Las elecciones de Estados Unidos se acercan, y las encuestas no sacan nada en claro. La distancia entre Donald Trump y Kamala Harris se recorta, y todo el mundo mira al país estadounidense expectando del resultado de las urnas el próximo martes 5 de noviembre. La fecha no es casual: sus ciudadanos siempre son llamados a votar un martes, pero, ¿a qué se debe esto? El motivo es histórico, y se remonta al siglo XIX.
Aunque la candidata progresista lidera las encuestas, lo hace con muy poco margen: la diferencia siempre ronda el punto de ventaja o desventaja, cifras que a nivel estadístico, resultan insignificantes. Así, todo se decidirá, como marca la tradición, el martes posterior al primer lunes de noviembre. La religión, además de la situación del país de la época, jugaron un papel importante en la elección de la fecha.
¿Por qué EEUU vota siempre un martes?
El país elegía votar cada martes posterior al primer lunes de noviembre con el objetivo de conseguir una mayor participación en las elecciones. En aquella época, la situación e infraestructura disponible de transporte era muy diferente a la actual. Así, se decidió elegir un día que permitiese el viaje antes de la jornada clave, pero sin interferir en el descanso de la población por motivos religiosos.
Por estos motivos, el domingo quedaba descartado para no interferir en el día de descanso y culto. Por motivos similares el lunes tampoco resultaba el día ideal: en el caso de aquellos que tuvieran que viajar, deberían hacerlo el día de antes, domingo. Finalmente, también se barajó que la población acudiera a las urnas un miércoles, pero no era recomendable a nivel laboral, ya que este era el día de mercado, cuando los agricultores llevaban sus productos y alimentos a las ciudades.
Actualmente, y a pesar de la tradición, la normativa genera controversia. Si bien es cierto que se trata de un país muy religioso, hay muchos que plantean cambiar la jornada electoral ya que, al tratarse de un día laboral, muchos no tienen la posibilidad de participar debido a sus obligaciones.
Noviembre, fin de la cosecha
El mes seleccionado tampoco es casualidad. El Congreso de Estados Unidos aprobaba la Ley de Elecciones en 1845, norma donde se establecía la fecha en la que todos los estadounidenses están llamados desde entonces a ejercer su derecho a voto. Esto ocurre en noviembre por un sencillo motivo: responde al ritmo y fechas manejadas por los agricultores.
Al igual que votar un miércoles no resultaba beneficioso para este gremio al transportar sus alimentos a las urbes, el mes de noviembre es la mejor época del año para los trabajadores. Esto es así ya que las cosechas ya han terminado, por lo que los ciudadanos rurales pueden desplazarse con mayor facilidad sin comprometer su trabajo en el campo.