del partido o el evento cañas por España realizado el viernes en Madrid son apariciones puntuales cerradas a los medios. Abascal sólo habla ante sus simpatizantes. Es un estilo similar al que elegió Donald Trump en Estados Unidos.
El partido, eso sí, no deja de tener presencia en los medios de comunicación. Las encuestas coinciden en su entrada al Congreso -con distinto grado de intensidad-. Y la formación hace anuncios a golpe de tuit, que llegan rápidamente a las diferentes cabeceras digitales.
¿Denuncia al CIS?
Así anunciaron, por ejemplo, una supuesta denuncia ante la Junta Electoral por los sondeos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Una denuncia de la que no se sabe realmente nada, porque nadie ha ofrecido detalles de la misma a pesar de reiteradas preguntas. Y que probablemente ni siquiera presenten.
Abascal suele comentar asuntos de actualidad y critica a sus rivales en pocos caracteres, pero no aporta más información sobre las propuestas de Vox para las generales.
Sobre la posibilidad de participar en un debate electoral a cinco como el que planteó a Atresmedia tampoco hay demasiadas novedades. Abascal mostró su voluntad de asistir siempre y cuando estén todos los candidatos a la presidencia del Gobierno.
