Tras varias jornadas de huelga, los maquinistas de Renfe y la empresa ferroviaria pública llegaron el pasado jueves a un acuerdo para desconvocarla. Ambas partes pactaron las demandas del Sindicato
Un maquinista jubilado de Metro de Madrid, cuya identidad se corresponde con las iniciales G.J.R., de 65 años, es el octavo trabajador de la compañía fallecido por haber estado expuesto
El sindicato de maquinistas protesta por la noticia de este medio en la que se dijo que el conductor A. Díaz Cámara es "dirigente": en efecto, es afiliado, y su esposa firmó un contrato con Renfe por 50.000€ al año para hacer de su piso un hotel. 'Vozpópuli' muestra fotos del piso y el número de contrato.
Según un documento elaborado por la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios, el tren circulaba a 179 km/h en la curva de Angrois, limitada a 80 km/h. Además se apunta que al responder a la llamada del interventor, no aplicó el freno de forma adecuada para reducir la velocidad.
El minucioso informe del contenido de las cajas negras elaborado por la Unidad Central de Criminalística de la Comisaría General de la Policía Científica, al que ha tenido acceso Efe, fija el primer registro de voz a las 20:39:15, tras sonar el politono del teléfono corporativo de Garzón, extraviado tras el siniestro, a las 20:39:06.
Según la información recuperada este martes, en los minutos previos al descarrilamiento el maquinista recibió una llamada en su teléfono profesional para indicarle el camino que tenía que seguir al llegar a Ferrol y por el contenido de la conversación y por el ruido de fondo "parece que el maquinista consulta un plano o algún documento similar en papel".
Las primeras personas que interaccionaron con él tras el accidente recuerdan a un hombre abatido que repetía que se quería morir para no ver lo que había provocado, según el atestado policial y el sumario al que ha accedido el diario El País.
El Tribunal Superior de Justicia de Galicia quiere que el maquinista Francisco José Garzón pase disposición judicial "en los juzgados" y no en el hospital.
Estas son las contundentes palabras que el maquinista del tren que se accidentó el miércoles en Santiago pronunció tras ser consciente del descarrilamiento del Alvia que ha dejado 80 víctimas mortales hasta el momento.