Junts está exultante. Se ve ganador de la negociación del paquete fiscal, lo que le satisface especialmente respecto a ERC. El Dictamen del Proyecto de Ley por la que se establece un Impuesto Complementario para garantizar un nivel mínimo global de imposición para los grupos multinacionales, aprobado in extremis en la madrugada del martes en la sesión más caótica que se recuerda, no incluye el impuesto a energéticas, su gran línea roja.
No hay votos para sacar adelante este impuesto y aunque el escenario es incierto y depende en buena medida de Podemos, de la votación del Pleno del Congreso este jueves no se esperan grandes sorpresas respecto a lo que salió adelante en la noche del lunes, salvo que el propio Dictamen decaiga de la mano de los morados, que no participaron de la votación del lunes y que están inmersos en un pulso firme contra Sumar. Y en este caso, tampoco habrá impuesto a energéticas, que muere el 31 de diciembre.
El compromiso que ERC, Bildu y BNG le arrancaron a la desesperada al Gobierno a las 23 horas del lunes de mantener los impuestos a banca y energéticas tiene escaso recorrido. Salvo que Junts virara en redondo y enterrará su bandera de que el impuesto a energéticas no siga.
El Consejo de Ministros puede aprobar un Real Decreto-ley que prorrogue los impuestos a banca y energéticas como el Gobierno se ha comprometido con ERC, Bildu y BNG pero apenas estará en vigor un mes porque el Congreso no lo convalidará.
De fondo, los intereses electorales de cada cual y el efecto de que este proyecto decaiga en la legislatura. En principio, a quien más beneficiaría que haya elecciones es a Podemos, que podría aprovechar la caída libre de Sumar.
Lo que se votó y se vuelve a votar
La Comisión de Hacienda en el Congreso rechazó en la madrugada del martes el impuesto a la banca, la subida del diésel y la supresión del régimen de las SOCIMI. Además de la subida del diésel y del fin de las SOCIMI, tampoco han salido adelante la imposición de un IVA del 21% a apartamentos turísticos, el fin de la exención de los seguros sanitarios privados y el impuesto a grandes herencias de Sumar. El impuesto a energéticas había quedado fuera de los pactos del PSOE con PNV y Junts y Sumar.
Sí se validaron las enmiendas del PSOE y PNV que pretenden atajar el fraude en hidrocarburos, una subida a las rentas del capital de dos puntos, al 30%, para rentas desde 300.000 euros transaccionada por PSOE y Sumar y una mejora de la reducción de las rentas irregulares en el IRPF para artistas. También se han validado las alzas en el Impuesto sobre Sociedades y una rebaja de tipos para micropymes y cooperativas del PSOE. Se ha dado luz verde a mejoras técnicas al impuesto mínimo del 15%, pero no a que la Ley de Presupuestos pueda modificarlo.
Éste era el resultado tras votar las enmiendas individuales y seis transaccionales, después de que los grupos hayan defendido sus posturas encontradas y contradictorias y en medio del enfrentamiento de los socios. A pesar del aval al Dictamen con 20 votos a favor y 17 en contra, que no se produjo hasta las 0.52 horas, las enmiendas rechazadas quedan vivas -y, por lo tanto, volver a ser debatidas y votadas- en el Pleno que se celebrará este jueves. Tood indica que también se votarán las transaccionales.