Comenzó sus pinitos en el mundo de la moda y llegó a ser Mister Castellón en el año 2002. Pero su vida no iba a tirar por ese mundo, aunque todo apuntara a ello. Rápidamente, las intervenciones en series de televisión, obras de teatro y películas se hicieron numerosas en el caso del actor de 34 años.
De hecho, ya poco queda de aquel modelo jovencito que hoy triunfa con dos grandes series. Una nacional (‘Velvet’) y otra internacional (‘Sense8’), que continúa rodando mayormente en Los Ángeles.
“Trabajo 12, 15 o 16 horas cada día”
Pregunta: ¿Cómo ha sido la vuelta a España después de tu rodaje?
Respuesta: ¡Imagínate! Aún no he podido ver a nadie, solo a Bea, que además de mi representante es mi amiga, pero a nadie más.
P: ¿Qué es lo primero que haces cuando vuelves?
R: Lo primero es ver a mi madre y a mi hermana y sobrinos. Son lo más importante. He tenido suerte porque estoy teniendo algo de tiempo libre.
P: Debe de ser sacrificado trabajar fuera tanto tiempo…
R: A mí me gusta mucho trabajar, a quien más echo de menos es a mi madre. Me acompaña a todos lados pero la tendría mucho más tiempo.
P: ¿Cómo es tu vida fuera de nuestras fronteras?
R: Muy intensa porque son 16, 15, 12 horas de trabajo cada día… Básicamente es lo que hago, trabajar. La suerte que tengo es tener a David, un amigo de la infancia viviendo en San Diego, a dos horas de Los Ángeles (cuando estoy allí), y hacemos barbacoas y hogueras, que se estilan mucho allí, y surf.
P: ¿No te queda tiempo para el amor?
R: El amor es lo más bonito que hay en el mundo, pero yo soy un enamorado de la vida.
“Estoy en un momento de disfrutar y me dejo sorprender”
P: Hace algún tiempo te sacaron en una revista en Berlín con una chica…
R: ¡Menuda alegría! Para la vida y sobre todo para mí (ríe). Estoy en un momento de disfrutar, de lo que viene. Me dejo sorprender. Hay cosas que uno no puede manipular.
P: ¿Cómo ligas en Estados unidos? ¿Cuál es tu arma secreta?
R: El acento, les encanta nuestro acento español. Y yo que estoy trabajando para mejorarlo, ellas me dicen que no lo haga.
P: ¿Y no te gustaría formar una familia?
R: De momento estoy pendiente de otras cosas. Ahora mismo no me he puesto a pensar en eso, pero sí que soy muy familiar.
P: ¿Cómo te vendes a una chica?
R: Venderse es lo más mentiroso del mundo. Describirse a uno mismo es complicado. Necesitas una vida para conocerte.
“En Los Ángeles no entienden mis bromas”
P: En los Ángeles no eres tan conocido como en España, ¿resulta más fácil ligar allí?
R: No, de hecho, con el idioma es más difícil, no entienden mis bromas.
P: En ‘Sense8’ haces de un personaje gay, ¿te tiran más las chicas o los chicos?
R: De alguna manera, cuando te ven por la calle, es normal que mucha gente se identifique con mi personaje y quieran conocerme. A mí eso me parece maravilloso.
P: ¿Volverás a ‘Velvet’?
R: Sí, regreso en breve. De forma inminente, a grabar en esta temporada. Han escrito una trama preciosa donde Alberto y Ana aún tienen alguna cosa que decirse y otras en las que las palabras se quedarán a un lado.
“Referentes como Nadal, Guardiola o Banderas hacen que a los españoles nos tengan mucho cariño en Estados Unidos”
P: ¿Y a quién ves por allí de nuestra tierra además de a tu amigo? Álex González nos comentó que os visteis en alguna ocasión…
R: Con él nos hemos ‘pegado’ algún desayuno juntos.
P: ¿Te gustaría seguir los pasos de Bardem o Banderas en Hollywood?
R: Eso me lo tomo como el mayor piropo de esta entrevista. Sin duda son dos referentes muy importantes y te das cuenta del cariño que nos tienen en Estados Unidos, nos lo tienen gracias a ellos y a otros referentes como Rafael Nadal o Guardiola. Hay referentes españoles que nos han puesto en un lugar en el que ahora nos dan la bienvenida solo por ellos.
P: ¿Conoces a Antonio Banderas?
R: Sí y es una de las personas más especiales que he conocido nunca y me di cuenta de lo especial que es. Antonio lo ha hecho todo allí.
P: ¿Qué otros proyectos tienes?
R: De momento seguir con estos dos proyectos (Sense8 y Velvet). He hecho algunas pruebas y castings nuevos pero de momento no tengo nada que pueda compartir. Ojalá.