España y la UE llevan meses, desde antes ya de las elecciones del 26J, jugando al gato y al ratón con el déficit y la posible multa de Bruselas por la desviación de casi nueve décimas del objetivo previsto. Si las instituciones europeas aseguraron que habría una decisión definitiva sobre una posible multa después de las elecciones generales, ahora, y según publica El Mundo, Bruselas podría retrasar la sanción hasta después del verano, previsiblemente a octubre.
La idea de posponer una vez más la sanción a nuestro país vendría de Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea. La CE, por sí misma, no puede sancionar, pero sí proponer una sanción, que en este caso y dadas las fechas veraniegas debería llegar a tiempo para el Ecofin de la semana que viene (es este organismo el que tiene la potestad de sancionar). Si no llega, los plazos se dilataría y no se volvería a hablar del tema España -y el portugués, cuyó gobierno también se desvió en sus cuentas públicas- hasta después de acabado el verano.
La idea de posponer una vez más la sanción a nuestro país vendría de Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea
Todos estos movimientos llegan el mismo día que el ministerio alemán de Finanzas insiste en que las reglas europeas sobre déficit "deben ser respetadas". En rueda de prensa en Berlín, el portavoz del Ministerio, Martin Jäger, ratificó que ése es el principio general que apoya el titular alemán de Finanzas, Wolfgagn Schuble, y recordó que en el caso concreto de España y Portugal hay que esperar a ver la decisión que toma la Comisión.
En una entrevista que publica este lunes el popular diario Bild, el comisario europeo de Economía Digital, el alemán Günther Oettinger, se también pronunció a favor de imponer sanciones a España y Portugal al considerar que no hacerlo "resultaría inexplicable para la gente".
