Economía

Serra, "convencido" de que el Banco de España conocía los sobresueldos de CatalunyaCaixa

Además el exdirectivo de la entidad financiera ha asegurado que él "no controlaba el rumbo" de CatalunyaCaixa

  • El expresidente de CatalunyaCaixa y exvicepresidente del Gobierno Narcís Serra, durante su comparecencia ante la comisión del Congreso.

El expresidente de CatalunyaCaixa Narcís Serra se ha mostrado este jueves "convencido" de que el Banco de España, y también la Generalitat, conocían los aumentos salariales aprobados a la antigua cúpula de esta entidad financiera, y ha defendido que estas remuneraciones se ajustaban "a la mediana" del sector bancario y que eran "prudentes".

El exvicepresidente del Gobierno y exministro socialista declara desde esta mañana ante la Audiencia de Barcelona, acusado de cometer dos delitos de administración desleal por aprobar dos incrementos de salario para la cúpula de la entidad en 2010, cuando el FROB inyectó 1.250 millones en la antigua caja de ahorros.

"Las decisiones de 2010 las tomamos con el apoyo del Banco de España, que nos consideraba fundamentalmente sólidos. No nos consideraba en absoluto en quiebra, sino que creía que podíamos superar la crisis", ha asegurado Serra, que ha aclarado, en cualquier caso, que él no mantenía una interlocución directa con el Banco de España, pero que los servicios jurídicos de las dos partes sí que estaban en contacto.

Autorización de aumentos salariales

El fiscal acusa al consejo de administración de la entidad de autorizar dos aumentos salariales a los exdirectivos Adolf Todó y Jaume Massana en 2010, uno en enero y otro en octubre, este último mes después de que Caixa Catalunya recibiera 1.250 millones de euros del FROB.

Para justificar estos dos aumentos, Serra ha argumentado que cuando fichó en 2008 a Todó y Massana, ambos procedentes de Caixa Manresa, para "cambiar el rumbo" de Caixa Catalunya, "hubo que ofrecerles más" salario que a la anterior cúpula, y por ello se prometió a ambos que sus sueldos serían equivalentes "a la mediana" del sector bancario.

Serra ha asegurado que, con el fin "de cumplir con el compromiso contractual" con estos directivos, el consejo de administración acordó incrementar sus salarios para "dejar este tema encarrilado" antes de que se fusionaran Caixa Catalunya, Caixa Manresa y Caixa Tarragona para dar lugar a CatalunyaCaixa, marca comercial de Catalunya Banc.

En concreto, a Todó se le aumentó el sueldo fijo en 100.000 euros en 2010 y se le autorizó a aumentar el variable del 35 al 50 %.

Se acordó un "acercamiento por etapas" a ese salario prometido para cumplir con esos directivos y evitar que abandonaran la entidad, ha dicho Serra a preguntas del fiscal.

Serra, "crítico con las remuneraciones"

En un momento del interrogatorio, Serra, que presidió esta entidad entre 2005 y 2010, ha asegurado incluso que él era "crítico con las remuneraciones que se otorgaban en el sector financiero", y cuando el fiscal ha repasado su salario como presidente de la entidad ha comentado que no cobró "ni pluses ni variables ni aportaciones a fondos de pensiones".

A pesar de ello, el fiscal le ha recordado que percibió un total de un millón de euros entre retribución fija y dietas entre 2007 y 2010.

Para explicar el aumento salarial acordado en octubre de 2010, poco después de que el FROB inyectara 1.250 millones en CatalunyaCaixa, Serra ha comentado que Todó tenía derecho, por contrato, a beneficiarse de cualquier "beneficio retributivo" concedido a los empleados de CatalunyaCaixa, y que por eso se le aumentó el sueldo en 12.000 euros.

"En todo momento nuestro ánimo fue de cumplir lo pactado y que Todó se sintiera reconocido, porque la labor de 2010 fue ingente", ha asegurado el exministro.

A preguntas del fiscal, Serra ha remarcado que en materia de remuneraciones "se cumplía a rajatabla la normativa europea", y ha añadido que, de lo contrario, "el FROB no habría capitalizado" la entidad.

Serra ha comentado que pocos meses después de incorporarse como presidente a Caixa Catalunya ya llegó "a la conclusión de que convenía cambiar el rumbo de la caja", y que en 2006 empezó a "preocuparse de la sostenibilidad de la caja a medio y largo plazo".

Serra "no controlaba el rumbo" de CatalunyaCaixa

Con todo, ha querido dejar claro ante el tribunal que él no tenía funciones "ejecutivas" y que, por tanto, "no controlaba el rumbo" de la caja de ahorros, ya que tenía que proponer y lograr tanto el consenso del Consejo, como de la Generalitat y de la Diputación de Barcelona.

También ha subrayado que él fichó a Todó y a Massana para llevar las riendas de Caixa Catalunya "cuando nadie pensaba que vendría una crisis", y ha remarcado que empezó a "sanear" la entidad antes de la caída de Lehman Brothers.

Sin embargo, el Fiscal le ha replicado que inspectores el Banco de España ya advirtieron de la situación crítica de la caja en 2010 y estimaban unas pérdidas potenciales de 5.700 millones.

Serra, en cambio, ha remarcado que el Banco de España creía en 2010 que la entidad financiera "era sostenible". "Todos creíamos que se había acabado la crisis y que el banco resolvería sus problemas", ha apuntado Serra, que ha dicho que en 2010 la entidad ganó 109 millones. 

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli