El equipo McLaren ha vuelto a mostrar este martes su peor cara en la primera jornada de test en el circuito de Barhéin, donde ha sido el equipo que menos ha podido rodar con diferencia y su piloto probador Oliver Turvey ha finalizado en última posición, en un día comandado por Lewis Hamilton (Mercedes).
El joven piloto británico debutaba al volante del MCL32 y apenas pudo rodar 17 vueltas en toda la jornada, menos de la mitad que el segundo piloto menos activo del día, Lance Stroll (Williams), que completó 35 giros pero compartiendo labor con su compañero de equipo Felipe Massa, quien hizo 55.
Una fuga de agua a primera hora de la mañana obligó a cambiar el motor en el MCL32 de Turvey
Los problemas para el equipo de Fernando Alonso comenzaron muy rápido, ya que Turvey apenas pudo completar dos vueltas de instalación antes de que se averiara su monoplaza. El equipo confirmó que se trataba de una fuga de agua en el ERS que obligó a cambiar el motor y tuvo varias horas parado el coche.
Por la tarde el inglés pudo rodar casi al final de la sesión. Y en apenas media hora no pudo mejorar mucho sus tiempos y acabó último a más de 3.6 segundos del mejor registro del día.
"Gracias a Oliver Turvey y a su equipo por su duro trabajo en condiciones difíciles", dijo McLaren a través de su cuenta en Twitter, lanzando una disculpa pública a su propio piloto. Este miércoles será el turno para Stoffel Vandoorne.
En lo más alto de la clasificación, Mercedes y Ferrari confirmaron que son los equipos más en forma y lograron finalizar al frente y sus pilotos entre los más activos, solo superados por las 106 vueltas de Marcus Ericsson (Sauber).
Lideró Lewis Hamilton (Mercedes) con un mejor tiempo de 1:31.58 después de rodar 97 vueltas, cuatro más que el italiano Antonio Giovinazzi (Ferarri), que fue segundo a más de seis décimas del tricampeón mundial.
Avería de Hamilton
La sesión comenzó con diez minutos de retraso porque hubo que retirar unos contenedores situados en una zona peligrosa a la salida de la calle de garajes. Cuando sólo había transcurrido un cuarto hora, el tricampeón inglés se quedó detenido en la pista y causó la primera bandera roja. La causa, una mala conexión en el sistema eléctrico fue subsanada pronto.
Hamilton, segundo en el GP de Barhéin por detrás del alemán Sebastian Vettel, combinó tandas largas y cortas con el objetivo de comprender mejor el comportamiento de los nuevos neumáticos Pirelli.
Sebastian Vettel, titular de Ferrari y líder del Mundial, trabajó con los neumáticos para el año que viene, por lo que la labor de desarrollo del coche recayó en Giovinazzi. Un problema en el motor de su Ferrari por la tarde limitó la jornada de trabajo del alemás, que acabó noveno.
El australiano Daniel Ricciardo (Red Bull), que fue el mejor por la mañana, acabó el día con el tercer mejor registro. En la sesión matinal hizo pruebas de aerodinámica, y en la vespertina se centró en ensayar con los neumáticos.
También tuvo que detenerse en la pista por un problema de motor por la tarde. El australiano será relevado el miércoles por el holandés Max Verstappen.
Carlos Sainz a escena
En representación de Toro Rosso rodó este martes el piloto de GP2 indonesio Sean Gelael, al que también comprometió el motor Renault de su monoplaza. Por la tarde pudo volver a la pista, pero una nueva avería le obligó a detenerse para acabar octavo en la tabla.
Este miércoles rodarán los dos titulares de Toro Rosso, el español Carlos Sainz y el ruso Daniil Kvyat.