A punto de terminar el año, el rey Felipe continúa con una ajetreada agenda de compromisos, como el que el pasado fin de semana le llevó a Buenos Aires para asistir a la investidura del nuevo presidente, Javier Milei. Durante su breve visita, a la que acudió sin la reina Letizia, quien permaneció en Madrid junto a sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, el monarca volvió a acaparar las miradas por la férula que luce desde hace semanas en su mano izquierda, que parece estar tardando en recuperarse más de lo previsto.
Fue el pasado 9 de octubre cuando el rey Felipe VI acudió a un acto en el Museo Guggenheim de Bilbao con la mano vendada. Como es de imaginar, esto causó un gran revuelo que desde Casa Real se intentó mitigar aclarando que se trataba de “un vendaje preventivo por una lesión en la muñeca”.
Una lesión que el rey Felipe se había hecho un día antes, durante un partido de pádel con amigos en una de las pistas que hay en Zarzuela, donde tropezó apoyando la mano izquierda en el suelo.
Unos días después, los reyes Felipe y Letizia presidieron la entrega de los Premios Princesa de Asturias donde el monarca apareció con un vendaje diferente, de color negro, que pronto despertaba los rumores de una posible operación quirúrgica. Algo que desmintieron desde Casa Real a ‘El Mundo’, desvelando que el rey Felipe tenía una fisura en el escafoides, aunque no se descartaba una futura intervención: “Tanto los médicos como el Monarca están esperando a que el escafoides suelde de manera natural, y si no, tendrá que ser intervenido”.
Ahora, dos meses después de su accidente deportivo, el rey Felipe continúa llevando la férula de última generación que los médicos le recomendaron hacerse. Una férula a medida que se adapta a la mano con la temperatura y permite una mayor movilidad, y que demuestra que la recuperación del monarca, está siendo más lenta de lo esperado.
Así se encuentra el rey Felipe de su lesión en la mano
Tal y como presenciaron los testigos del encuentro entre el rey Felipe y Javier Milei, el monarca aún se resiente de su dolencia. Y es que, además de llevar aún la férula, evitó tanto levantar como bajar demasiado el brazo, manteniéndolo ligeramente flexionado el máximo tiempo posible.
A pesar de que en las últimas semanas, el rey Felipe ha intentado no dar mucha importancia, al menos públicamente, a su lesión, que no le ha impedido cumplir con una intensa agenda de compromisos, son muchos los que han cuestionado el hermetismo con el que se está tratando el tema desde Casa Real.
Según confirmaron al citado diario hace ya más de mes y medio, el rey Felipe sufre una pequeña fisura en el escafoides, “una dolencia que se trata con un mes de inmovilización, y si suelda de manera correcta, se procede al alta”.
Además, se desveló que el equipo médico del rey Felipe tenía previsto realizar una resonancia magnética en los primeros días de noviembre para saber si el escafoides, uno de los huesos carpianos de la muñeca del lado del pulgar, había soldado.
Algo que por el momento parece no haber ocurrido. Y es que, dos meses después de que el rey Felipe se lesionara y se le inmovilizara la muñeca, continúa llevando la férula. Un detalle que lleva a pensar que el proceso de recuperación no marcha con se esperaba, e incluso, tal y como se aseguró en su momento, podría requerir una operación quirúrgica.
Vozpopuli53
Férula de última generación, eh? A mi, en la SS, me dicen que tome paracetamol (genérico).