Fue en 2010 cuando la acción del Grupo Prisa descendió hasta el valor de 1,5 euros y alguien tituló una noticia de la siguiente manera: “Cada participación del grupo cuesta menos que el periódico Cinco Días”. Mucho ha llovido desde entonces, pero la trayectoria descendente en el mercado bursátil de la propietaria de El País y la Cadena SER no se ha revertido. Actualmente, cada título cotiza a 37 céntimos de euro.
Durante el último mes, su valor se ha desplomado el 20%, lo que ha supuesto un golpe para los accionistas del grupo, que ya han vivido fenómenos similares en tiempos relativamente recientes, como cuando arreció la pandemia y las participaciones cayeron en pocos días desde los 1,33 euros hasta los 53 céntimos. O en verano del año pasado, cuando los movimientos de algunas carteras de fondos de Wall Street provocaron que el título descendiese desde los 88 hasta los 47 céntimos en agosto.
El escaso valor de la acción le hace especialmente volátil -algo que se acentúa en estos tiempos de incertidumbre-, pero lo cierto es que su descenso ha sido mucho mayor en estas primeras semanas del curso que el de Vocento, que cotiza a 61 céntimos tras devaluarse el 4% en un mes.
Las diferencias no son tan amplias si se toma como referencia los datos del último medio año. En ese tiempo, los títulos de Prisa se han depreciado el 43%, por el 37% de los de Vocento, el 30% de Atresmedia y el 40% de Mediaset España.
El caso de Prisa
La llegada de nuevos accionistas -Vivendi y Global Alconaba-, la refinanciación de la deuda del grupo y la elaboración de un plan estratégico para los próximos años hizo pensar en la cúpula de Prisa que la confianza de los mercados en la compañía iba a aumentar, en pleno proceso de transformación digital del negocio.
De momento, no ha sido así, hasta el punto que hoy se podría hacer una versión actualizada del titular que se citaba al principio de este artículo, que afirmara: “Hacen falta 27 acciones de Prisa para pagar la suscripción al muro de pago de El País, que cuesta 10 euros al mes”.
El grupo selló a principios de 2022 un acuerdo con los bancos acreedores que implicó un aplazamiento de los pagos de su deuda -que posee Pymco en su mayoría- hasta 2026 y 2027. Sin embargo, la situación de su balance, unida a la crisis de los medios de comunicación y las turbulencias económicas internacionales no han provocado una mejora sustancial de su situación.
¿Cómo es la realidad financiera de Prisa? El pasado julio, la compañía envió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su informe semestral de resultados y ahí se podía apreciar que Prisa debe un total de 834 millones de euros. Esta cantidad aumenta hasta los 904 millones si se tiene en cuenta el actual criterio de contabilidad (NIIF 16).
El pasado diciembre, los adeudos del grupo ascendían a 756 millones (825 NIIF 16), pero esta cantidad ha aumentado ostensiblemente desde entonces por varios motivos. El principal tiene que ver con la adquisición del 20% de Prisa Radio que estaba en manos del Grupo Godó. El precio de esta operación fue de 32 millones de euros.
A esta cantidad hay que sumar los gastos extraordinarios derivados del proceso de refinanciación -nueve millones de euros- y de las indemnizaciones a las que ha hecho frente el grupo durante los últimos meses, que son de 12 millones.
Del total de deuda de Prisa, un total de 240 millones vencen en junio de 2026, mientras que 575 millones lo hacen en diciembre de ese año. Los otros 185 millones deberá abonarlos en junio de 2027.