Una denuncia presentada ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en 2016 por el grupo sueco EasyPark va a derivar previsiblemente en que a partir de este año, los madrileños tengan que pagar una pequeña comisión por pagar el parking de la ORA a través del teléfono móvil.
El Ayuntamiento de Madrid, siendo alcaldesa Ana Botella, adjudicó en 2014 el contrato para el servicio de estacionamiento regulado (los parquímetros) y el de BiciMad, por 862 millones por un periodo de 12 años. Los parquímetros de la zona norte de Madrid los gestiona una UTE formada por Dornier, API Movilidad, Vinci Park, Setex y Electronic Trafic; y los de la zona sur por otra UTE integrada por las compañías Valoriza, Tevaseñal, Montajes y Obras, y Estacionamientos y Servicios.
Las compañías que se adjudicaron el contrato desarrollaron aplicaciones para que los usuarios pudieran pagar la ORA a través del teléfono móvil. Pero por las condiciones del contrato con el Ayuntamiento, se les impidió cobrar ese servicio que sí se cobra en otras zonas de España y en otros países. Los conductores que gestionan su aparcamiento en zonas verdes o azules de Madrid a través del móvil no pagan comisión alguna por ello. Desde entonces, las empresas afectadas han tratado de negociar, sin éxito, un acuerdo con el Ayuntamiento de Madrid para poder cobrar dicho servicio.
Los usuarios previsiblemente pagarán una comisión cercana al 10% de la factura, con un mínimo por importe
En 2016 el grupo sueco EasyPark entró en escena. La compañía, el mayor proveedor de Europa de soluciones vinculadas al aparcamiento, presentó una denuncia ante la CNMC contra las citadas UTE que operan en Madrid. En su denuncia, EasyPark explicaba que durante 2015 intentó "infructuosamente" alcanzar un acuerdo con ellas para poder ofrecer su servicio de pago por el móvil. Pero que las empresas se negaron, bloqueando, lamentaba la compañía sueca, el derecho de los ciudadanos al libre acceso a
aplicaciones móviles, argumentando que sólo podían dar ese servicio las aplicaciones desarrolladas por esas mismas empresas.
EasyPark ya había seguido con anterioridad la misma táctica -denunciar ante Competencia- para penetrar en el mercado catalán, donde en la actualidad ofrece su servicio de pago del párking a través del móvil cobrando una pequeña comisión. La CNMC transfirió la denuncia de EasyPark a la Consejería de Economía, Empleo y Hacienda de la Comunidad de Madrid. De acuerdo a dos fuentes que han participado en el proceso, una cercana a la Administración, y otra a las empresas privadas, la Comunidad de Madrid ya ha elaborado un informe en el que da la razón a EasyPark.
Las partes involucradas -EasyPark, las UTEs, y el Ayuntamiento de Madrid- han acordado alcanzar una solución pactada y evitar acudir a los juzgados o posibles sanciones para el consistorio. Las mismas fuentes estiman que el acuerdo finalmente se firmará en el plazo de uno o dos meses y que supondrá la liberalización del pago mediante aplicaciones a través del teléfono móvil de los parquímetros.
La liberalización supondrá previsiblemente que los usuarios paguen una comisión en el entorno del 10% de la factura del aparcamiento, con un mínimo por importe, por el pago a través del móvil. Pero también que tanto las empresas como los usuarios puedan emplear indistintamente una aplicación u otra para cobrar o pagar el párking.
