Lleva inscritos en el cuerpo dos señores tatuajes, uno en el brazo derecho y otro en la espalda, casi rozándole el cuello. Sus referentes políticos son -por este orden- Margaret Thatcher, Esperanza Aguirre y su "madrina", Isabel Díaz Ayuso. Encima de la mesa de reuniones de su despacho -Génova 13, tercera planta- hay una carpeta rosa de Beyoncé. Su abuelo fue sastre de Raphael, nuestro mítico Raphael, que ahora se recupera de un linfoma cerebral.
Noelia Núñez González (Madrid, 1992), vicesecretaria de Movilización y Reto Digital del Partido Popular, es la alevín en la cúpula de Alberto Núñez Feijóo. Estudió Derecho y Ciencias Jurídicas. Habla varios idiomas. Se alistó al PP cuando cumplió la mayoría de edad. Al poco tiempo, estrenó el primer cargo público: concejal en su pueblo, Fuenlabrada, donde, aún hoy, preside el PP y se ha erigido como principal azote del alcalde socialista.
¿Felices Fiestas o Feliz Navidad?
¡Feliz Navidad!
¿Por qué?
Porque sí, porque celebramos la Navidad. No celebramos el solsticio de invierno ni nada por el estilo. Así que ¡Feliz Navidad, próspero 2025 y que Sánchez dimita!
Toma, ya tenemos titular.
Lo he puesto fácil...
Pero España es un Estado aconfesional.
Sí. Aconfesional no quiere decir laico, para empezar. Y nosotros hemos crecido en un país que tiene unos fuertes valores católicos y que sus principales festivos los celebra en torno al calendario católico. Igual que Semana Santa y la mayoría de días festivos. Con lo cual, estos debates estériles...
Se ha celebrado siempre la Navidad. Pues felicitemos la Navidad. No hay nada de malo. No impongo nada, por lo que caer en esta terminología absurda... se celebra el nacimiento del niño Jesús, pero no voy a imponer la religión ni nada por el estilo.
El Rey ha puesto deberes a los políticos. ¿Está el PP por la labor de bajar los decibelios en el Congreso para que la contienda no sea tan “atronadora”?
Efectivamente la contienda es atronadora, pero recordemos que tenemos un presidente que en su discurso de investidura automáticamente separó España en dos bandos, con un muro de por medio.
Por tanto, claro que hay que rebajar esa contienda, cuando consigamos derribar ese muro, cuando acabemos con esta terrible etapa histórica que ha sido el Gobierno de Pedro Sánchez y consigamos volver a la España que éramos antes.
Una España feliz, de consensos, en la que la política no era una cuestión divisoria. Que cada uno podía tener su ideología, su pensamiento, lo que considerase oportuno, pero no había ese enfrentamiento y esa división especialmente entre la gente joven.
¿Entre la gente joven?
Yo lo veo. He estado en comidas de Navidad en las que se ha evitado hablar de política porque era un foco de enfrentamiento. Siempre puedes tener comentarios, sobre todo si hay una política en la mesa, pero nunca había sido una cuestión de generar enfados en un entorno distendido, de cercanía, laboral, familiar, personal. Ahora sí, desgraciadamente la política está siendo un elemento que confronta en lugar de unir.
Para mí, esa confrontación viene del muro de Sánchez: él necesita una sociedad polarizada, siempre. Y esto es una opinión más personal: el socialismo siempre busca enfrentar. Al hombre contra la mujer, a los de arriba contra los de abajo, busca enfrentar y dividir, porque de esa confrontación y división consideran que ellos tienen el caldo de cultivo de sus ideas. Nosotros no. No quiero una sociedad enfrentada, no quiero que la gente se odie entre distintos. Quiero una sociedad que trabaje unida, para tirar hacia adelante y para que este país pueda volver a ser un gran país.
Antes de Pedro Sánchez tampoco es que la política pasara desapercibida, ¿eh? El debate siempre ha sido acalorado.
Vamos a ver, la política siempre ha sido apasionante en nuestro país porque somos esencialmente mediterráneos, tenemos sangre. Vivimos la vida con pasión. Pero es cierto que la política está tomando un camino que es el contrario que debería defender. Yo no digo que todo el mundo piense igual, eso es imposible. Ni que todos estemos de acuerdo en todo. Eso es una utopía.
Ahora, entre estar en desacuerdo y estar enfrentados permanentemente hay un mundo. Y ese mundo lo ocupa Pedro Sánchez con el muro.
El Gobierno no ha hecho nada con la inmigración, sólo generar un efecto llamada
Felipe VI pidió “consenso”, proteger el “bien común” y un diálogo “de altura”. ¿Usted tiene buena relación con dirigentes socialistas?
La verdad es que no tengo mucha relación. Más allá del trabajo parlamentario propio, sobre todo en las comisiones, que es donde hay más cercanía, porque son grupos más reducidos. Pero hay un ambiente tan enrarecido que, efectivamente, se ve ese muro. Ellos pactan previamente cuando llegan a las comisiones. Ahí se ve que esa división existe, porque a nosotros nos dejan fuera de todo.
Luego conseguimos sacar propuestas adelante jugando con la aritmética. Pero no hay esa cercanía, ese trato que debería haber dentro de un trabajo parlamentario. No existe.
Desde fuera, a los periodistas nos preguntan mucho si es cierto que los políticos se llevan tan mal. Y nosotros contamos que en la cafetería todo el mundo convive y se saluda.
La educación no está reñida con la contienda política. Claro que vas por los pasillos, coincides en la cafetería y te saludas con todo el mundo. Con cualquier persona, no solo de un partido político de otro grupo. Pero esa sensación de intentar llegar a acuerdos, de ese consenso, no se vive actualmente.
Es una pena, pero es que un presidente que no habla con el líder de la oposición desde hace un año ya indica la situación tan enrarecida que hay en la política española. Y no será por el intento de haber llegado a acuerdos.
O sea, que al Rey sus homólogos de Oriente, le traen carbón. Porque en su carta de este año pidió consenso…
La voluntad del PP es clara. Pero no consenso con el PSOE, sino consenso con los españoles, que son a los que nos debemos. Y el trabajo, con el objetivo de mejorar la vida de todos ellos. Ahí, toda la voluntad de seguir trabajando y proponiendo medidas para mejorar la vida y que la política baje el soufflé famoso.
Vox no se ha pronunciado sobre las palabras del Rey. ¿Qué le parece? Hay quien interpreta el silencio como un rechazo por lo que dijo sobre la inmigración.
Cada uno es dueño de sus palabras, pero también de sus silencios. El PP ha hecho una valoración positiva del discurso del Rey. El discurso del Rey ha sido totalmente acertado y ha sabido estar a altura de la situación que ha vivido España en este año.
Ponemos en valor esa cercanía de la Jefatura del Estado con los ciudadanos. Esa es la clave. El Rey ha estado en la calle en todo momento. Especialmente en la situación vivida con la riada en Valencia. Ha estado ahí y sigue estando ahí.
Por cierto, acaba el 2024 y el Gobierno y la oposición siguen sin alumbrar un pacto migratorio, ¿qué tiene que suceder para que pongan el huevo?
Que el Gobierno se tome en serio el problema que está viviendo España. El problema es que el PSOE no quiere actuar en esta materia. Todo lo contrario. La inacción está provocando un efecto llamada. Se ha visto en las cifras que hemos cosechado este año. No ha parado de crecer. He leído que han perdido la vida unas diez mil personas intentando llegar a las costas españolas.
Esto es un drama humanitario, social, y no están haciendo nada. Nosotros conseguimos llegar a un acuerdo con el Gobierno de Canarias, con una serie de medidas: reforzar la presencia de fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, que se active Frontex, porque las costas españolas son también frontera europea.
Necesitamos que Europa actúe en consecuencia de la problemática que está viviendo España, tomando como referencia países donde se han aplicado medidas que han conseguido frenar la llegada de migrantes irregulares a las costas, principalmente para intentar salvar vidas.
Este pacto del PP y Canarias se puso a disposición del Gobierno para que lo pusiera en marcha. Seguimos esperando. ¿Qué más tiene que pasar para que se tomen este problema en serio? No han hecho nada. ¿Qué medida ha puesto el Gobierno encima de la mesa para evitar la llegada de inmigrantes irregulares? Lo que ha ido es generando un efecto llamada y cada vez mayor.
Otro problema que mencionó el monarca fue el de la dificultad para acceder a una Vivienda. ¿Usted, con su sueldo, cómo lo tendría para instalarse, por ejemplo, en el centro de Madrid?
¡Es que la vivienda está a unos precios desorbitados! Y aún con un sueldo que es público, por supuesto, hay que reconocer una dificultad enorme de acceso, sobre todo, a la compra de vivienda, pero también al alquiler. Y no sólo en Madrid capital, en cualquier gran ciudad de la geografía española. Se ha vuelto un imposible.
Eso está provocando que los jóvenes españoles sean los que más tarde se van de casa de sus padres de toda la Unión Europea. Por encima de los treinta años de media está la edad de emancipación de los jóvenes españoles.
¿Cuáles son las recetas del PP para atajar la crisis de la Vivienda en España?
Es un tema que desde el inicio de esta legislatura venimos lanzando propuestas. La primera: la retirada de esa Ley de Vivienda, que está asfixiando la oferta. No puedes, en una situación que hay una demanda elevadísima una oferta limitada, constreñir aún más la oferta. Entonces, los precios seguirán subiendo.
¿Qué ha pasado en Cataluña? En Barcelona es la ciudad que más ha crecido el precio del alquiler.
Dicen que se ha reducido un 5%.
Nada, sigue siendo elevadísimo. Y donde se sigue viendo que la Ley de Vivienda es un fracaso. Porque en un momento de fuerte demanda y poca oferta no puedes encorsetar más la oferta. Luego, seguridad jurídica a los propietarios. Hay mucha vivienda vacía, claro. Porque los propietarios no tienen la seguridad de poner su piso en alquiler, por las situaciones que estamos viendo de la okupación y de la inquiokupación, que es el que se está dando en amplia medida.
Luego, por supuesto, liberalizar suelo. Necesitamos que se construya vivienda asequible. En comunidades donde gobierna el PP se han lanzado medidas como el Plan Vive, que lanza al mercado vivienda asequible para intentar bajar el precio del alquiler. Son medidas sencillas.
Si hay poca oferta, toda la acción política tiene que ir encaminada a conseguir que haya mucha más oferta en el mercado para que los precios bajen. No todo lo contrario. Están aplicando todo lo que no funciona.
Si proponemos medidas que en el marco económico estamos más de acuerdo con Junts, lo más seguro es que voten a favor
Quería preguntarle por la relación del PP con Junts, ¿hay algo más que conversaciones informales en el Congreso y el Senado?
No hay ninguna relación. Si hubiera alguna relación, Alberto Núñez Feijóo sería presidente, ¿no? Si hubieran esos famosos pactos que se dicen, o si efectivamente hubieran acuerdos con Junts, no estaríamos en la oposición.
Pero Alberto Núñez Feijóo tuvo muy claro que él no pactaba cargarse el Estado de derecho en nuestro país, que él no pactaba destruir la Constitución, como ha hecho por la puerta de atrás el PSOE con esa famosa ley de amnistía, y otra cosa es que coincidamos en votaciones. Obviamente, si proponemos medidas que en el marco económico estamos más de acuerdo con Junts, lo más seguro es que voten a favor. Lo hemos visto con la reforma fiscal.
Lógicamente, si tienen una política económica más próxima al PP que al PSOE, aunque el PSOE meta a todo el mundo en el bloque progresista, lo más sensato es que las medidas que encajen en su punto de vista económico, es que voten a favor.
No existe un pacto con Junts, no existe nada más allá de coincidir en votaciones. Si existiera ese pacto hoy Feijóo sería presidente y el PSOE estaría en la oposición.
Hombre, eso de que sería presidente es cuestionable. Si fuera a través de un pacto con Junts, seguramente Vox se descolgaría. Es difícil el encaje.
Bueno, o no. Lo que está claro es que él dijo que no. Lo que está claro es que no está dispuesto a pagar cualquier precio para llegar a la Moncloa. Sino, él se hubiera presentado a la investidura. Igual Vox hubiera votado a favor. O sí. No lo sabemos, esto son ya suposiciones. Pero si hubiera existido ese acuerdo, Junts hubiera votado a favor.
La diferencia es que Sánchez está dispuesto a todo, cambió de opinión en 48 horas por seguir en la Moncloa y Feijóo, no.
En todo caso, ¿en el marco parlamentario, el grupo de Junts es un interlocutor válido para el PP?
No es que sea válido o no. Es que nosotros planteamos lo que consideramos que es bueno para el conjunto de los españoles. Sin primar a nadie a cambio de sillones ni someternos a chantajes de nadie. No es que nosotros acordemos con Junts, planteamos unas medidas en el Congreso, luego habrá grupos que las voten… o no. Es mucho más posible que las voten Vox, Junts y PNV que Bildu, ERC o incluso el PSOE, que está en la línea de la extrema izquierda actualmente.
Hemos conocido hace poco que el Gobierno arranca el 8 de enero con su agenda maratoniana de actos para conmemorar la muerte de Franco en la cama. ¿Si reciben una invitación, la respuesta cuál será?
La respuesta será: “Qué pereza, de verdad”. Hemos estado hablando en esta entrevista de inmigración irregular, vivienda, jóvenes, reforma fiscal. ¿De verdad las prioridades de España ahora, con la situación que tenemos, son cien actos para celebrar la muerte del dictador? ¿De verdad? ¿Esto es lo que merece el 2025 para empezar el año? ¿Esta es la respuesta que le damos a la gente que no puede permitirse una vivienda, que no llega a fin de mes, a los jóvenes que ven que no les da el sueldo?
Ya estamos cansados de que cuando el Gobierno tiene una situación complicada, y este año ha tenido unas cuantas situaciones complicadas -en de diciembre el calendario judicial del Gobierno ha sido para echarse a llorar con Aldama, la mujer del presidente, la asesora...- sacan el francomodín a pasear. Lo que se merecen los españoles para el 2025 es un gobierno limpio, libre y que crea en las prioridades. Ya está bien de lo mismo de siempre.
La mayor inocentada política en España son los cambios de opinión de Sánchez, que nos toma por tontos
Es verdad que no tenemos una bola de cristal, pero ¿cuál es su previsión para 2025 de tres nombres propios: José Luis Ábalos, Begoña Gómez y Álvaro García Ortiz?
¿Mi previsión? ¡Que van para adelante, como diría alguno! (Risas).
Vamos a ver, sin precedentes. No hay precedentes en nuestro país de un Fiscal General imputado, de la mujer del presidente imputada, del número dos de Sánchez con todos los escándalos que están saliendo de a lo que se dedicaba. Esto, en cualquier situación anterior a Pedro Sánchez, independientemente del partido que gobernara, hubiera supuesto que el Gobierno cayera.
Estoy convencida de que judicialmente tiene recorrido y políticamente, por supuesto, también. Sánchez debería de haber asumido responsabilidades. Es una situación que no se había vivido jamás. Desgraciadamente, tenemos a alguien dispuesto a todo por seguir ahí. Seguiremos trabajando para que en 2025 dejemos atrás esta etapa.
Oiga, como tenemos cerca el día de los inocentes quería preguntarle: ¿cuál ha sido la mayor inocentada política de este año?
¡Qué buena pregunta! El Gobierno en sí es una inocentada. Un día te dicen una cosa y al día siguiente es inocente y ya hemos cambiado de opinión. La mayor inocentada son los cambios de opinión de Pedro Sánchez, que nos toma a los españoles por tontos.
esnalar
29/12/2024 11:20
¿Por qué decis Junts? Este diario, que se escribe en español, debería de decir Juntos, del mismo modo que dice Lóndres o Nueva York. Que, por cierto, se podría decir Nuevo Jamón Cocido. Es una ironía, pero ya se le llenan a uno las pelotas de Generalidad, Izquierda RC y cosas similares.
dinamitebar
29/12/2024 11:45
España no puede aguantar el coste politico establecido, desde un ayuntamiento por poblacion a los dos platillos volantes inmensos sobre cargados de chupones amarillo y azul de la UE.No hablo de corrupcion ni de los 10000 llobbies de la UE.hablo de que ¡ya esta bien! Ya esta bien de politicos pros ya esta bien de financiar partidos sindicatos y patronales y ya esta bien de la mamonada politica. Toda esta gente que pretende hacer carrerita que no aportan nada y que se repiten como cotorras y todo dicen lo mismo segun instrucciones n, no sacan España adelante con UNA REMORA.Y me dan verguenza ajena.