Aunque quedan descartados los milagrosos poderes que la gente les atribuye, sí es cierto que los superalimentos ofrecen importantes beneficios para la salud por encima de otros productos y alimentos, tal y como comenta la OMS. De esta manera destacan, por ejemplo, aquel con más proteína que la carne y más fibra que la avena, el que mejora el deseo sexual o el que ayuda en el rendimiento deportivo.
Desde hace años, los expertos recomiendan llevar una alimentación saludable que incluya una variedad de alimentos que aporten los nutrientes necesarios al organismo. Eso sí, aunque son muchos los que cumplen esta función, no a todos se les puede calificar como superalimentos, porque no todos ayudan al correcto funcionamiento del organismo como tal. Al margen de ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) defiende que la propia salud es un "estado de completo bienestar físico, mental y social" y no solo considera la ausencia de afecciones o enfermedades para su actual propuesta.
Gracias a sus destacadas propiedades nutricionales, todos estos superalimentos ayudan a mantener estable la salud e incluso a prevenir algunas dolencias. Desde hace unos años están en boca de todos los profesionales de la salud y del medio, como es el caso de la OMS. Sin embargo, el término 'superalimento' fue definido en 1986 por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). La entidad considera así a aquellos alimentos que, por sus características nutricionales naturales, "si se combinan con buenos hábitos confieren mejoras apreciables en la salud".
Así, teniendo claro que no existen comidas milagrosas, los expertos confirman la importancia de incluir estos superalimentos en las dietas. Este es el caso, por ejemplo, de los dátiles, que además de ser un fruto que cuenta con un sabor dulce apetecible, también es un condimento ideal para sustituir el azúcar en las comidas ya que potencia un sueño de mayor calidad y combate la fatiga del cuerpo.
El dátil, el superalimento recomendado por la OMS para evitar la fatiga física
La razón por la que los dátiles gozan de tanta fama en la actualidad como endulzantes es debido a que, tal y como subraya la OMS, se consideran un buen sustituto de los azúcares libres. Se trata de un fruto procedente de la palma datilera o palmera real que, aunque su temporada óptima transcurre entre octubre y enero, alcanzando su máxima popularidad de cara a las fiestas navideñas, podemos encontrarlo también en los mercados en cualquier momento del año.
Considerados una importante fuente de fibra (en torno a 7,1 gramos por cada 100 gramos), los dátiles son ricos en minerales como el potasio, el hierro, el calcio o el magnesio; así como un manantial de vitamina E, que actúa como antioxidante, pero también de los grupos A, B y C. A parte de estos beneficios, la OMS también destaca otras funciones como la retención de líquidos, sus propiedades saciantes (que les permite convertirse en un snack perfecto), la disminución de los niveles de colesterol y la presión arterial o la prevención de la inflamación cerebral, entre otras muchas más.
Tal es su condición como superalimento que debido a estas propiedades, "los árabes, griegos, hebreros y egipcios llamaban a la palmera datilera "el árbol de la vida". Por otro lado, los fenicios la apodaban "el árbol de Dios", ya que se podía sobrevivir viajando por el desierto con un puñado de dátiles en la mano, informa la propia Fundación Española de la Nutrición (FEN) en su página web.
A pesar de todas estas cualidades, el consumo de dátiles también tiene que ser controlado ya que cada pieza contiene entre 7 y 24 calorías, lo que hace que 100 gramos de dátiles supongan 288 calorías para el organismo, además de 63 gramos de azúcar. Para equilibrar los nutrientes y minerales necesarios para afrontar la jornada, la OMS recomienda comer de uno a tres dátiles al día.