La princesa Leonor cogió su fusil. Un HKG36E, como aquí dejó dicho Gonzalo Araluce. Ha sido la fotografía más gozosa en una semana cargada de imágenes extravagantes y sicalípticas. La montaña de pinganillos de Vox sobre el escaño de Sánchez; la amable reconciliación de Felipe y Guerra, tan conmovedora como estéril; el abacial Junqueras bajo las garras de los leones de las Cortes; el rictus a lo Sleepy Hollow de las futbolistas de la selección, que reclaman más cabezas; el gran narciso planetario dando instrucciones a su siervo Oughourlian, presidente de Prisa, en pleno corazón de Manhattan...
Se levantó la veda. Después de años de adorables restricciones, nos ha sido permitido contemplar a la Heredera en actitud distinta a la monótona profusión de actos oficiales y paseítos con su mami. Un repaso al primer mes de doña Leonor en la Academia Militar en la que se la ha visto, instruida por un sargento de hierro, arrastrándose por el fango, reptando bajo las concertinas, nadando de espaldas cargada con toda la impedimenta, a paso ligero mientras recita a Calderón (en tiempos pretéritos y heteropatriarcales la tropa entonaba "Margarita se llama mi amor"), recibiendo el sable de cadete junto a 611 aspirantes y, naturalmente, cuerpo a tierra en prácticas de tiro. Una visión recia y moderna de la Corona, una imagen natural y próxima, desnuda de artificios. 'Muy humana', dirían los imbéciles del coaching.
Consultará de nuevo a los representantes de los partidos y, concluida la ronda, deberá decidir si designa a otro postulante a la investidura o lo deja correr hasta que se cumpla el plazo y se celebren nuevas elecciones
No está la Institución sobrada de gratas noticias. En la España tenebrosa y prebalcánica, la continuidad monárquica no figura entre las prioridades de una clase política dominada por quienes babean con Azaña -oh, Aznar- añoran el 31, ensalzan el 34 y tienen sueños húmedos con la II República. Hacen chanzas sobre el Emérito, a quien han convertido en irredento bandido, en 'el payaso de las bofetadas'. León Felipe. En su afán caricaturesco, algún medio dedica una página a subrayar que el Rey y su padre 'estarán a 15 kilómetros' la semana próxima en Galicia y, sin embargo, no se encontrarán. Acontecimiento universal y único que monopolizará el firme latido de la vida política nacional.
Anécdotas eméritas al margen, se acercan fechas fatídicas para el Monarca. Núñez Feijóo no logrará este jueves su empeño de alcanzar la presidencia, salvo que algún diputado socialista sufra un inesperado rapto de dignidad. El foco, por lo tanto, volverá al Rey que habrá de consultar de nuevo a los líderes parlamentarios y, concluida la ronda, deberá decidir si designa a otro postulante a la investidura o lo deja correr hasta que se cumpla el plazo y se celebren nuevas elecciones.
He ahí el dilema. Se amontonan voces y plumas que le reclaman gestos heroicos, decisiones ejemplares, que se enfunde el traje de héroe prometeico y protagonice una inconcebible epopeya. Que despoje a Sánchez de la posibilidad de la investidura y que no firme la ley de amnistía -o como quiera que finalmente se llame- que el PSOE tiene ya apalabrada con el prófugo de Waterloo. Se le reclama que protagonice una variante de Ordiny report, esto es, que el Rey prevenga y evite los distintos delitos que perpetrará Sánchez para dar satisfacción a lo convenido con los dinamiteros de la Constitución.
Cuando todo está perdido, se vuelve la mirada hacia la Zarzuela, un tic razonable en una sociedad boba e infantilizada. Que venga alguien y nos salve
"Sólo Felipe VI nos puede salvar de este cataclismo", claman, golpes de pecho mediante, los quejumbrosos de la terrible situación. Le piden otra actuación al estilo de aquel discurso del 3 de octubre. Recitan los pasajes de la Carta Magna que prohíben los indultos colectivos y corean el título II sobre la Corona como 'símbolo de la unidad y permanencia'. Cuando todo está perdido, se vuelve la mirada hacia la Zarzuela, un tic cobardón e inevitable en una sociedad boba e infantilizada. Que venga alguien y nos salve de esta. En cuarenta años no ha sido capaz de dotarse de una clase política presentable que adecente esta Constitución improvisada y chapucera, una nueva redacción del título VIII origen de todos los desastres, una profunda remoción de la ley electora, reforzar un Estado de Derecho firme y sólido, poner en pie un Poder Judicial que merezca tal nombre... No ha sido capaz de revertir y enderezar esa colosal montonera de chapuzas, trampas y agujeros que, inevitablemente, han desembocado en la situación actual, en este pavoroso escenario, negro como una noche cruel y eterna.
Sánchez no es un fenómeno espontáneo, un mal sobrevenido. Tampoco la banda golpista se coló de rondón en octubre de 2017 sin que nadie lo hubiera previsto. Hubo urnas, gente votando en los colegios, escenas de tensión con la policía -'los piolines', dijo Sánchez- enviada malamente a su suerte por el Gobierno mariano. "Es el eterno achaque de España, que todo le sorprende, incluso lo que ocurre en sus propias entrañas", escribió Gaziel.
Mando supremo de las Fuerzas Armadas
La princesa Leonor jurará la Constitución el 31 de octubre, fecha de su mayoría de edad, según informaba la Casa Real. Para entonces, el narciso del progreso ya habrá consumado su investidura, habrá apalabrado, quizás aprobado, la amnistía de Puigdemont y demás delincuentes del procés y se estará avanzando en la fórmula de habilitar una consulta sobre la autodeterminación de una de las regiones de España. Luego, la otra, la de Otegi.
Para entonces, la princesa Leonor, fusil en ristre, ya habrá jurado bandera. Como primogénita del Rey, algún día será Reina, la primera en los últimos 150 años. Asimismo, como establece la Constitución, ostentará el mando supremo de los tres Ejércitos. Pero bueno, eso ya es otra historia. Quizás, una mera fabulación, una ensoñación, un horizonte imposible. Mientras tanto, los listillos seguirán discutiendo sobre lo que ha de hacer el Rey.
Pontevedresa
Los listillos no, los españoles que no soportan la indecencia de un gobiernante y sus acólitos que se saltan todo lo saltable para salvarle el tafanario a Sánchez y que pueda volver a ocupar su sucia poltrona. Claro que esperamos que el Rey esté en la misma dinámica formidable de su discurso sobre Cataluña, porque lo de ahora es mucho peor. Ciscarse en España, convertir a un olvidado Puigdemont en el Emperador de España, es una villanía imperdonable, dejar en sus manos la suerte de 47 millones de españoles es intolerable. Claro que esperamos mucho del Rey Felipe VI, y no nos defraudará.
SANCAD
No lo dude señora. Entre estas elecciones y las generales de diciembre, está en nuestras manos salvar esta gran nación. Por cierto: permítame darle las gracias por escribir correctamente en nuestro idioma y, sobre todo, por la utilización de los signos anteriores de interrogación. No puedo con ese desprecio a nuestro idioma.
Incandescente
Vaya un artículo más bobo!!! "La Corona se alza en armas" De verdad???
Luzmasluz
¿Qué ha de hacer el Rey...? Mucho podría hacer, pero hará nada porque es borbón... Y aun sabiendo que si Sánchez y compañía siguen en el Gobierno hay muchas probabilidades de que la Fiscalía acuse al Rey de algo decisivo... La "izquierda" y los separatistas mandan... los demás a danzar... Pero como la esperanza es lo último que se pierde. esperemos a ver qué pasa en la primera y en la segunda votación sobre el candidato Núñez Feijoo... podría recibir algún apoyo extra sobre todo en la segunda votación...
CRITICO
Leer en estos momentos la frase del articulo " Como primogénita del Rey, algún día será Reina, la primera en los últimos 150 años ", se compadece muy poco de la grave situación política e institucional actuales , con un altísimo riesgo de que devenga en grave crisis constitucional. Realmente, ¿ ese aserto es previsible a día de hoy...? De verdad, ¿ el Sr. Vara cree que esa frase es realista, no está más cerca de ser un brindis al sol, por mucho que implique cumplir la Constitución de 1978 ?. Un análisis más profundo de este asunto nos debería llevar a cuestionar la coherencia de la jura de la Constitución por la princesa Leonor el 31.10 entre un numero creciente de parlamentarios , previsible mayoría en el Congreso, bastantes de ideología republicana, apoyando la amnistía y un acuerdo con Bildu, Junts , ERC , lo que no es nada más ni nada menos que socavar la propia Constitución , sin olvidar que en cualquier momento podrían estar pensando, si no lo están haciendo ya , en referéndums Monarquia - República. Aparte a lo indicado antes , la preparación militar tan intensa de la princesa - 3 años - muy superior a la del resto de herederos en otras monarquías europeas, no deja de ser una exigencia mas que discutible, por no decir un sinsentido. En este sentido me parece muy recomendable la lectura del artículo de hoy en vozpopuli.com """ ¿Y el Rey qué va a hacer? Felipe VI, otra víctima de Pedro Sánchez """ de Alberto Pérez Giménez.
AngelitoLobo
Su peloteo es vomitivo...no se esfuerce Vara que Zarzuela no agradece nada...no le harán Conde de Vara.
AngelitoLobo
Vara: Decepciona usted mucho con su peloteo a Zarzuela. El Rey puede perfectamente no designar a Sánchez para la investidura, los independentistas no van a Zarzuela a explicar su voto luego....tendrá que explicar el Rey que lo hace por persona que dice que tiene los votos. Por supuestísimo que designará a Sánchez en Zarzuela hay PAVOR A ENFRENTARSE A LA IZQUIERDA...pero mira tu por dónde va a perder la estima de la España harta de los chantajes nacionalistas que son muchos más que esa izquierda que le hace temblar al "Marido de la Leti"
Pontevedresa
federico que tiene sus cualidades, ha perdido el norte, y es desde que ha maltratado en una entrevista a Rocío Monasterio tratando de humillarla y comportándose como si fuera su criada, ella no perdió la serenidad y esto le exasperó, desde entonces está rabioso contra todo lo que sea VOX. Esta noche creo que va a arabiar mucho.
Xirolme
Felicidades. Si, este país en cuarenta años, ocupándose de lo urgente dejó sin hacer lo importante. Una pena.
Talleyrand
Buen articulo. Personalmente ,otro fracaso colectivo más y me bajo de este autobús averiado que es España, porque salvo durante las dictaduras que curiosamente nos han traído progreso, los periodos parlamentarios nos han llevado a más cantonalismo, más desorden, más cainismo y finalmente pobreza.
PijoListo
Hola
None
… Buenas sean, José Alejandro Vara. Día a día sigo leyendo y escuchando el mismo trasfondo de la cuestión que, al día de hoy… y de ayer y de mañana, nos reclama atención a todos. Un modus operandi igual para todas las diferentes posturas: la culpa es del otro. No es, esta tal actual circunstancia, el efecto de una sola causa, si bien es cierto que hay un detonante al que llamaremos “mentira” o el abandono, y casi repudio, del valor de “la palabra dada”.. Y esa es la cuestión fundamental de todo lo que viene pasando, fíjese, ya no sólo en España sino en el mundo entero. Yo no creo, y se lo digo con la misma cálida cordialidad que me transmite, que pedirle al Rey una actuación determinada determinante, sea un gesto de debilidad, de lloriqueo. No. Ni tampoco considero que sea una suerte de herejía insolente e irrespetuosa hacia la Corona, reclamar que cada uno actuemos según el rol que nos toca, del mismo modo que entiendo, porque así he sido educado, que demandar la firmeza en esa palabra dada, un juramento, siempre ha de ser desde el respeto, máximo a mi entender, con que uno ha de dirigirse al Rey. Y no por el simple hecho de que sea Rey, sino por lo que ha demostrado, y está demostrando, como persona. Por cierto, gracias a que está, y existe el Rey, el Ejercito Español es neutral, libre, a menos que traicione, de letales arrebatos como los que suelen tener los dictadores. Quizás, fíjese, sea esa, entre otras, una de las cosas que persiga Sánchez al querer derrocar la Corona. Hacerse con el control del Ejército. Se han desvirtualizado. Se han prostituido y se han terminado invirtiendo los principios y valores, (como se desvirtualizó el Zen, pseudo convertido, por muchos, en un extraño batiburrillo de falsas fórmulas mágicas como las que maneja el coaching, gran negocio de quienes lo comercializan) . Estando, ya, en fase de tratamiento paliativo, el curativo debe buscarse en la raíz. Muy profunda, por cierto. ¿Dónde ha quedado el valor de “la palabra dada”?. Esa es la cuestión que pongo encima de la mesa. No se reduce todo a si el Rey hace o deja de hacer, si el político hace o no deja hacer o si el ciudadano se hace palomitas o se las roba al de al lado. Pero, caballero Vara, esta es simplemente una humilde reflexión que vengo a compartir sin más pretensión que esa. Es lo que tiene la Libertad. Las cosas no se imponen, se escogen aceptando la responsabilidad de las consecuencias, ¿verdad? Muchas gracias siempre, José Alejandro Vara. Siempre aprendiendo con gente como usted. De verdad. …