El Cuerpo de Enfermería de Instituciones Penitenciarias se encuentra al límite. A la excesiva carga de trabajo en las prisiones, provocada por las vacantes de médicos en toda España, se le une la falta de legislación en sus puestos de trabajo. Su actividad está ligada a un marco normativo que data de 1.981. Más de 400 trabajadores se han unido y forman parte de una plataforma que busca soluciones a este problema. Valoran acometer desde huelga a acciones reivindicativas en las próximas semanas, según han informado algunos de sus integrantes a Vozpópuli.
Para coordinar y hacer un frente común, estos trabajadores de prisiones han creado un chat de mensajería donde se encuentran más de 400 del total de 600 que hay en toda España. Este grupo se llama 'Interlocutores de Centros Penitenciarios'. Uno de sus miembros, Manolo, que trabaja en las instalaciones de Tenerife, explica qué piden y cómo piensan llevar a cabo sus acciones reivindicativas.
7 nuevos médicos para toda España
Sus problemas vienen de lejos y tampoco han encontrado soluciones en el presente más inmediato. El detonante del mismo es la carencia de médicos. En la última convocatoria de oposiciones sacaron 80 plazas para esta especialidad: solo se presentaron una veintena de personas y aprobaron 15. Se dio la circunstancia de que al curso de formación acudieron solo siete personas. El resto no quiso acceder a unas plazas que ya les había tocado.
"Una de las problemáticas es que las oposiciones son de carácter nacional y eso influye a la gente que se presenta. Quieren trabajar cerca de su casa", explica este portavoz a Vozpópuli. Tal como publicó Vozpópuli el sindicato CSIF elaboró una lista con las vacantes de médicos en las cárceles que refleja que de 489 plazas solo están cubiertos 178 puestos. Hay 311 especialistas sin cubrir. Respecto a esta problemática la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias explicó a este medio que las competencias de la sanidad penitenciaria están transferidas desde el 2003 a las Comunidades. Solo País Vasco, Navarra y Cataluña las han adquirido, junto al control total del sistema.
Los enfermeros de prisiones trabajan fuera de la ley
Se cumplen dos décadas y no se han producido avances en este aspecto, que afecta directamente al personal de Enfermería. "Tenían un cierto miedo de perder el control sobre los médicos de prisiones que tienen que hacer muchos papeles y ser muy legalistas. Firman desde traslados a aislamientos. También que los presos puedan salir de permiso", detallan desde este colectivo.
Esta plataforma, creada de forma espontánea, cuenta con un representante de cada centro penitenciario de toda España. El principal debate que tienen marcado en su agenda es el reconocimiento de su profesión ya que aún tienen que trabajar con un reglamento que se remonta a 1.981 cuando aún eran considerados Ayudante Técnico Sanitario (ATS) en prisiones. "Prácticamente estábamos para limpiar las botas al médico. Teníamos que estas a disposición de los que diga este profesional y no podíamos casi actuar de forma autónoma", bromea Manolo.
El colectivo de enfermería, que hasta hace unos meses eran considerados héroes por la sociedad por su labor durante la pandemia, busca su sitio y que se les reconozca su labor. Y es que en su día a día prácticamente tienen que trabajar fuera del reglamento también debido a la carencia de médicos en las prisiones.
"Nos parece vergonzoso"
Los profesionales de Enfermería sospechan que la pretensión de sus jefes es que terminen sustituyendo a los médicos. "Nos parece perfecto que quieran hacer una sanidad basada en la enfermería pero que nos den un marco de competencias adecuado", reclaman. Otra de sus quejas tiene que ver con el complemento salarial ya que perciben el más bajo de todos los funcionarios de prisiones cuando forman parte del grupo de trabajadores que disponen de trato directo con los internos. En la última subida salarial han incrementado sus ingresos pero no acorde con el resto de funcionarios. "Nos parece vergonzoso", afirman miembros de esta plataforma.
Para que se escuche su voz están analizando diferentes medidas de protestas. Entre ellas se encuentra no acceder al interior de las prisiones y atender a los pacientes solo en la enfermería. Una de las cosas que hacen en la actualidad. También piensan en derivar los casos a los médicos, cuando muchas de sus plazas no están cubiertas. Por el momento, estos profesionales han presentado un escrito que está firmado por 500 trabajadores. Han nombrado a tres representantes para que sean los interlocutores de este colectivo con los jefes de prisiones que se encuentran en la capital.