La banca española está necesitada de desprenderse de activos. Los fondos buitre lo saben y andan al acecho. Sin embargo, de momento no existe sintonía entre oferta y demanda. Así quedó patente en la convención entre banca y este tipo de fondos oportunistas que se celebró hace 15 días en el hotel Palace de Madrid. Fuentes conocedoras del encuentro aseguran que estas firmas se interesaron no sólo por carteras de crédito promotor o paquetes de inmuebles, sino principalmente por préstamos morosos al consumo, de pymes o hipotecarios, sobre los que el sector espera que tengan que realizarse nuevas provisiones tras los test de estrés de Roland Berger y Oliver Wyman.
“Los precios que ofertaron por estas carteras sin ladrillo fueron de derribo”, aseguran algún participante en las negociaciones. De hecho, algunas ofertas de estos fondos buitre llegaban a alcanzar un descuento del 80% sobre el valor en libros de estos préstamos. La banca maneja una nueva ronda de provisiones para sus carteras de préstamos hipotecarios, al consumo, de pymes e industriales que rondará entre el 3% y 20%, según el tipo de activo. “Por tanto”, comentan desde una entidad, “no tiene sentido este tipo de proposiciones”.
Entre los ‘vulture funds’ más activos en España se encuentran Fortress Investment, Lone Star Funds, FG Capital Management, Patron Capital Partners o Elliott Management, con quien negocia Novagalicia Banco para que entre en su capital, como adelantó el pasado diciembre Vozpópuli. La mayoría de estos fondos desplazaron a ejecutivos hasta el Palace para cerrar alguna operación.
"Se están analizando estas oportunidades, pero aún hay una diferencia de valor" entre lo que piden las empresas con apuros y lo que están dispuestos a ofrecer los buitres, se refrenda desde un banco de inversión. "Eso está impidiendo que se cierren acuerdos de venta por el momento".
"Tras el rescate, los fondos ya huelen la sangre fresca en los bancos españoles"
Esa diferencia abismal de precios ha frustrado en los últimos meses muchas operaciones entre bancos españoles y este tipo de fondos por paquetes de activos tóxicos ligados al ladrillo. Ni siquiera las fuertes provisiones impuestas por los dos reales decretos de saneamiento inmobiliario sirven para acercar las cifras entre las nuevas coberturas de los bancos y los precios que ofrecen estos fondos oportunidades.
En otras ocasiones, la confianza por lograr un precio más barato ha desbaratado determinadas operaciones. Fue el caso del fondo JC Flowers, habitual pujador en las subastas por las entidades nacionalizadas españolas, cuya división financiera estuvo a punto de firmar un «tentador» acuerdo para comprar 450 millones de euros en convertibles de Banca Cívica. Pero, a la espera de un precio aún más bajo, se echó atrás.
Hace unas semanas, un ejecutivo de Pricewaterhouse aseguraba al Financial Times que España “se ha convertido en un mercado muy activo, más de lo que esperábamos”. “Desde que se aprobó el primer ‘Plan Guindos’ está habiendo muchos encuentros con diferentes fondos buitre. Los ejecutivos de estas firmas recorren Castellana arriba y abajo en las últimas semanas entrevistándose con las entidades, sabedoras del importante esfuerzo en saneamiento que tienen que hacer los bancos españoles. Tras el rescate, los fondos ya huelen la sangre fresca”, manifiestan desde una entidad.