Son días complejos para el presidente de Radiotelevisión Española, José Manuel Pérez Tornero. El pasado lunes comparecía en el Congreso de los Diputados y respondía a algunas preguntas relacionadas con el nombramiento de directivos con los que había mantenido una relación profesional directa en el pasado. También otras relativas a MasterChef, que se plantearon tras el suicidio de Verónica Forqué.
Pérez Tornero se sienta a conversar con este periódico en mitad de esta pequeña tormenta perfecta y conversa durante media hora, cara a cara, sobre la situación de la radio-televisión pública, sobre sus planes de futuro, sobre las presiones políticas y, claro, sobre las últimas polémicas que han salpicado a la corporación.
Pregunta: Luis Pastor, subdirector de Transparencia y Conocimiento de RTVE. Cargo de nueva creación. Usted defiende que su nombramiento es adecuado, pero usted conocía a esta persona anteriormente. ¿Comprende que esta contratación haya levantado sospechas?
Respuesta: Desde que fui nombrado y tuve constancia de que el Tribunal de Cuentas había recomendado que los procesos de nombramiento de directivos se realizaran por concurso de méritos, hemos hecho todo lo posible para que fueran transparentes. Así ha sido este proceso. Y este nuevo subdirector del Instituto RTVE reúne todos los méritos que se pedían.
P: Pero usted conocía a esta persona y había publicado varios libros en la editorial de la que fue director general…
R: Bueno, yo conozco a mucha gente tras 40 años de ejercicio profesional. Él había sido colega mío, efectivamente, pero es que el ministro de Universidades actualmente también lo es. Me parece muy disparatado decir que (Pastor) ha sido contratado en RTVE por haber tenido relación conmigo. Mira lo que te digo, si lanzáramos una norma por la cual cualquier persona que hubiera tenido relación profesional anterior con el director de RTVE se le excluyera de la posibilidad de ir a un concurso, en mi caso habría que excluir a una buena parte de la profesión periodística española, pues por mis aulas han pasado infinidad de periodistas. Y en la Universidad Autónoma de Barcelona tiene 3.000 profesores.
P: Sólo por añadir un dato: este directivo es especialista en e-learning y la plaza creada es para e-learning…
R: Nosotros teníamos y tenemos la misión de aumentar el número de estudiantes del Instituto RTVE y de hacer la enseñanza más híbrida. Ese puesto requiere especialización y por eso los que se han presentado han sido pocos al concurso. Yo esto sé muy bien cómo funciona por la ciencia. Cuando se abren concursos científicos para formar parte de un grupo de investigación para una universidad, hay seis o siete personas en el mundo que pueden acceder a esa plaza. Ojo, el puesto que buscábamos era para un perfil muy concreto y Pastor estaba capacitado.
P: Pero, reitero: a tenor de su relación anterior con Pastor, ¿comprende que surjan sospechas?
R: Yo creo que son injustas. Porque, mira, sospechar se puede sospechar hasta de lo insospechado; y crear sospechas es fácil. Hay una frase que me encanta: “La verdad nunca alcanzará el daño que puede hacer la apariencia de verdad”. Cuando lanzamos una apariencia de verdad que en realidad es falsa, creamos un mal y una desconfianza que puede a la verdad. A mí me preocupa mucho el déficit de confianza y de legitimación de la vida pública que surge por todo aquello que se difunde y que tiene apariencia de verdad, sin serlo.
Cuando asumí la presidencia de RTVE supe que no iba a tener una posición cómoda
P: ¿Por qué cree que se ha publicado esto ahora?
R: Cuando asumí la presidencia de RTVE supe que no iba a tener una posición cómoda. Yo no entendí esto como un trampolín profesional, pues cuando se acabe mi mandato supondrá el fin de mi vida profesional. Aquí hay muchos intereses cruzados que hacen que cualquier decisión, prácticamente, sea discutible y que cualquier decisión que afecte a intereses económicos se considere denigrable. Yo lo que defiendo es que estos procesos de contratación los hemos hecho de un modo transparente, abierto y sin mi intervención. ¿Qué conflicto de intereses va a haber si yo no intervine en el proceso?
P: ¿Cree que el pacto político para renovar el Consejo de Administración le perjudique cuando cambien los vientos políticos?
R: Voy a ser muy rotundo: a mí me hubiese gustado que el Consejo, en pleno, hubiera sido fruto de la elección de las Cámaras entre los finalistas mejor puntuados. Eso hubiera legitimado el concurso. La renovación se pudo hacer por esa vía. Dicho esto, todos los miembros del Consejo tienen mis respetos. Pero yo creo que esto nos fuerza a que todos y cada uno sepamos cumplir con las obligaciones que figuran en la ley, que no es representar a ningún partido, sino cumplir el encargo de gestión que nos ha hecho el parlamento; y garantizar que los medios públicos sean objetivos y neutrales. El Consejo tiene que ser eficaz y asegurar la misión pública de RTVE.
P: Los dos consejeros de Podemos denuncian que usted les margina en este órgano. Y Comisiones Obreras, que está aliado con ellos, ha pedido su dimisión…
R: He dicho en los pasillos del Consejo que los consejeros tenemos deber de confidencialidad y de lealtad a la empresa. Esto es muy importante. Hace poco, se habló esto en los pasillos del Consejo. Yo no quiero afirmar lo que usted dice en su pregunta, pero yo creo que podemos extremar nuestra vigilancia sobre algo, y es sobre el secreto de las deliberaciones que mantengamos. Un consejero no puede airear su malestar en las redes sociales, por ejemplo. Tiene mucho poder en la empresa y debe cumplir la ley, que obliga a mantener la confidencialidad.
Un consejero no puede airear su malestar en las redes sociales, por ejemplo. Tiene mucho poder en la empresa y debe cumplir la ley, que obliga a mantener la confidencialidad
P: Hablemos de MasterChef. ¿Qué le ha trasladado a la productora después del suicidio de Verónica Forqué?
R: Mis directivos mantienen un debate abierto para avanzar en el próximo contrato con el programa. Se supervisará el contenido y queremos que haya una implicación más directa por parte de RTVE. Queremos también lanzar un debate acerca del entretenimiento que debería ofrecer una televisión pública. Creemos que esta obligación es más importante que la búsqueda de audiencia a toda costa.
P: Sé que usted tiene discrepancias con los audímetros, pero 2021 va a ser el peor año de la historia de RTVE. ¿Qué va a hacer para corregir esto?
R: A ver, toda persona que haya trabajado en investigación en Ciencias Sociales sabe que cuando hay un muestreo, con cualquier universo, en este caso, los potenciales 47 millones de espectadores, hay un sesgo. Yo lo que digo es que muchas veces, cuando la prensa difunde estos datos nunca menciona los márgenes de error y discutimos décimas cuando no son significativas. Pero también hay una serie de problemas cualitativos que hacen que no debamos sacralizar los sistemas actuales. Ahora bien, reconozco que tenemos un problema de audiencia y que existe desde antes de que llegáramos a RTVE. Hay decisiones que se tomaron en años anteriores que han incidido directamente en buena parte del ejercicio actual. ¿Cómo vamos a intentar remontar? Vamos a invertir más en producción propia y ajena; vamos a ser más rigurosos en la selección del contenido y vamos a buscar la adhesión del público. También vamos a tener en cuenta un fenómeno que es nuevo; y es el de la audiencia no lineal, que es creciente y que tenemos que afrontar.
P: ¿Pero cómo afectará todo esto a la parrilla?
R: Habrá cambios tácticos, relacionados con la búsqueda del minuto de arranque de un programa y mejorando la continuidad de la programación. A lo mejor hay que comprimir algunos programas o hacer que empiecen más tarde o más temprano. Ese será el regate corto. Pero luego, en el regate medio, tenemos lagunas importantes los fines de semana o en la tarde. En el prime time estamos “así - así”. Tenemos que ver la duración de los informativos, mejorar el arranque del noticiario de la mañana… Tenemos que hacer apuestas arriesgadas de emisión simultánea y mejorar las autopromociones. Eso, entre otras cosas. Es un trabajo complejo, pero espero que dé sus frutos en el primer semestre del año que viene.
P: Me consta que está interesado en la mejora del Canal Internacional. ¿Cómo se posicionará RTVE?
R: Nosotros no perdemos dinero con la señal internacional nuestra, pero cuando analizas internamente y externamente nuestra oferta ves que queda corta. Nosotros vamos a reforzar el Canal Internacional mediante la producción y la colaboración con televisiones en Hispanoamérica. También vamos a reforzar el periodismo de referencia. España está vista en Latinoamérica como una potencia europea, democrática y con respeto a los derechos humanos y eso debemos aprovecharlo. Estamos trabajando con un equipo periodístico para lanzar nuevos programas. Por otro lado, queremos hacer una apuesta fuerte para entablar alianzas con televisiones europeas y latinoamericanas; y llegar a acuerdos con el sector cultural español. También queremos incrementar la colaboración con la Agencia EFE y con las universidades.
P: ¿Cómo vamos a pagar todos los proyectos que tiene?
R: Si la ley de financiación que se desarrollará en 2022 nos da un presupuesto estable, los canales que hagamos para América Latina pueden tener retorno económico a partir de patrocinio, publicidad o ayudas de empresas e instituciones. Si nuestro Canal Internacional es líder de esta apuesta internacional, estoy seguro de que empresas españolas nos apoyarían. Y si todo el sector audiovisual, creativo, nos ponemos de acuerdo para acaparar fondos Next Generation y apostar por la mejora de la fiscalidad para el sector audiovisual que quiere el Gobierno, y sindicamos nuestros esfuerzos, estoy seguro de que la aportación de la industria al PIB va a crecer bastante.
P: Las empresas de telecomunicaciones dejarán de financiar RTVE en 2023 y, a partir de entonces, estarán obligadas a hacerlo las OTTs. Se estima que habrá un descenso de los ingresos de casi 120 millones de euros. ¿Cómo se paliará esa caída?
R: A nosotros no nos gustaría perder esos ingresos, pero eso no depende de nosotros, sino del Gobierno y del Parlamento. Si consideran que las telecos deben invertir en 5G y menos en RTVE, lo respeto. Ahora bien, la ley apunta a que las plataformas audiovisuales van a tener que pagar, puesto que nosotros renunciamos a competir en el mercado publicitario. ¿Cuántas empresas de telecomunicaciones gestionan plataformas audiovisuales? ¿Vamos a recibir aportaciones de ellas? Por otra parte, se pueden conseguir nuevos recursos a través de la Tasa Radioeléctrica, por ejemplo. También se puede mejorar el patrocinio cultural… Creo que hay que luchar. En febrero se abre el debate y será amplio y largo.
P: Creo que su silla es la más caliente de toda la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales. ¿Ha recibido muchas presiones políticas estos meses?
R: Yo hablo con muchos grupos políticos y hay algunos que son más corteses que otros. He recibido peticiones de todo tipo. También ayudas. El que un presidente reciba presiones de intereses públicos o privados es natural y razonable. Ahora bien, debe autorregularse hasta dónde llegan esas presiones. ¿Hacer caso a estas presiones? Eso forma parte de la conciencia profesional y de la fortaleza moral de quienes las reciben?
Hablo con muchos grupos políticos y hay algunos que son más corteses que otros. He recibido peticiones de todo tipo
P: ¿Alguien del Gobierno se dirigió a usted o al director de los Servicios Informativos para que no fueran al viaje organizado por el Frente Polisario a los campamentos saharauis hace unas semanas?
R: Mira, yo te aseguro que a mí nadie del Gobierno me dijo nada. Yo soy muy sensible a los temas de deontología profesional. La televisión pública tiene que ser responsable y ha de tener en cuenta la libertad de prensa, la independencia profesional y el derecho a la información.
P: ¿Pero se prohibió el viaje?
R: Nunca se prohibió el viaje. Se informó en RTVE con mucha profusión e independencia, más que en otros medios privados. Y lo que podía haber sido un debate interno, sobre la conveniencia o no de mantener ese viaje, se convirtió en un tema externo que perjudica la reputación de los profesionales de la casa. Eso sí, creo que esto nos ha servido para mejorar. Hemos lanzado una instrucción para registrar los viajes que se nos ofrezcan y comprobar su idoneidad. Esta norma nos permite ser libres y, a la vez, ejercer la transparencia proactiva.
P: ¿Se reciben muchas presiones de las productoras desde su posición?
R: RTVE recibe muchas peticiones de productoras para colocar programas, que siempre dicen que son muy buenos o los mejores. Lo que nosotros queremos es garantizar a las productoras una respuesta a tiempo a sus ofertas, pues son legítimas. Por otro lado, debemos darles una motivación de la respuesta y eso requiere un estudio interno que debe estar bien fundamentado y debe ser transparente. Podemos equivocarnos, pero debemos justificarlo bien. Estoy intentando hacer un esfuerzo para que esto quede bien claro. ¿Presiones de las productoras? A nuestra casa llegan ofertas comerciales de todo tipo.
P: Andreu Buenafuente seguro que les ha ofrecido sus servicios…
R: Ha venido de forma transparente, ¿eh? Y otros muchos.
P: ¿Y le van a fichar?
R: Pues no lo sé, de verdad. Lo que sí veo es que muchas productoras que antes sólo veían como mercado las televisiones privadas están dirigiéndose a nosotros.
