Economía

El Gobierno subirá el SMI a 1.080 euros, 15 euros más de lo acordado

El Ejecutivo actualizará sus estimaciones, que han quedado desfasadas, sobre las que se calcula su compromiso con los sindicatos: que el SMI suponga el 60% del salario medio al final de la legislatura

  • La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

El Gobierno va a actualizar su cifra de salario medio estimado, lo que elevará la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) comprometida con los sindicatos. Así lo ha transmitido la vicepresidenta primera para Asuntos Económicos, Nadia Calviño, a los agentes sociales a los que convocó este jueves para buscar un pacto de rentas, según fuentes conocedoras del encuentro. Esta revisión elevará la subida, dado que la cuantía que ha servido de referencia no se actualiza desde 2018, sobre la que se obtuvo el compromiso de elevar el SMI para que suponga el 60% del salario medio en 2023, lo que se ha fijado hasta ahora en 1.065 euros.

La estimación es que el alza del SMI se eleve finalmente al entorno de 1.080 euros, 15 euros más que los prometidos, en 14 pagas, para un salario medio de 25.200 euros. Éste es el escenario con el que trabaja el Gobierno, que va a convocar al Comité de Expertos que le asesora para las subidas del SMI, según avanzó la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, este martes, y a los agentes sociales.

Díaz recogió el guante que lanzó el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, y trasladó que quiere realizar ya una subida del SMI, la segunda del año, para aliviar los efectos de la elevada inflación. En concreto, Álvarez planteó que la ley permite realizar alzas del SMI cada seis meses en coyunturas inflacionarias como la actual.

Este sindicato plantea ya un incremento de entre 20 y 25 euros, lo que podría también beneficiar a las empresas, ya que podrían gestionar mejor hacerlo en dos tiempos que de golpe, de una vez en enero.

Calviño se ha mostrado predispuesta a este segundo incremento en 2022, en un tono positivo que contrasta con la posición que sostenía hace un año, en la que exhibía sus discrepancias con Díaz respecto a la subida del SMI para 2021, que Calviño no veía aconsejable y sobre la que finalmente cedió en verano y se lanzó en septiembre.

Una subida del SMI está comprendida en el pacto de rentas que pide el Gobierno. Así lo ha asegurado Calviño en la rueda de prensa que ha dado tras reunirse con patronal y sindicatos este jueves. Calviño respondía a la pregunta de qué le parece la segunda subida del SMI este año que Yolanda Díaz quiere hacer. 

Fuentes conocedoras de la reunión trasladan que la vicepresidenta primera transmitió esta voluntad, la de seguir subiendo el SMI, además del plan de elevar el salario medio, y con ello, incrementar la subida comprometida, pero que no se pronunció sobre si es partidaria de hacer una parte de la subida ya este año.

Lo sea o no, Díaz va a plantar batalla por activar un alza ya y de momento Calviño no se ha mostrado contraria a esta posibilidad.

El compromiso de la subida del SMI es el segundo gesto del Gobierno a los sindicatos de cara al pacto de rentas que promueve, tras el anuncio de que prepara un impuesto a las energéticas.

Los sindicatos han puesto encima de la mesa en el encuentro su reclamación de que haya más subidas de impuestos a las empresas, en concreto del Impuesto sobre Sociedades, y que se limiten los dividendos empresariales. Calviño no ha respondido sobre qué le parece esta petición y se ha remitido al impuesto a las energéticas que ha anunciado el Gobierno.

La postura de la patronal

No se han producido gestos a la patronal de momento, salvo que Calviño ha hablado esta semana de "moderación salarial", cuando Díaz y el presidente del Gobierno insisten en que las empresas tienen que aportar más.

La principal reclamación de CEOE es que las subidas salariales que propone, del 3,5% -planteó cerca de un 8% en tres años-, no se indexen al IPC mediante una cláusula de revisión salarial, una línea roja para los sindicatos sobre la que el Gobierno no se ha pronunciado.

La subida del SMI de este año, que se aprobó en febrero y se aplicó de forma retroactiva, lo elevó hasta los 1.000 euros mensuales, 35 euros por encima de los 965 euros mensuales en que estaba desde septiembre de 2021, un alza del 3,6%.

Esta subida la acordó el Gobierno con los sindicatos a espaldas de CEOE. Las pymes han sido especialmente críticas con el último incremento y de cara a la negociación salarial en convenio han advertido de que no pueden subir salarios: "El SMI nos ha dejado sin aliento". Cepyme ha alertado de que la subida del SMI a 1.000 euros supone hasta el 90% del salario medio en hostelería y en comunidades como Canarias

Incrementarla a 1.080 euros supondría un alza del 8%, por debajo de la inflación de junio, del 10,2%, y de la previsión media del 9% que manejan ahora algunos organismos, aunque muy por encima del 6,1% que estimaba el Gobierno para este año a principios de mayo.

José Antonio Herce, consultor en longevidad y pensiones en LoRIS, considera que las subidas del SMI que se vienen realizando para una economía "poco productiva" como la española son "desorbitadas". Desde 2018, cuando el SMI estaba en 735 euros, el salario mínimo ha subido un 26%.

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