Mucho se ha hablado del 86 cumpleaños del rey Juan Carlos. Un aniversario que el padre del rey Felipe VI quiso celebrar con una gran fiesta en su casa de Abu Dabi, donde reunió a numerosos amigos y familiares. Sin embargo, a pesar de los detalles desvelados, y de las muchas especulaciones, no habíamos visto ninguna imagen de la celebración. Hasta ahora.
La revista ‘¡Hola!’ ha conseguido acceder a la fiesta privada del rey Juan Carlos y publica las imágenes del especial evento desvelando los detalles más íntimos y hasta ahora desconocidos de la celebración.
Una celebración a la que, tal y como aseguraron, el rey Juan Carlos invitó a casi un centenar de personas que el pasado 5 de enero le acompañaron en su gran día.
Los estilismos e invitados al emotivo cumpleaños del rey Juan Carlos en Abu Dabi
Tal y como confirma la revista, la celebración del rey Juan Carlos comenzó con un almuerzo en uno de los restaurantes del hotel Four Seasons de Abu Dabi. A las ocho de la tarde, los invitados llegaron en barco hasta la casa en la que vive el Emérito en la isla Zaya Nurai donde les esperaba el homenajeado acompañado de sus familiares.
“Cuando llegaron a la villa se encontraron con un árbol de Navidad gigante decorado en rojo y blanco, una bandera de España flanqueando la puerta hasta el techo y a don Juan Carlos esperándolos con los brazos abiertos para recibirlos junto a su familia en fila” señala la revista.
Y es que, junto al rey Juan Carlos estuvieron sus dos hijas, la infanta Cristina y la infanta Elena, que viajaron hasta Abu Dabi acompañadas de sus hijos. Así se puede ver en una de las imágenes publicadas por ‘¡Hola!’, en la que el Emérito posa de lo más feliz junto a su familia, y que desvela los estilismos que lucieron. Y es que, en contra de lo que se había asegurado, no hubo ningún tipo de protocolo ni código de vestimenta.
Para la gran fiesta del rey Juan Carlos, la infanta Cristina lució un vestido estampado que tomó prestado del armario de la reina Sofía, quien lo lució en 2010 durante la boda de su sobrino, Nicolás de Grecia. Un préstamo al que también recurrió la infanta Elena, que combinó un vestido azul marino con un collar-fular de topacios azules e iolitas, diseñado por Elena Carrera, que forma parte del joyero de su madre.
Al evento asistieron cuatro de los ocho nietos del Emérito: Irene Urdangarin, con un vestido con estampado geométrico en blanco y negro; Pablo Urdangarin, que acudió a la fiesta acompañado por su novia, Johanna Zott, con traje oscuro y camisa blanca; Victoria Federica, que lució un vestido negro con detalles de encaje; y Froilán, que al igual que su primo optó por chaqueta oscura y camisa blanca.
Además de familiares, el rey Juan Carlos contó con la compañía de numerosos amigos. Unos invitados sobre los que mucho se ha hablado, y entre los que se encontraban reconocidos nombres del mundo empresarial como Vicente Boluda, Vicente Cebrián-Sagarriga o Fernando Almansa; e íntimos del exmonarca como su compañero de regatas, Pedro Campos, que acudió con su mujer, Cristina Franze, Miguel Arias, dueño del restaurante Flanagan; el abogado Jerónimo Páez o el doctor Eduardo Anitua. Y es que, tal y como señala la revista, estos cuatro amigos del rey Juan Carlos fueron los encargados, junto con las Infantas, de organizar la fiesta.
Los detalles de la fiesta del rey Juan Carlos: la peculiar tarta, los discursos y la fiesta
En la fiesta no faltó de nada. Eso sí, querían que fuera algo sencillo. Así, en lugar de organizar una cena formal, optaron por un cóctel y un bufé con producto local, que preparó una empresa de catering de Emiratos, y que tuvo lugar entre el porche y la terraza de la vivienda.
Durante la celebración, tomaron la palabra los más cercanos al Emérito. Eduardo Anitua, odontólogo de confianza del exmonarca fue el encargado de ofrecer el primer discurso, tras los que llegaron los de otros amigos, y el de la infanta Elena, quien “emocionó a todos con un mensaje intimista, de corazón y de agradecimiento a su padre, con el que repasó la historia de su vida”.
Terminada la cena, las infantas Cristina y Elena sacaron una tarta muy especial, “con cobertura de fondant y el escudo de su padre estampado, en el que sobresalía también una fotografía suya a bordo del ‘Bribón’”, que el rey Juan Carlos cortó con un sable tras soplar las velas.
A continuación, dio comienzo una divertida fiesta, amenizada por un grupo flamenco y la actuación de Los del Río, que se alargó hasta las dos de la madrugada cuando, tras los bailes, los invitados se despidieron del homenajeado.