El Banco de España lo tiene claro: las mejoras que pretende incluir el Gobierno en los Presupuestos de 2018 par funcionarios y pensionistas ponen en riesgo el objetivo de déficit. A su parecer, la administración solo se puede permitir este tipo de iniciativas si se compensan a través de la reducción de otros gastos o de subidas de impuestos.
“Con la información de hoy, el objetivo de déficit está en riesgo”, ha señalado Pablo Fernández de Cos, director general de economía y estadística del supervisor en un encuentro con los medios para presentar las nuevas proyecciones del organismo. De hecho, estas nuevas cifras incluyen ya un empeoramiento del déficit en 2018 por la mejora salarial a los funcionarios.
En concreto, el Banco de España espera que 2018 las cuentas públicas acaben con un desfase del 2,5%, tres décimas por encima del objetivo pactado con la Comisión. Y si el borrador de Prespuestos incluye otras medidas expansivas no compensadas, como el aumento de las pensiones mínimas, la cifra de déficit será aún peor.
Asegura que el déficit seguirá en el 1,7% en 2020, frente al 0,5% que espera el Gobierno
De hecho, las cifras de déficit que ha planteado el banco emisor en sus proyecciones son muy negativas. En 2019 el déficit solo bajará al 2,1% y en 2020 seguirá en el 1,7%. Esta cifra dista mucho de la planteada por el Gobierno en la última actualización del Programa de Estabilidad: 0,5%. El Ejecutivo espera, incluso, que en 2020 haya equilibrio presupuestario gracias al superávit de los ayuntamientos.
El emperamiento de las cifras tiene un motivo claro: la relajación de los esfuerzos de consolidación presupuestaria en el corto plazo. Esto genera un tono de política de la política presupuestaria más expansivo que retrasa la reducción del déficit público en términos estructurales y ralentiza la bajada de la deuda.
De estas palabras podemos deducir que si finalmente el Gobierno incluye en las cuentas otras medidas expansivas que hoy están sobre la mesa como la bajada de IRPF o la ampliación del permiso por paternidad, el supervisor volverá a empeorar sus previsiones de déficit. En junio presentará un análisis de los Presupuestos y actualizará de nuevo sus previsiones.
Mejora el PIB
Y es que el Banco de España lo tiene claro: la consolidación fiscal es necesaria para mitigar la vulenrabilidad de la economía y para recuperar la capacidad estabilizadora del presupuesto público ante evventuales perturbaciones adversas. Fernández de Cos ha sido muy claro “hay que aprovechar los periodos de bonanza económica para cumplir el objetivo de déficit”, ha sentenciado.
En cualquier caso, hay que reconocer que estas medidas expansivas han servido también para que el supervisor mejore sus previsiones de PIB. Ahora espera que la economía crezca un 2,7% este año, un 2,3% en 2019 y unu 2,1% en 2020. Ha mejorado las cifras en tres, dos y una décima, respectivamente. El paro, además, seguirá moderándose con fuerza hasta caer al 11% en 2020