Ana Botín, presidenta del Santander, tuiteó por última vez el 31 de octubre para felicitar a la Princesa Leonor por la jura de la Constitución. José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, lo hizo el 8 de noviembre, para sacar pecho de su plan estratégico. En las cuentas de los dos tuiteros más conocidos del Ibex no hay reflexión alguna sobre el desafío constitucional que entraña la amnistía pactada por el PSOE con Junts y ERC.
El silencio de Botín y Álvarez-Pallete no es una excepción dentro del Ibex. La mayoría de los presidentes y CEOs no tuitean, pero tienen a mano canales de sobra para valorar el acuerdo de gobierno más polémico desde la Transición. Todos se han puesto, por ahora, de perfil. Sólo ha emergido como 'rara avis' el presidente de Mapfre, Antonio Huertas, quien se pronunció este domingo en redes sociales a favor de "la Constitución y el Estado de derecho".
La discreción máxima de los grandes empresarios empieza a chirriar en algunos círculos económicos. Y abre el debate sobre el papel que deben jugar en circunstancias tan excepcionales y convulsas como las que vive hoy la política española.
La cuestión es si quienes dirigen las grandes empresas deben decir en público lo que no callan en privado: su oposición radical a cualquier atentado contra la seguridad jurídica. Máxime, cuando infinidad de colectivos han dado la cara con celeridad y rotundidad, ante las principales amenazas que acarrea el pacto con los independentistas (vulneración de la separación de poderes y de la igualdad entre ciudadanos).
El ejemplo más claro es el de los grandes bufetes de abogados, que se han manifestado públicamente contra el acuerdo entre PSOE y Junts. Garrigues, Pérez-Llorca, Cuatrecasas, Uría Menéndez o RocaJunyent han dado un paso al frente, amplificando con sus nombres y apellidos las denuncias que habían difundido distintas asociaciones de abogados, jueces y fiscales.
La cuestión es si quienes dirigen las grandes empresas deben decir en público lo que no callan en privado: su oposición radical a cualquier atentado contra la seguridad jurídica
Contra el acuerdo de gobierno y sus consecuencias se pronunciaron también con rapidez otros colectivos. Los inspectores de Hacienda mostraron su rechazo "frontal y absoluto" a la cesión total de tributos y la condonación de deuda a la Generalitat. Los mismos calificativos usaron los inspectores de Trabajo, que denuncian la inseguridad jurídica generada por la amnistía y la amenaza sobre el sistema de pensiones que entraña lo pactado con el PNV. Hasta los sindicatos ferroviarios, poco sospechosos de izquierdismo, han alertado sobre la cesión de los Rodalies a Cataluña y la más que probable entrega de los cercanías a País Vasco.
Hasta ahora, los grandes del Ibex (Inditex, Iberdrola, Santander, BBVA, Repsol o Naturgy) y los mayores grupos familiares -cotizados o no- (Mercadona, Acciona, Gestamp, Iberostar o Antolín) han optado por cobijarse bajo el paraguas de las asociaciones empresariales. Esa falta de empuje puede explicar la llamativa lentitud con la que han actuado la CEOE o el Instituto de la Empresa Familiar (IEF). Nada que ver con la premura con la que se movieron los 'lobbies' del empresariado catalán. Foment del Treball, el Cercle d'Economía o Pimec sí han aireado claramente su apoyo a la amnistía, como vía para potenciar la vuelta de las empresas 'huidas' a Cataluña.
Declaraciones contra la amnistía
Es cierto que el presidente de la patronal, Antonio Garamendi, se pronunció desde el principio "contra la amnistía"; y que su homólogo en el instituto, Andrés Sendagorta, se ha alineado "con la Constitución". Ahora bien, CEOE ha tardado 11 días en emitir un comunicado oficial, contados desde el día en que PSOE y ERC sellaron la ley de amnistía. El retraso llevó incluso a una de las mayores patronales (la madrileña CEIM) a anticiparse y lanzar su propio aviso, el 8 de noviembre. Por su parte, el IEF no reaccionó oficialmente hasta la tarde del martes 14.
Por ahora, dentro y fuera del Ibex pesa demasiado la dependencia del BOE de los negocios regulados (como la energía), la amenaza de nuevas cargas (como el impuesto a la banca o las energéticas) o las implicaciones de ponerse bajo el foco para algunos sectores (como la distribución).
También influye el elevado grado de internacionalización de las mayores empresas, para las que España representa sólo una porción decreciente del pastel. Los casos de Ferrovial (que se llevó la sede social) o de Repsol (que ha puesto en cuarentena inversiones) son sólo dos ejemplos de lo que se avecina en la próxima legislatura, con independencia de que los empresarios decidan romper su silencio o no.
Guagua
No nos defenderá nadie de esta dictadura comunista. Ni el jefe del Estado, ni los grandes empresarios ni Europa, ni nadie. Y ellos lo saben. SON UNOS COBARDES QUE, ENCIMA, VIVEN DE NOSOTROS. miserables.
Aquiles
Ji ji ji me suena a lo mismo que dijo en Galicia y Andalucia …. Resultado Mayoria Absoluta del PP en ambas , verdad ?? Y ahora pasará lo mismo en Madrid , hay vida inteligente en VOX ???
Ansurez
Solo los ricos pueden permitirse no tener patria (Ramiro Ledesma)
MuyMalaHostia
Cerdos
Norne Gaest
Azahar, yo creo que lo he entendido desde el principio, hasta ahora inteligencia media, pero me refiero en como llega al público en general, teniendo en cuenta que la posición del PP y sobre todo de Ayuso tendrá siempre preferencia o mayor consideración en los medios de comunicación. Y los mismo vale para los casos que se te hayan escapado. Está claro, verdad?
Talleyrand
El problema de España ha sido y sigue siendo sus elites. Sinceramente, las peores de Europa e incomprensible que un pais así que lo fue todo siga teniendo tanta miseria en la cuspide. Los mismos que se vendieron a napoleon en Bayona "para seguir chupando" cuando el Estado tenia medio mundo y su ejercito era de los mas respetados , esos mismos son nuestra miserable "España de Vichy". Los entregados por nada. Dicen una cosa en privado y hacen otra cosa en publico, siempre pendientes de las consecuencias. Los mas valientes se van de "progrelandia" sufriendo todo tipo de presiones (Luis del Pino y Ferrovial). Los mas cobardes se envuelven en lo ecosostenible, lo politicamente correcto y el atronador silencio en algunos casos cuando en otros se ponen en primera fila. Viven del BOE, de que no les apliquen impuestos especiales si son obedientes o incluso son participes con los felones de asaltos a empresas publicas. No hay separacion poder IBEX y si alguien le queda alguna duda en los USA se hjabla del SP500 (500 empresones) mientras aqui seguimos languideciendo con el IBX 35 (35 compañias cuyos CEOS caben en un autobus (caben hasta 50 asientos) Miseria, seguidismo cobardia. Con esos materiales no se puedfe construir un pais libre.
Techlogic
Aún estando de acuerdo con casi todo hay que tener en cuenta la realidad, y la realidad es que : Pedro Sánchez es el DUEÑO del B.O.E. Y que Pedro Sánchez es VENGATIVO, muy vengativo. Por eso es un autócrata y tiene alrededor a los palmeros funcionarios a su lado. .
Norne Gaest
De acuerdo con el comentario de syloxozi. Si la gente del IBEX no es capaz de tener sentido patriótico ni en circunstancias como las actuales, sino que priman la cobardía y el cálculo de vuelo gallináceo, luego no tendrán, de cara a la ciudadanía, autoridad moral para quejarse de nada. Su patria, efectivamente, serían su empresa y la pasta.
syloxozi
La patria de los grandes empresarios es su empresa y la pasta. Ellos van a vivir de p.tisima madre gane quien gane, haya amnistía o no la haya, con independencia i no y tengan que pagar lo que tengan que pagar porque luego ya lo repercutirán a sus clientes, los cuales lo repercutirán a su vez a los consumidores. Al final, el consumidor es el que termina pagando toda la fiesta. Ni huelga general, ni de camioneros, ni de policias, ni rey, ni puñetas, una huelga de consumo durante unos pocos días (con solo dos o tres días es suficiente) y se encenderán de verdad todas las alarmas y la cinta transportadora de culpas. Eso si que puede hacer caer al gobierno porque los del Ibex son tan mafiosos o mas que los separatistas y bilduetarras juntos. Pero claro, además de vivir en un país de cobarde, vivmos en un país donde los sindicalistas no son los únicos comegambas.
JMMoreno
Son socios fundamentales de Sánchez. Sin ellos no habría Amnistía. Sánchez dura dos días si las movilizaciones fuesen alrededor de sus empresas.