Unos 240.000 trabajadores han firmado sus convenios colectivos en los primeros cuatro meses del año. El gran repunte se produjo en el mes de abril, cuando se duplicó el número de empresas y trabajadores que habían actualizado su convenio entre enero y marzo. En concreto, hasta marzo habían alcanzado un acuerdo 112.256 trabajadores y 9.003 empresas. En abril, esa cifra se incrementó hasta los 237.980 y 22.018, respectivamente.
De esta forma, entre enero y abril, con la inflación en niveles históricos, se firmaron 119 convenios que incluían una subida salarial media del 2,10%. Esta cifra está muy alejada del Índice de Precios de Consumo (IPC), que creció un 8,4% en abril. En marzo se aproximó al doble dígito, con un incremento del 9,8%, lo que obligó al Gobierno a aprobar un paquete de medidas para rebajar los precios energéticos.
El resto de convenios activos a cierre de abril, que ascienden a 1.918, se negociaron en años anteriores, cuando la inflación no estaba tan elevada. Aún así, la variación salarial media que incluyen es incluso superior, del 2,42%, según figura en la Estadística de Convenios Colectivos publicada por el Ministerio de Trabajo esta semana.
Trabajadores y empresas acuerdan las subidas salariales más bajas desde 2018
Si se compra con las subidas salariales firmadas en los cuatro primeros meses de otros años, también se percibe una revalorización más moderada. En 2021, los convenios firmados entre enero y abril contemplaban una subida del 2,33%. En 2019, fue del 2,28%. La excepción fue 2020, cuando la covid-19 desestabilizó estas negociaciones. De hecho, sólo 53.000 trabajadores firmaron su convenio en el primer cuatrimestre, la mitad que este año.
Centenares de convenios por negociar
En cualquier caso, cerca de 400.000 empresas todavía tienen que renovar sus convenios colectivos en los próximos meses con la inflación disparada, lo que está dificultando la negociación y complicará los acuerdos. En concreto, se contabilizaron 505.618 empresas con convenios registrados y con efectos a cierre de febrero, frente a las 896.702 compañías que firmaron uno a lo largo del 2021.
Además, Caixabank Research asegura en un informe publicado esta semana que "hay que esperar entre nueve meses y un año desde que aumenta la inflación para que el impacto sobre los salarios se pueda observar en toda su magnitud". Según la evidencia histórica, un incremento de la inflación subyacente de 1 punto porcentual, llevaría a un aumento de la variación interanual de los costes salariales ligeramente inferior a 0,4 puntos un año después".
Tras romperse la mesa en la que se buscaba un pacto con los sindicatos para renovar el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), CEOE defiende que no deben firmarse alzas por encima de 3,6% como la del SMI de este año. Los sindicatos, por su parte, reclaman subidas con cláusulas de revisión salarial que garanticen la revalorización conforme al IPC.
Según el Banco de España (BdE), cerca de la mitad de los trabajadores que han firmado sus convenios para 2023 vincularán sus salarios al IPC a través de cláusulas de garantía, algo que consideran preocupante. El supervisor ha advertido que trabajadores y empresas deben seguir asumiendo parte de la crisis de precios porque, de no ser así, la inflación media alcanzará el 9,8%. No se alcazaba una tasa superior desde 1984, cuando la variación media del IPC se situó en el 11,3%, según los datos del INE.
Caixabank Research explica que con estas tasas de inflación y la perspectiva de cierta continuidad a lo largo del 2022, una de las principales preocupaciones son los temidos efectos de segunda ronda, que se producen cuando los trabajadores demandan salarios más altos para mantener su poder adquisitivo y las empresas terminan subiendo precios, iniciándose una espiral salarios-precios. El BdE ha advertido que si esto no se cumple, la economía podría crecer un punto y medio menos entre 2022 y 2024, según sus cálculos.
Yorick
Un 3%... ¡Qué espanto! ¿Y dónde dice que hay que ir a firmar eso?
Norne Gaest
Gran comentario.