Ibercaja ha extendido el vencimiento inicial del 36,4% de los préstamos ICO avalados por el Estado a cierre de septiembre de 2021, según explica la propia entidad un folleto de emisiones remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En este documento, la entidad que está a punto de salir a Bolsa, reconoce que los clientes que han pedido una extensión de sus líneas de créditos tienen más probabilidades de incurrir en impagos en el futuro, por lo que un tercio de su cartera cuenta con un potencial riesgo de cara a convertirse en morosos.
El banco realizó en 2020 previsiones por valor de 90,1 millones de euros, de los que 52 millones se registraron como un ajuste para cubrir el aumento del riesgo de crédito de los clientes que no estaban en 'default', pero que, debido al "persistente deterioro de la situación macroeconómica", se esperaba que pasaran a Estadio 2 en 2021. El banco sigue manteniendo esta cuantía.
De hecho, a cierre del tercer trimestre de 2021, los créditos en Estadio 2 se incrementaron en un 15%, si se compara con los datos de 2019. Asimismo, el grupo señala que no puede garantizar que estos créditos "no terminarán clasificándose como dudosos en los próximos meses o años, lo que podría resultar en pérdidas".
Ibercaja y su salida a Bolsa
No obstante, el grupo aragonés que está preparando su salida a Bolsa ha ido soltando píldoras al mercado del buen hacer del banco en captación de clientes y nuevo negocio. Ibercaja ha captado en el último año 4.000 nuevas empresas, principalmente en Madrid y en el arco mediterráneo, de donde proceden un 80% de ellas, dentro de una estrategia marcada por el impulso en este segmento.
Entre septiembre de 2020 y el mismo mes de este año la inversión crediticia en situación normal destinada a empresas se ha incrementado en 338 millones de euros, superando el saldo la cota de 7.700 millones.
La financiación para las necesidades de circulante de las empresas ha supuesto aproximadamente el 50 % del total del crecimiento de la inversión crediticia, algo que refleja la "vuelta a la actividad de las empresas este año".
Ibercaja Banco tiene la ambición de alcanzar una rentabilidad sobre fondos propios (ROTE) del 9% y una ratio de activos improductivos (NPA) del 4% en el medio plazo, unos objetivos más ambiciosos que los fijados para 2023 en el plan estratégico presentado el pasado mes de abril.
Así lo ha comunicado en una presentación corporativa remitida este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en un escenario en el que la entidad está inmersa en los preparativos para salir a Bolsa el próximo año.