La posibilidad de que Chipre abandone el euro ya está sobre la mesa. Así lo refleja la trascripción de las conversaciones que mantienen los responsables de la Unión Europea y que ha publicado la agencia Reuters. A esas conversaciones telefónicas mantenidas ayer miércoles, acuden los responsables de economía o del tesoro de los 17, representantes del Banco Central Europeo y de la Comisión Europea bajo la presidencia del austriaco Thomas Wieser.
Uno de los asistentes, al que Reuters no identifica, afirma que la Unión Europea podría no ser capaz de encontrar una solución al problema y que la situación podría desembocar en una salida del país de la moneda única. “Los mercados creen que encontraremos una solución para dar más liquidez y podría no darse el caso”.
“Los mercados creen que encontraremos una solución para dar más liquidez y podría no darse el caso”, afirma un representante
Alemania no descarta esa posibilidad y su representante únicamente planteó medidas para crear un “cortafuegos” en torno a Chipre con el que “evitar el contagio a Grecia”, según esas conversaciones. La posición alemana fue tan contundente que su representante abogó por liquidar los dos grandes bancos chipriotas y por tomar parte de los ahorros de los ciudadanos, “dentro de los parámetros de lo pactado el sábado”.
El representante del BCE reveló a los asistentes que el banco central estaba preparando ya "ajustes técnicos" para contener la fuga de capitales. Según ese representante, "es necesaria legislación adicional” y admite su impotencia con la frase “estamos ante una situación muy difícil (…) estamos intentando evitar la salida no autorizada de fondos”.
Chipre no participa en esas discusiones
Chipre ha optado por ni siquiera participar en esas conversaciones, algo que los mismos responsables europeos describen como una "decisión muy preocupante". Esa decisión ha sido criticada en las conversaciones. El representante francés afirma: “El parlamento (chipriota) es demasiado emocional y no decidirá nada. Su decisión de no acudir es un gran problema para nosotros. Nunca habíamos visto esto”, concluye.
La quiebra de Chipre ha dejado de ser ya un supuesto teórico. Su "insolvencia" es ya una posibilidad bajo discusión, según esas conversaciones. Aunque el tamaño de la economía chipriota es pequeño (17.000 millones de euros, un 0,2% del total de la economía comunitaria) su impacto podría dispararse si el bloqueo se mantiene. Los mercados permanecían cerrados cuando se publicaron las conversaciones.
Al cierre de la reunión, el representante austríaco tomó la palabra para describir la situación como "confusa". "Su economía se va a hundir, pase lo que pase", concluyó, "son necesarias restricciones de capital".