BBVA Research ha recortado en 1,4 puntos, su previsión de crecimiento para la economía española en 2022, en línea con otros organismos económicos como el Banco de España o Funcas. De esta forma, pasa de estimar un repunte en el Producto Interior Bruto (PIB) del 5,5% este año a apenas el 4,1%, las expectativas más pesimistas expuestas hasta el momento. Para 2023 también recorta su previsión de crecimiento hasta el 3,3%, frente al 4,9% estimado en enero (1,6 puntos menos).
Durante la presentación de su último informe 'Situación España', el servicio de estudios de BBVA ha detallado este jueves que la invasión de Ucrania, las sanciones impuestas a la economía rusa y el incremento en los precios son las principales razones. Para el conjunto de Europa pronostican un crecimiento del 2%, una estimación que se ha revisado a la baja desde el 3,7%. Es decir, 1,7 puntos menos.
"Es una revisión significativa porque el punto de partida que habríamos tenido sin la invasión de Rusia habría sido más alto de lo que preveíamos hace tres meses y, por tanto, el impacto del conflicto va a ser elevado", ha explicado Jorge Sicilia, director de BBVA Research, sobre la economía española. En este sentido, si bien en el primer trimestre se experimentó un crecimiento del 1,4%, "en los próximos trimestres se va a notar más la desaceleración", con tasas incluso del 0%, ha asegurado.
Una inflación media del 7% en 2022
La inflación es la mayor problemática a la que se enfrenta la economía española. En promedio, podría terminar 2022 en un 7% y 2023 en un 2,5%, según BBVA Research, aunque "la inflación podría moderarse este año si la Comisión Europea aprueba la propuesta de los gobiernos de España y Portugal para limitar el precio de la electricidad", apuntan.
Las estimaciones de BBVA Research apuntan a que el impacto del mayor precio de la energía podría restar casi 2 puntos al PIB de 2022 y 1,7 puntos al de 2023. En este sentido, "el impacto por sector será desigual". El aumento en el coste de transporte será especialmente negativo para los sectores abiertos a la economía mundial, particularmente la industria y el turismo, y también para el sector agroalimentario y la construcción.
Rafael Doménech, responsable de análisis económico de BBVA Research, ha explicado que "España tiene una exposición directa limitada a Rusia y Ucrania" y se concentran en algunos sectores importantes (como la energía y la alimentación); pero la exposición indirecta sí es importante. En cuanto a los cuellos de botella, ha añadido que la falta de materias primas puede demorar las decisiones de producción e incluso interrumpirlas si el efecto se intensifica.
Según el informe, se observaría cierta ralentización del gasto con tarjeta de crédito durante la segunda quincena de marzo, afectado por la inflación y centrado en mayor medida en el transporte o la alimentación. Por otro lado, se
observa que sigue aumentando la compra de vivienda, apoyada por los cambios en las preferencias de los hogares, el ahorro embalsado y la inflación. Asimismo, se ha acelerado el gasto asociado a los fondos europeos, lo que, en opinión de BBVA Research, refuerza la transición hacia un crecimiento basado en la inversión.
Sobre la política monetaria, los economistas estiman que seguirá siendo expansiva, aunque se espera el inicio de un proceso de normalización en los niveles de tipos de interés. Así, anticipan que el BCE comience a subir los tipos a finales de año o a inicios del siguiente, una vez que se reduzca la incertidumbre sobre la evolución del PIB y sobre la disponibilidad de gas. Además, prevén que el Banco Central Europeo (BCE) finalice el Programa de Compra de Activos en los próximos meses.