El Sevilla, con cuatro títulos, y el Liverpool, con tres, pugnarán sobre el tapete del St. Jakob Park de Basilea por alzar de nuevo el trofeo y confirmarse como dominadores de la Liga Europa, lo que además conllevaría también para uno de los dos el gran premio de disputar la próxima edición de la Liga de Campeones, de la que han quedado alejados en sus competiciones domésticas.
Entroncando con los tiempos en los que se denominaba Copa de la UEFA, los reds tiene en su haber las copas de 1973, 1976 y 2001, con lo que si vencen en Suiza empataría en lo más alto del historial del torneo con los hispalenses. Sólo Inter de Milán y Juventus de Turín tendrían motivos en sus vitrinas para acompañar a los dos finalistas hoy en el selecto club de dominadores de la segunda máxima competición continental.
Los andaluces, recordemos, lograron su cuatro trofeo en la pasada edición ante el Dnipro ucraniano y un año antes, su tercero ante el Benfica, por lo que ahora acometen otro reto: ganarlo tres veces de manera consecutiva, algo que nadie ha logrado. El Sevilla jugó con anterioridad otras dos finales, en Eindhoven y Glasgow, con lo que tiene un pleno de cuatro éxitos en cuatro presencias en el partido definitivo. El Liverpool también ganó este torneo en cada una de las veces en las que se plantó en la final, por lo que en Basilea se dará por primera vez el hecho de que uno de los dos se quede como subcampeón.
Ambos equipos llegan al choque tras concluir sus competiciones domésticas con un discreto rendimiento: el Sevilla ha sido séptimo, completando el dudoso honor de ser el único conjunto de la Liga que no ha ganado como visitante, mientras que el Liverpool finalizó en octavo lugar de la Premier League. Los de Unai Emery sí tienen asegurada la entrada en la Liga Europa del curso que viene, pero los chicos del Mersey no cruzarán sus fronteras durante la próxima campaña si no levantan el cetro.
Los sevillanos cuentan con tres bajas seguras, todas ellas por lesión: el lateral izquierdo galo Benoît Trémoulinas, el centrocampista danés Michael Krohn-Dehli y el extremo José Antonio Reyes. El resto de la plantilla está disponible y mentalizada para ponerle la guinda a una competición en la que los del Pizjuán se mueven como pez en el agua.
La revolución de Klopp
En apenas siete meses, el germano Jürgen Klopp, que llegó a Anfield Road en octubre del pasado año tras la destitución de Brendan Rodgers, ha revivido a los reds y los ha guiado a dos finales. Después de caer en la Capital One Cup ante el Manchester City después de una tanda de penaltis, los ingleses esperan resarcirse ante el Viejo Continente.
Su camino hasta la final ha sido tortuoso, en una competición en la que han ido de menos a más. Sufrieron más de lo debido para liderar un grupo con Sion, Rubin Kazan y Girondins de Burdeos para luego dejar en el camino a Augsburgo, Manchester United, Borussia Dortmund y Villarreal.
Para la final, "el segundo partido más importante que hay hoy en día en Europa", según lo describió el propio 'Kloppo', el Liverpool recupera a uno de sus futbolistas clave: el centrocampista y capitán Jordan Henderson. Después de rotar el domingo en el empate ante el West Brom, el técnico alemán tiene a su disposición a toda su plantilla a excepción del punta Divock Origi y del zaguero Mamadou Sakho, que dio positivo en un control antidopaje de la UEFA y fue apartado temporalmente del equipo.
Henderson, que el pasado fin de semana jugó sus primeros minutos desde la lesión de rodilla que sufrió el 7 de abril, podría ser la sorpresa en el once, en el que cabe la duda de si los británicos formarán con Daniel Sturridge o con un algo más conservador Adam Lallana.
Tienen los ingleses sobrado talento para dar una mejor imagen que la que transimitieron en los primeros meses de curso y, sobre todo, poseen al alma dle vestuario en el banquillo. El ex entrenador del Dortmund, con su especial talante, ha insuflado un compromiso extraordinario a todos los miembros del plantel y paseará su carisma de rockstar por la banda del estadio del Basilea. Quién sabe si se le terminarán aguando los bises.
- Alineaciones probables
Liverpool: Mignolet; Clyne, Lovren, Kolo Touré, Alberto Moreno; Can, Milner, Henderson o Allen; Coutinho, Lallana o Sturridge y Firmino.
Sevilla: David Soria; Mariano, Rami, Kolodziejczak, Escudero; N'Zonzi, Krychowiak; Coke, Éver Banega, Vitolo y Gameiro.
Árbitro: Jonas Eriksson (Suecia).
Estadio: St. Jakob Park.