Iberia ha planteado a los sindicatos la negociación de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por causas organizativas y de producción ante la posibilidad de que las conversaciones entre el Gobierno y los agentes sociales no den como resultado una prórroga de los ERTE de fuerza mayor para el sector aéreo.
La compañía destaca que este instrumento es necesario para poder seguir ajustando sus recursos a la capacidad real y para proteger el empleo, pues la capacidad continúa un 30%-35% por debajo de los niveles de 2019, año previo a la pandemia, debido, principalmente, a las restricciones al turismo con Estados Unidos, América Latina, Japón y China.
En este sentido, aunque desde Iberia no detallan la plantilla a la que afectará la medida a la espera de negociarlo con los sindicatos, explican que "el ERTE se aplica de forma proporcional a la capacidad que se ofrece en cada momento".
La aerolínea contaba con una plantilla de 15.166 empleados a cierre de 2020 (un 13% menos que en 2019, cuando alcanzaba los 17.500, por los empleados eventuales que no se contrataron), de los que se espera que un 30% puedan continuar afectados por este nuevo ERTE (cerca de 5.000).
Iberia se blinda con los ERTE
Con este punto de partida, Iberia tendrá que negociar con los sindicatos cuántas personas se ven afectadas y en qué forma. En cualquier caso, la compañía buscará continuar con el modelo adoptado hasta el momento, en el que los afectados por ERTE no lo estaban al 100% sino en proporción a la reducción de capacidad.
En este sentido, actualmente algunos empleados afectados por el ERTE de fuerza mayor trabajan al 70%. Pese a esto, desde la aerolínea aclaran que el ERTE por causas organizativas es un plan 'b' ante la incertidumbre sobre la prórroga de los de fuerza mayor y la posibilidad de que al final no se prorroguen o que se prorroguen pero no incluya al sector aéreo.
La lenta recuperación de los vuelos de largo radio y las restricciones en vigor aun en muchos países a los que Iberia vuela llevan a Iberia a considerar "imprescindible" que la prórroga de los ERTE de fuerza mayor que están negociando el Gobierno y los agentes sociales incluya al sector aéreo para salvaguardar el empleo de los trabajadores del sector.
La peor crisis de la aviación
En cualquier caso, Iberia necesita seguir aplicando medidas de ajuste y así se lo ha informado a sus sindicatos. La aerolínea ha precisado que conversaciones sobre este ERTE se iniciarían "sin perjuicio de las decisiones que pueda adoptar Iberia respecto a los ERTE de fuerza mayor", una vez que se conozca el resultado de la negociación del diálogo social.
Iberia defiende que los ERTE de fuerza mayor han sido una herramienta fundamental para salvaguardar el empleo en la peor crisis de la aviación, son los que actualmente se aplican a todo el sector turístico en España y, en la actualidad, los que se están aplicando también en la compañía.
IAG -el holding al que pertenecen Iberia, Vueling, British Airways, Aer Lingus y Level- no prevé una recuperación total de la demanda hasta 2023, por lo que sigue centrando sus esfuerzos en minimizar costes y mantener su liquidez por encima de los 10.000 millones. En este sentido, su deuda financiera roza ya los 20.000 millones de euros.