El empresario, investigado por la policía por el pago de 6 millones de euros a Rodrigo Rato en 2011 a través de Lazard, posee el 4% de las acciones de este grupo de medios de comunicación (Casgo S.A.). Su dimisión del Consejo de Administración se produce “después de varios meses sin asistir a las reuniones” y tan sólo unas semanas después de que Víctor Urrutia abandonara la compañía.