"Muchas veces se centra todo en decir que 'hace falta más dinero para la Salud Mental', y es verdad, pero no es lo más urgente". Estas palabras fueron pronunciadas por el famoso cómico Ángel Martín este mismo jueves en un acto de la Confederación Salud Mental España. Pocas horas después, la publicación del informe Mental Headway 2023 vinieron a darle la razón.
Este documento, en cuya elaboración han participado personas como Celso Arango, presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría (SEP), el exsecretario general de Sanidad, José Martínez Olmos o la diputada Carmen Navarro, viene a confirmar que la Salud Mental no se resuelve solo "echando billetes". No hay una correlación directa entre los países que tienen más profesionales de la Salud Mental o más renta per cápita con mayor felicidad o ausencia de patologías mentales.
Aunque qué duda cabe observando los datos de que, en España, hace falta un esfuerzo mayor. Si observamos el apartado de profesionales sanitarios del área de Salud Mental, España está a la cola, empatada con Bulgaria. Son los dos países de Europa con menos profesionales de la Salud Mental por 100.000 habitantes, sumando psiquiatras, psiquiatras infantiles, psicólogos y enfermeras especializadas.
España se encuentra en 25 profesionales de la Salud Mental por cada 100.000 habitantes, mientras que Suecia presenta una ratio tres veces superior (150) y Finlandia una cuatro veces más alta (200). En cuanto a las enfermeras especializadas, la diferencia de ratio entre Dinamarca (el país que más tiene) y España (el que menos) es de 150.
Inversión en Salud Mental
Si atendemos al apartado de inversión en Salud Mental respecto del total de gasto sanitario, España repite mala nota al situarse debajo de la media. Según el informe, España gasta apenas el 5% de su inversión sanitaria en Salud Mental. Siguiendo la comparación con los países nórdicos, Suecia invierte el doble, el 10% de su presupuesto sanitario.
Prevalencia de trastornos mentales
A pesar de que las cifras en cuanto a dedicación de recursos sacan los colores a España, lo cierto es que en la comparativa con el resto de países no queda en tan mala situación. Si bien es cierto que las estadísticas sobre prevalencia de trastornos mentales (depresión, ansiedad y TDAH, los más habituales) ponen a España en segundo lugar a nivel europeo, con 20.000 casos por 100.000 habitantes, no está a tanta distancia de países que dedican muchos más recursos al sector de la Salud Mental.
Irlanda, por ejemplo, también ronda los 20.000 casos por 100.habitantes, a pesar de que su ratio de profesionales de Salud Mental es más del triple que la española y su inversión en el sector es dos puntos porcentuales superior a la de nuestro país, situándose por encima de la media europea.
España, de los países con menos suicidios
A pesar de la escasa inversión y número especialistas, España está a la cola en el ratio de suicidios por 100.000 habitantes. A pesar de ser un importante problema en nuestro país, causando más muertes que los accidentes de tráfico, presentamos una ratio de 7,5 suicidios por 100.000 habitantes. Esta cifra es inferior a la media europea, cuya ratio es de 11,7.
Los países nórdicos presentan datos mucho menos favorables en cuanto a suicidios. Suecia presenta una ratio de suicidios de 12,1, mientras que Finlandia dobla el dato español con una ratio de 15.
¿A más dinero mejor salud mental?
En la reciente propuesta de Ley de Salud Mental de Podemos se hace hincapié en que la crisis económica ha tenido un impacto en la Salud Mental de los ciudadanos. Sin embargo, atendiendo a los datos de este estudio se puede comprobar que los países ricos no son siempre los mejor parados. España presenta una renta per cápita que es la mitad de Finlandia y Suecia, y su ratio de suicidios es muy inferior a la de estos países como se ha visto.
