La supuesta trampa fue doble, tanto para Santiago Cervera como para José Antonio Asiáin, presidente de Caja Navarra. Para el primero, porque lo ha puesto fuera de la política a la que ya no ve ninguna posibilidad de volver, y al segundo, porque la nueva normativa sobre las cajas obliga a la renovación de sus responsables en enero y Asiáin ya “está caput”, según fuentes populares. En el entorno de Cervera, que insiste en la trampa, señalan que quien haya promovido esta estrategia conocían muy bien tanto a uno como a otro, y no dudan en señalar hacia la "conexión navarra", en concreto hacia el PP de Navarra, donde el que fuera diputado popular no dejó grandes amigos tras el último congreso regional.
A pesar de ser el presidente saliente de los populares navarros, Cervera defendió para su sustitución el pasado mes de mayo una candidatura alternativa a la que propugnaba Génova. Poco después se forzó a una candidatura de consenso donde se repartieron las responsabilidades en una proporcion 60-40 entre los oficialistas y los alternativos. Ese proceso terminó por ahondar profundas heridas que ya existían de antes. Tras ese cónclave, el hasta hace un día secretario cuarto del Congreso de los Diputados, espació sus visitas a Pamplona a donde acude ahora solo los fines de semana para ver a su padre.
Quien lo contactó anónimamente conocía las costumbres de Cervera, que durante el resto de la semana permanecía en Madrid para acudir a su puesto de trabajo en la Cámara Baja.Twitero muy activo, informaba puntualmente de sus llegadas a la Carrera de San Jerónimo y narraba lo que acontecía en el pleno. De hecho, ayer, sobre las doce de la mañana colgó una fotografía de unos pantalones vaqueros con el siguiente mensaje: “Inusual atuendo para un martes”, pero también retuiteó los mensajes del Congreso, entre ellos, la agenda del día y la felicitación navideña del presidente de la Cámara Baja, Jesús Posada.
Cervera decidió dimitir voluntariamente, decisión que reforzó cuando escuchó la rueda de prensa de Cospedal dejándolo caer
Cervera se ve ya fuera de la política de forma definitiva tras su decisión ayer de dejar el escaño y el Partido Popular. En declaraciones a Vozpópuli explica que “cuando hablé con Alfonso Alonso ya tenía tomada la decisión de dimitir. No podía estar seguir todo el día en el escaño expuesto”. La rueda de prensa de María Dolores de Cospedal dejándole caer “no condicionó” una decisión que asegura que estaba decidida aunque le reafirmó en la misma dada la ausencia de cualquier atisbo de apoyo. Es más, tras su reunión con el portavoz parlamentario del PP, telefonearon a Cospedal, que en ese momento estaba ofreciendo una copa de Navidad a los periodistas que cubren el Partido Popular, para comunicarle la decisión “y agradecerle la acogida que he tenido en el partido”. Sin embargo, su relación con Cospedal no ha sido muy fluida porque Cervera no ha compartido lo que él entiende de “entreguismo” del PP a UPN, motivado por las buenas relaciones entre la número dos popular y la presidenta de la Comunidad foral, Yolanda Barcina.
Su belicosidad contra los gestores de Caja Navarra no ha variado un ápice en los meses que ha estado fuera de la política navarra“y quien le tendió la trampa bajo el argumento de que tenía información sobre la entidad financiera sabía que eso era el mejor señuelo para él”, un señuelo, al que no se pudo resistir visto lo visto. Respecto a la investigación Vozpópuli ha podido conocer que el correo que recibió Cervera lleva hasta Rumanía y el de Asiáin a Alemania, lo que no quiere decir que no fuera enviado por la misma o las mismas personas. Son redes especilizadas en envíos anónimos que usa la delincuencia organizada.
