La primera imagen que te viene a la cabeza cuando oyes la palabra BlackBerry es la de un móvil con una pequeña pantalla y un teclado QWERTY físico. Esta firma canadiense ha vendido muchos millones de ese tipo de terminal pero la idea se le agotó. Cuando quiso integrarse en el universo táctil era ya tarde y muchos de sus fans, ante las alternativas que les ofrecía BB, ya se habían fijado en otras marcas, propuestas y sistemas operativos.
Precisamente, su sistema operativo no estaba a la altura de las circunstancias, ya que pecaba de dificultad en la configuración, necesitaba un plan de datos propio, le faltaba compatibilidad… detalles que chocaban frontalmente ante la insultante facilidad de uso y universalidad de Android e iOS/Apple. BlackBerry se puso manos a la obra y generó un nuevo sistema operativo móvil (llamado 10) y el primer modelo en aprovecharlo ha sido el Z10 (ojo, acaba de lanzar el Q10, con teclado físico, que tiene muy buena pinta).
Sólo un par de líneas para describirte su diseño (porque para gustos, los colores): transmite robustez, buenos acabados y consistencia. Su dorso, de un material gomoso, es muy acertado y su definición estética general destila que tienes en la mano un producto premium.
EL Z10 funciona de maravilla porque el sistema operativo BlackBerry 10 funciona de maravilla, una redundancia que no es gratuita porque, más que nunca en el mundo móvil, eres lo que tienes. Es un sistema muy sencillo, compatible con todas tus cuentas de correo y sociales, atractivo visualmente y del que te haces con sus riendas en apenas unos minutos de uso. Su interfaz se divide en tres zonas: la de accesos directos a las aplicaciones, la de dichas aplicaciones pero con su contenido ampliado y la (redoble de tambor) del BlackBerry Hub, que merece una explicación. Imagina tener toda la actividad de su móvil en una pantalla: llamadas, citas, SMS, email, notificaciones… Con un solo vistazo, ves lo que necesitas saber. Maravilloso, magnífico, en serio, muy útil.
Sólo se le puede poner un pero al Z10: la calidad de su pantalla resulta mejorable, se echa en falta algo de definición y al subir el brillo, sufre. Esto, a efectos de multimedia, es un inconveniente. Y tú le pondrás otro si eres de los que necesita una tienda de aplicaciones en la que, de cada tipo, puedas encontrar al menos diez. No, la tienda de apps de BlackBerry tiene pocas (y eso que ya son 100.000) en comparación con las de Google y Apple; pero las más populares están. En Internet tienes el Z10 libre por unos 500 euros.
