Arantxa Sánchez Vicario ha vuelto a regresar a España tras conocer la noticia de la muerte de su padre, Emilio Sánchez Benito, del que se pudo despedir días antes mientras se encontraba aún en el hospital aunque en estado vegetativo.
Sin embargo, lejos de relajarse la situación en la familia, la presencia de la extenista, que acudió junto a su marido Josep Santacana, no fue bien recibida y se produjo una situación muy desagradable en el tanatorio de Les Corts en Barcelona, donde reposan los restos mortales de su padre.
La campeona de tenis y su pareja se vieron obligados a abandonar el recinto por orden expresa de sus hermanos: “Una vergüenza, me han vetado mis hermanos, por eso estoy aquí hablando con vosotros porque creo que no es lo adecuado, sobre todo no es el lugar, ni el momento”, explicaba Arantxa a la salida del tanatorio para sorpresa de todos los allí presentes.
Durante los veinte minutos que estuvieron en el interior de la sala se produjeron todo tipo de incidentes. Según ha publicado la revista ¡Hola!, el hermano de la extenista, Javier, intentó impedir de malos modos y a empujones que su cuñado entrase en la sala, produciéndose un forcejeo.
Arantxa relataba así el encuentro: “La situación ha sido así, he entrado, he saludado a mi madre, le he dado dos besos, nos hemos abrazado como madre e hija, mi madre se ha echado a llorar, se ha desmayado -la están atendiendo para ver que le ha sucedido- y a partir de allí, me han vetado y me han dicho que me fuera. Parece que a mis hermanos les moleste que esté aquí”.
La extenista comentó también que no asistirá a la misa funeral después de lo sucedido: “No puedo despedirme de mi padre porque mis hermanos no me han dejado. Si mañana no me veis en el funeral es porque no quiero armar ningún espectáculo porque no es normal que me hayan montado el 'numerito' que me han montado. Así que quiero decirlo porque estoy cansada de tantas especulaciones”.
Al parecer fue el forcejeo entre cuñados lo que provocó que la madre de Arantxa, Marisa, se desmayara, teniendo que ser atendida por una ambulancia que se trasladó hasta el tanatorio y que abandonó el lugar cuando ya se encontraba mejor.
Respaldada en todo momento por su marido, la extenista ha lamentado lo sucedido: “Es un momento muy duro, he venido a ver a mi padre y a mi madre, y esto es lo que ha pasado” y añadía: "Yo tengo el mismo derecho, soy su hija, es mi padre el que ha fallecido. No me lo merezco, es una vergüenza y si tienen algún problema -en referencia a sus hermanos- que lo digan dentro de unos días, ahora no es momento”.