Kyle Korver no es una estrella, al menos no una al uso, pero quizá es el mejor tirador que se ha visto sobre una cancha. Esta temporada va camino de conseguir una hazaña única: anotar en un mismo año más del 50% de sus tiros, más del 50% de los triples y más del 90% de los tiros libres. ¿Cuántos lo han hecho en la historia? Ninguno, claro. Hay seis jugadores que han logrado el 50-40-90, tremendos tiradores todos. Pero lo de Korver es más aún. Este año juega en Atlanta y eso le hace estar en el mejor equipo de la liga, que sabe que tiene un seguro cada vez que le da a su tirador la bola en una posición abierta. Está inventado.
Lo lógico sería pensar que las apuestas pensarán en él como principal opción para ganar el concurso de triples de hoy, pero no. La gente preferiría ver ganar a Stephen Curry que, además de ser un excelente tirador, es un jugador completo. Uno de los mejores de la liga, la estrella del equipo que marcha primero en el oeste, los Warriors. Es curiosa la buena fama que tiene entre los apostantes Curry –hijo de Dell, que era un Korver de su época— ya que será su cuarto intento en este concurso y, de momento, no lo ha hecho con éxito.
No es casualidad que los dos mejores equipos de la liga tengan enormes tiradores, más bien al contrario. En los últimos años, los años de la estadística, se ha instalado en la liga la noción de que es imprescindible para ganar tener alguien que tire bien de fuera. La idea es que, si no tienes de eso tienes un problema, porque una defensa lista podrá centrarse en menos espacio de terreno y aprovecharlo a su favor.
Miren a los tiradores de hoy, no solo a Korver o a Curry, los favoritos, también a Thompson, que es compañero en Golden State de Curry y el segundo mejor peón de su equipo en la liga. De hecho una de las claves del equipo es que no tienen solo un jugador que destaque desde fuera, son dos y eso abre muchos espacios y da muchos dolores de cabeza a los rivales. Ser los mejores de oeste es mucho, teniendo en cuenta el poco equilibrio que se da ahora mismo entre ambas conferencias, con el talento acumulándose en la conferencia de los Warriors.
Tener tiradores, en estos tiempos, distingue a sus equipos ¿qué tienen en común los ocho jugadores que intentarán ganar el concurso de este año? Todos ellos forman parte de equipos que actualmente estarían metido en play off. No son, claro, el único motivo por el que esto ocurre, el éxito en un deporte como el baloncesto es siempre producto de una suma de factores, pero tampoco es casualidad que sea así.
Los tiros de la noche será de fogueo. El fin de semana de las estrellas es una enorme operación de mercadotecnia que permite a la liga dar su mejor imagen, acoger a muchos periodistas y sacar músculo. Korver, Curry, Thompson y los demás aparecerán para dar espectáculo e intentar ganar algo de dinero. Pero ellos, que en otro tiempo vivían a la sombra de los altos, ahora también son claves para la NBA. No son solo flor de concurso.
