Vox ha irrumpido por sorpresa en el debate presupuestario, lo que ha provocado más de un quebradero de cabeza al Gobierno de coalición. El partido de Santiago Abascal ha cambiado de estrategia con respecto al año pasado, cuando no solo rechazó presentar enmiendas parciales sino que también se ausentó de las comisiones que debaten y votan las propuestas de los demás grupos parlamentarios. En esta ocasión, Vox ha participado en algunas votaciones. Su apoyo ha resultado decisivo y ha conseguido algunos cambios en el proyecto del PSOE y Unidas Podemos.
Al igual que el año pasado, los de Abascal han presentado una enmienda a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado para 2022 y se han borrado de registrar cualquier otra de carácter parcial. Pero esta vez sí han estado presentes y participando en las votaciones de la comisión del Congreso que se encarga de elaborar el Informe final de la Ponencia. Una nueva estrategia con respecto a 2020 que ha trastocado las cuentas al Gobierno de Sánchez.
Este miércoles, el partido ha apoyado una enmienda de Junts per Catalunya junto a PP, ERC, Bildu y Ciudadanos, que servirá para incluir en los Presupuestos un fondo extraordinario Covid-19 para destinar 9.362 millones de euros a las comunidades autónomas. De estos, 1.600 millones irían destinados a Cataluña. Las formaciones que integran el Gobierno de coalición, PSOE y Unidas Podemos, han votado en contra junto al PNV. Pero la suma de Vox al resto de formaciones se ha traducido en un gol al Ejecutivo por parte de unos 'aliados' inesperados. Vox también ha votado en contra de la partida de 8.431.150 euros para Casa Real.
El Gobierno recurre al veto
La ausencia de Vox de la comisión el año pasado permitió a los partidos de la coalición pasar el rodillo sobre las enmiendas de la oposición. El Ejecutivo, sin embargo, ha encajado este año alguna derrota debido a que la participación de los diputados de Vox ha permitido construir mayorías alternativas a la de Gobierno. Fuentes parlamentarias aseguran a Vozpópuli que el elevado número de vetos -más de 1.000- que ha planteado el Gobierno a las diferentes iniciativas de los grupos de la oposición se debe, en parte, al temor a perder más votaciones como la del fondo covid.
Estos vetos, que es una prerrogativa del Ejecutivo, impiden que las enmiendas lleguen si quiera a votarse. Los letrados del Congreso han remitido dos informes en los que advierten al Gobierno sobre el "exceso" en el uso de estos vetos, tal y como informó este diario. Sin embargo, fuentes socialistas responden que los votos presentados son solo "cuatro más" que los impuestos por el Gobierno del PP en los últimos Presupuestos de Cristóbal Montoro en 2018.
La portavoz del Vox en la comisión de Presupuestos, Inés Cañizares, ha sido la encargada de argumentar la jugada parlamentaria: una vez analizadas las 5.288 enmiendas presentadas por el resto de grupos, Vox participará en la votación de aquellas enmiendas en las que su voto sea determinante. "Siempre que pudiera contribuir a paliar la situación ruinosa que atraviesan muchas pymes, autónomos y familias españolas", ha puntualizado.
Vox se suma a Junts
La de Junts -sostienen fuentes del grupo- se enmarcaría dentro de esas enmiendas. "Estos más de 9.000 millones salen del fondo de contingencia del Gobierno, una suerte de fondo de gastos, y aseguramos que van a parar a un fondo Covid: ayudas en sanidad, en educación y en partidas para la gente más necesitada", indican a Vozpópuli.
La distribución de ese dinero, como los 1.600 millones para Cataluña que figuran en la enmienda, no es vinculante", argumentan.
"La distribución de ese dinero, como los 1.600 millones para Cataluña que figuran en la enmienda, no es vinculante", argumentan. "Nuestro principio rector es que si con nuestro voto se puede conseguir algo positivo para España, y este fondo lo es, lo apoyaremos. La pandemia no ha terminado y reservar más de 9.000 millones para que el Gobierno no los gaste discrecionalmente, sino en Sanidad, es muy necesario", insisten.
Respecto a la partida de la Casa Real, la formación considera que el de la Casa Real es un presupuesto exiguo y que forma parte, en definitiva, de unos Presupuestos con los que Vox no está de acuerdo.
No obstante, las mismas fuentes aclaran que Vox ha votado en contra de todas las secciones del proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2021. En coherencia, dicen, con su enmienda a la totalidad. Cabe destacar que si una sección decae, también lo hacen los presupuestos. La ausencia de Vox en la comisión del año pasado facilitó al Gobierno sacar adelante las votaciones a las llamadas secciones sin el menor apuro. PP, Ciudadanos y Coalición Canaria se unieron para tratar de derribarlas, pero la suma de sus votos no fue suficiente.
Vox choca con PP y Cs
Este año el escenario es bien distinto. Los de Abascal han irrumpido en la Comisión y han rechazado todas las secciones para tratar de tumbar las cuentas. "Lamentablemente, no hemos contado con el apoyo de otros grupos, como el PP, que ha votado a favor de todas las secciones constitucionales, lo que podría haber servido para tumbar los PGE", lanzan fuentes parlamentarias de Vox. Y rematan: "Entendemos que el PP vote a favor de secciones como la del Tribunal de Cuentas y Tribunal Constitucional, porque se lo acaban de repartir…". Fuentes parlamentarias del PP desmienten que su voto en contra hubiese servido para derribar las cuentas.
A diferencia de Vox, el PP y Ciudadanos han registrado 2.070 y 483, respectivamente. Los de Abascal responden a las críticas sobre su forma de hacer oposición en materia presupuestaria asegurando que, a lo largo de estas semanas de tramitación, han presentado más de 1.000 preguntas y más de 300 solicitudes de datos e informes con "el objetivo de fiscalizar, despiezar y denunciar los atropellos que suponen estos presupuestos a los españoles". El portavoz del Grupo, Iván Espinosa de los Monteros, llegó a mostrar el tomo de preguntas impresas en rueda de prensa. "Una verdadera labor de control", repiten los diputados de la formación.
Según el partido, las prioridades de Sánchez son "el ecologismo de salón, la ideología del enfrentamiento entre hombres y mujeres, la condena al sector primario, la industria y mucho internet para los pueblos despoblados de nuestra querida España que nadie utilizará".
