Las fuerzas militares egipcias han ocupado la sede de la televisión estatal situada en el distrito de Maspero. La retransmisión en directo ha sido interrumpida tras la irrupción del Ejército que ha provocado que los trabajadores abandonen las inmediaciones.
Sin embargo, Shoukry Abu Amira, director de la radiotelevisión pública, ha manifestado que el Ejército está vigilando el edificio del medio egipcio. Además, ha negado que los trabajadores hayan tenido que salir por la intervención de los militares.
Según la NBC y la agencia Reuters, además del control de la televisión se han desplegado vehículos blindados en lugares estratégicos de la ciudad de El Cairo como las embajadas y las cercanías de la Plaza Tahrir.
Mientras, las concentraciones que demandan un cambio en el gobierno prosiguen en El Cairo bajo la vigilancia de un número cada vez mayor de militares armados tal y como se ha recogido en Twitter.
El Partido Justicia y Libertad relacionado con los Hermanos Musulmanes no quieren reunirse con el general Abdelfatá al Sisi, ministro de Defensa y jefe del Ejército. Sin embargo, sí que se ha mantenido contacto con Mohamed el Baradei, representante de la oposición y premio Nobel de la Paz para decidir su acción futura en el caso de que Morsi no cumpliera con el ultimátum interpuesto, según fuentes citadas por Efe. Posteriormente esta información fue desmentida por la agencia oficial egipcia Mena.
El gobierno egipcio se ha comprometido a proteger a los habitantes y a combatir “con firmeza” cualquier acto violento. El Ministerio de Interior explicaba en un comunicado que se enfrentará a estas trifulcas "junto a nuestras valientes Fuerzas Armadas, sean cuales sean los desafíos y los sacrificios que impliquen".
Mohamed Mursi, el presidente egipcio, ha declarado a través de un portavoz que dejaría su puesto por el bien de la nación. El portavoz Ayman Ali ha asegurado que “es mejor para un presidente, que de lo contrario devolvería a Egipto a los días de la dictadura, de los que Dios y la voluntad del pueblo nos han salvado, morir de pie”.