Telefónica y MásMóvil han sido los dos únicos grandes operadores de telecomunicaciones que acudieron a la segunda convocatoria del plan Único Banda Ancha, en virtud del cual se pretende expandir la fibra óptica a toda la geografía española.
Ni Orange ni Vodafone se presentaron al concurso público, dotado de 244 millones de euros que se repartieron principalmente Adamo, Telefónica y Avatel, además de otros operadores especializados en desplegar infraestructuras de red en lugares de acceso complicado.
La rentabilidad es uno de los factores que principalmente tienen en cuenta las compañías de telecomunicaciones para acudir a este tipo de licitaciones públicas. Lo cierto es que el hecho de que ni Orange ni Vodafone acudieran al concurso no es algo que suceda por primera vez. Se puede decir que es algo casi histórico.
Sí fue noticia que se presentará MásMóvil. La corporación dirigida por Meinrad Spenger quería aprovechar la experiencia de Euskaltel -empresa que adquirió el año pasado- en los despliegues rurales, para trata de ganar alguno de los más de cincuenta concursos provinciales que se lanzaron. Tocaron hueso. Los amarillos no ganaron ninguno de ellos.
MásMóvil se presentó a diez licitaciones para llevar fibra óptica a localidades de Teruel, Huesca, Cuenca, Zaragoza, Guadalajara, Salamanca, A Coruña, Pontevedra, Guipúzcoa y Vizcaya. Como decimos, no tuvo fortuna en ninguna de ellas. La justificación para declinar las propuestas de los amarillos fue la misma en todos los casos: "La puntuación total obtenida por el proyecto no ha alcanzado el valor de 5 puntos".
Telefónica cambia de estrategia
Telefónica, que hasta no hace mucho no se presentaba a este tipo de concursos, ha virado de estrategia y, apoyada en su gran capilaridad de red, se está presentando a las diferentes fases del plan Único Banda Ancha.
Sin embargo, el gigante azul ha encontrado una piedra en el camino. Se llama Adamo. El operador, propiedad del fondo Ardian Infraestructure, ha sido el gran vencedor de la segunda fase.
Adamo repitió en esta segunda convocatoria como principal triunfador. La compañía llevará Internet de alta velocidad a más de 312.000 viviendas de 17 provincias. El plazo para ejecutar los trabajos comenzará una vez que la resolución sea firme y finalizará el 31 de diciembre de 2024. Las subvenciones que recibirá para cumplir con este objetivo son de casi 100 millones de euros.
Vodafone, por su parte, ha preferido centrarse en el despliegue de red 'general', para lo cual ha invertido en España 635 millones de euros, tal y como refleja su informe de resultados integrado correspondiente al periodo comprendido entre el 1 de abril de 2021 al 31 de marzo de 2022.
La primera fase del plan Único-Banda Ancha se adjudicó el año pasado por 250 millones de euros, que sumados a los 244,6 millones de euros de la segunda convocatoria, cerrada hace unos días, suponen alcanzar prácticamente los 500 millones en subvenciones para que la fibra, a velocidades como mínimo de 30 Mbps, llegue a la mayor cantidad de pueblos de la geografía española.
"El Plan de Recuperación ha previsto una inversión de 2.000 millones de euros hasta 2023 para extender y mejorar las infraestructuras digitales, reforzar la cohesión territorial y hacer frente al reto demográfico. El objetivo, también recogido en la agenda España Digital 2025, es que el 100% de la población española tenga cobertura de banda ancha en 2025", manifestaba hace unos días el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital en nota de prensa.
