A estas alturas, todos hemos oído hablar de los alimentos probióticos. Convertida en una de las palabras de moda en los últimos años, siendo incluso reclamo en anuncios publicitarios, los alimentos probióticos ganan fama a pasos agigantados. Incluso en aquellos que desconocen lo que realmente suponen.
La OMS define los probióticos como microorganismos vivos que, administrados en las cantidades adecuadas, aportan importantes beneficios para la salud.
Desde hace años, expertos y profesionales de la salud estudian las propiedades saludables y nutricionales de los probióticos en los alimentos, lo que ha llevado a elaborar numerosos informes que señalan los interesantes beneficios que tienen para el consumidor.
El término probiótico significa “a favor de la vida”, y se utiliza para designar a las bacterias que tienen efectos beneficiosos para los seres humanos y los animales.
¿Qué son los alimentos probióticos?
A comienzos del siglo pasado, diferentes expertos encontraron evidencias de la capacidad de algunos alimentos de, gracias a sus propiedades, modificaban la flora de nuestro organismo, e incluso su capacidad de sustituir los microbios nocivos por otros útiles. Hablamos de los conocidos como alimentos probióticos.
Se trata de alimentos naturales que, una vez fermentados, contienen bacterias vivas y levaduras que resultan beneficiosas para nuestro sistema digestivo. Estos microorganismos crecen en el intestino adhiriéndose a la mucosa y creando un efecto barrera que resulta beneficioso para la microbiota intestinal.
Los beneficios de los alimentos probióticos
Desde hace años, muchos son los beneficios que se le atribuyen a los alimentos probióticos. Alimentos que mejoran la flora intestinal favoreciendo importantes funciones de nuestro organismo como la digestión, la salud inmunológica o la absorción de nutrientes. Repasamos los beneficios más destacados de los alimentos probióticos:
- Estabilizan la flora intestinal
- Ayudan a luchar contra el estreñimiento
- Estimulan las defensas del organismo
- Combaten las alergias reduciendo los tiempos y los síntomas
- Aumentan la salud respiratoria
- Ayudan a perder peso
- Están relacionados con la lucha contra la depresión
- Reducen los niveles de colesterol
- Ayudan a combinar los síntomas del con irritable y la Enfermedad de Crohn
¿Cuáles son los alimentos probióticos?
Aunque existen suplementos que nos ayudan a introducir los probióticos en nuestras vidas, un mercado que crece con el paso de los años, hay que señalar que estos los encontramos en alimentos naturales. Alimentos con altos niveles de probióticos que, muchos de ellos, son habituales de nuestra dieta diaria, y otros, merece la pena descubrirlos para incorporarlos a nuestro día a día.
Yogur
Tal vez, de entre todos los alimentos ricos en probióticos, el yogur sea el más popular y el más consumido. Elaborado a partir de leche de vaca, cabra u oveja, este alimento cuenta con altos niveles de probióticos, beneficiosos para la salud digestiva y capaces de regenerar la flora intestinal. Eso sí, no todos los que encontramos en las tiendas valen. Olvídate de las versiones con sabores ni trozos, tienen que ser naturales y, preferiblemente, sin pasteurizar.
Aceitunas y encurtidos
Convertidos en los reyes de muchos aperitivos, los encurtidos, como las berenjenas o pepinillos en vinagre, y las aceitunas también nos ayudan con buenas dosis de probióticos. Sus procesos de fermentación les llevan a contener bacterias vivas de lo más beneficiosas.
Kombucha
Esta bebida probiótica se ha convertido en una de las modas más sanas del momento. Una bebida que aseguran ha conquistado a la mismísima reina Letizia, y que se elabora a partir de té fermentado. Considerado un gran aliado para el tránsito intestinal, cuenta además con antioxidante
Vinagre de manzana
Aunque no está catalogado como un alimento probiótico como tal, su pectina de manzana alimenta a la microbiota, favoreciendo el equilibrio de la flora intestinal. Además, ayuda a controlar la presión arterial y reduce los niveles de colesterol.
Chucrut o col
El conocido como chucrut se elabora a partir de la fermentación de la col. En un alimento probiótico muy conocido con un sabor ácido y una textura crujiente.
Kéfir
Al igual que la kombucha, este alimento se ha puesto de moda en los últimos años. Se trata de un lácteo muy similar al yogur, pero que cuentan con una mayor diversidad de microorganismos al haber sido fermentado a través de ciertas levaduras y bacterias.
Queso crudo
El queso crudo también cuenta con una importante cantidad de probióticos. Eso sí, no cualquier queso, hablamos de queso crudo, aquel sin pasteurizar. Como dato, al igual que ocurre con los yogures, cuenta con mayores niveles de probióticos los de oveja y cabra que los de vaca.
Miso
Esta pasta, muy conocida en la cocina asiática, se elabora a partir de la fermentación de la soja con el hongo koji. Es un potente probiótico al que también se le atribuyen propiedades digestivas y beneficiosas para el corazón.
Chocolate negro
Objeto aún de numerosas investigaciones, todo apunta a que el cacao podría tener también propiedades probióticas. Eso sí, lo más puro posible y sin azúcares añadidos.
Microalgas
Originarias también de la cocina asiática, cada vez son más conocidas algas como kombu, chorella o espirulina, unos alimentos considerados auténticas bombas probióticas.
Pan con masa madre
Otra de las tendencias en auge en cuestiones alimentarias son los panes con pasa madre. Además de deliciosos, estos también son considerados alimentos probióticos. La lenta fermentación de las levaduras confiere grandes beneficios a quien los consume.